3. Schelchetel tag

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“Hay días en los que después de la tormenta, el cielo se mantiene nublado”

Abro los ojos y me quedo mirando el techo, es blanco sin más, toda la habitación lo es, la decoración es minimalista, muy aburrida a mi gusto. Me levanto intentando destruir todos mis pensamientos con cada paso.

Apago por fin la alarma, apenas y dormí unas horas, agarro mi teléfono para ver qué día es, viernes, sonrío satisfecho, mañana ya es sábado. Me apresuro a sacar la ropa que usare de la maleta para cambiarme. Bajo las escaleras una vez haber terminado de bañarme, una vez abajo veo a Arlon sentado en la mesa desayunando, al verme me indica con un movimiento de cabeza a que me acerque, le hago caso y me acerco, hay otro plato sobre la mesa con huevos y jamón, me siento y empiezo a comer sin mirar al director.

Después del desayuno iba a ir a la parada para agarrar el autobús, pero el director me lo impidió y me trajo a la escuela en su auto, intente negarme, pero fue imposible llevarle la contraria. Ahora ando caminando por los pasillos, se supone que debería estar en el turno de química, pero no me apetecía entrar. Llego al gimnasio y hay un grupo dando clases, educación física a primera hora que lamentable para ellos, me siento en las gradas observando desde la lejanía, parece ser que están entrenando resistencia, puedo deducir eso porque están corriendo por el gimnasio ¿Por cuánto tiempo abran estado dándole vueltas?

Intento encontrar al profesor que imparte la clase, logro localizarlo y para mi sorpresa no es el hombre viejo y gordo que nos daba clase en segundo año, ahora es una profesora atlética, lo peor que te puede pasar en educación física es que una mujer atlética imparta clases, que puede ser muy linda, pero demasiado exigente.

Al comprobar de que mi presencia ha pasado desapercibida saco una caja de cigarros, rebusco entre mis bolsillos hasta que doy con el encendedor, prendo el cigarro, el cual por cierto es de sabor uva, aprieto en el lugar que se indica para que se libere el sabor para después llevarlo a mis labios, doy una calada y mantengo el humo en mis pulmones por un tiempo, después de unos segundos libero el humo.

Al liberar el humo siento como con él se van los pensamientos molestos, vuelvo a repetir el proceso varias veces hasta que el cigarro se termina. Tengo ganas de fumar otro, y lo hago, prefiero no quedarme con el deseo.

Después de casi terminarme la caja de cigarros me levanté y fui a la clase de biología, el profesor estaba más animado que de costumbre, también agarraba a Luke mirándome debes en cuando. El timbre toco y ahora tocaba matemáticas, me levanté y me dirigí a la clase correspondiente.

El profesor dejo mucha tarea, nos avisó que la calificaría, también advirtió que quien no la hiciera iba a estar fuera del salón su próxima clase. La idea de faltar a matemáticas me pareció más que tentadora, pero prefiero conseguir esos puntos básicamente regalados.

En estos momentos estamos en el descanso, voy caminando por los pasillos, Henry se aproxima a mi interponiéndose en mi camino, lo observo extrañado, siento un toque en mi hombro y al voltear a ver recibo un puñetazo, al lograr enfocar veo a Luke, mi sangre comienza a hervir, empiezo a recordad toda la mierda que tuve de día ayer, le pego un puñetazo, lo recibe en toda la cara, va a devolvérmelo, pero le pego otro, y otro y otro, algo me golpea desde atrás, pero no volteo, sigo concentrado golpeando al puto gilipollas en el suelo, empiezo a sentir que varias manos me jalan hacia atrás, intento seguir en mi lugar golpeando al que tengo en frente ¿quién era? ni idea ¿por qué lo golpeo? no se ¿acaso eso importa?

Empiezo a escuchar que gritan mi nombre, lucho por zafarme del agarre, lo logro por unos segundos, pero logran volver a detenerme antes de volver a golpearlo, le doy un puñetazo a alguien de mi alrededor, le doy otra vez, golpeo a alguien más, grito molesto, hierve, la sangre de mi cuerpo está demasiado caliente, mis puños duelen, quiero que duelan más, siguen repitiendo mi nombre, lo repiten una, y otra, y otra, y otra vez.

SombraWhere stories live. Discover now