Emperatriz

Parte 3: Emperatriz Palpatine Señora Oscura de los Sith: Capítulo XLIV

5 años después

El joven de 28 años al mando de su ejercitó para dominar la galaxia se encontró con su madre frente a frente.

-Si, tanto te preocupaban mis decisiones, debiste decírmelo directo a la cara ¿que pasó madre? ¿tanto quieres gobernar?
-Te lo dije y no me escuchaste. Te lo advertí muchas veces ¿y que hiciste? No te importaron mis consejos. Yo he gobernado este imperio de una manera excepcional.
-Este es mi camino sea para bien o para mal, y tu debes aceptarlo... o de lo contrario pagarás las consecuencias.
-¿Que vas a hacer? ¿matarme? Como lo hiciste von varias mujeres y niños... asesino.
-Voy a mover cielo y tierra para destronarte, te convertias en mi sombra... madre.
-¡Yo soy la señora oscura de los Sith! ¡La Emperatriz Palpatine! ¡Nadie puede destronarme! ¡Solo me van a derrocar muerta! ¡Si eres lo suficientemente valiente, si crees tener el valor para hacerlo entonces matáme!

-¡Sheev! ¡Sheev, despierta ya estamos atrasados!

Del susto vio a su hermano quitandole las sábanas.

-Mamá tiene una reunión especial con los senadores de Bastión, Corusant y Tralus, además de los representantes del ejercito imperial. Lo que Zayne descubrió es grave.

Entonces Dathan salio de los aposentos, dejando a Sheev pensando en el sueño que tuvo.

-Dathan toma tu desayuno tranquilo ¿si? No te hace bien comer tan tenso -le recomendo Zayne a su hermano a travez del holoproyector-.
-Lo sé. Espero que mamá averigue más sobre lo que ocurrio en Felucia -le respondío-.
-He pasado estos últimos años tan enfocada en la política, creo que he dejado de lado las cosas mas importantes -se lamento Zayne-.
-¿De que hablas? Gracias a tu gestión logramos captar todos los tratos irregulares entre Felucia y los contrabandistas de armamento. Ya van 7 planetas involucrados, Zayne. Mamá ya envió a cada planeta a miembros del consejo imperial para mantenerlos bajo control. Se viene un guerra, lo sabes.
-Pero creo que cometí el mismo error que la abuela. Los he dejado de lado, Dathan. Mamá muchas veces me lo advirtío. Es difícil liderar con las responsabilidades políticas sin dejar de lado tu vida personal -comento con mirada melancolica-.
-Estás salvando muchas vidas. Vale la pena el sacrificio -la reconforto su hermano-.
-Se me hace tarde, ya me tengo que ir a mi reunión -le sonrío-.
-Tai ye va a acompañar. No dejare que vayas sola, ahora que todos saben que tu descubriste este embrollo.

Zayne se lamento de su faltas de tiempo al no poder compartir mas con Tai. En el fondo sabía que se había refugiado en la política para evitar pensar en una relación amorosa imposible.
Rey entro a la gran sala de reuniones, donde ya estaban sentados los senadores asosiados al caso.

-¿Que novedades nos tiene senador Jarrik Mankoch? -pregunto de inmediato Rey-.
-Envie varios tropas en Felucia para averiguar más sobre este contrabando, pero no he podido ubucar a los culpables -contesto el senador-.
-Mi hija ya las hizo casi todo el trabajo, solo exijo compromiso si no quieren una nueva guerra. Oh de lo contrario mi ira rodara sobre todas sus cabezas -dijo Rey molesta- Esto es una amenaza real a la paz general que se ha logrado. Aún quedan planetas con conflictos internos, pero esto va más allá. Si hay alguna alianza oculta en contra del sistema de gobierno con tal nivel de armamento, la galaxia está en riesgo.
-Esa debe ser nuestra propiedad, es muy peligrosa su manipulación -agrego la senadora de Corusant-.
-Enviare más espías a Felucia, lo prometo -señalo Jarrik-.

La reunión se cerró llevando a cabo investigaciones en cada rincón de la galaxia.
En Naboo, Tai y Zayne salieron a recorrer el interior del palacio.

-El pueblo esta muy contentó con tu desempeño -la halaga Tai-.
-Lo sé. Me he esforzado mucho estos años para ser digna del puesto.

El palacio estaba vacío, así que contemplan con calma todos los cuadros de los monarcas que tuvo Naboo.

-Ella es mi bisabuela -señalo Zayne-.
-Era muy hermosa -comento Tai-.
-Si, mi bisabuelo se enamoro de ella a penas la vio -murmuro con tristeza-.
-¿Que ocurre? ¿Te puedo ayudar? -le pregunto Tai-.
-Se... se que he usado la política para no pensar en lo que siento -dijo Zayne sin mirarlo-.

Zayne partío hacía Corusant donde se reuniria con su madre. En Corusant se realizaba una reunión con la llegada de la reina de Naboo.

-Emperatriz, tenemos novedades... los planetas involucrados han desistido de seguir con el contrabando. Reconocen que no están unidos contra el imperio, solo lo hicieron para mejorar su economía.

-Eso es una excelente noticia -comentó Rey con una sonrisa-.
-Sí, pero algo extraño esta sucediendo en Felucia. La búsqueda se dificulta. Tampoco hemos encontrado el armamento que se supone que debería estar acumulado.
-Iré inmediatamente a Felucia y necesito que ustedes se dirijan allá ahora -ordeno Rey-.
-Si, Emperatriz -respondieron los hologramas a la vez-.
-¿Sospechas que fueron usuarios oscuros, madre? Se suponía que esto era un problema de contrabando -se preocupó Zayne-.
-Todo parece indicar que no -le respondío su madre seriamente- ¡Preparen sus cosas! ¡Nos vamos a Felucia!.
-¡¿Y si están en la luna?!
-Cariño, ¿por que piensas que el armamemnto está en la luna? -le preguntó su madre-.
-Porque la voz siempre me habla de la luna.
-¿Que voz? -preguntó de inmediato su madre-.
-Mamá, tranquila. Lo que pasa es que hace un tiempo, Sheev estuvo escuchando una voz que le habla a veces. Yo ya descubrí que no viene de Naboo, sino de mas lejos -dijo Dathan-.
-Si, es verdad. Aveces pasan semanas sin oírlo y a veces vuelve -afirma Sheev-.
-¡¿Pero como es posible que me oculten algo así?! Sheev, dime ¿Que te dice exactamente la voz? -quiso saber Rey-.
-En la luna, a la luz de la luna, mientras te veo escondiendote del sol. Eso es lo uníco que dice.
-Felucia tiene ocho lunas ¿en cual de todas? Si nos intentará ayudar no sería una voz sin cara. Después de terminar esta batalla hablaré muy seriamente con los tres.
-Si, mamá -dijeron sus tres hijos a la vez-.

Fin del cap 44