cap 9

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Lynn

Estaba entrenando en la cancha sola, había llegado 20 minutos antes así que decidí empezar. Luego de esa fiesta apenas habían pasado pocos días desde que había visto a Halle.

Estuvimos hablando un poco por chat, pero soy muy obsesiva con mis entrenamientos y ella estaba entre muchas cosas con Chad.

—¡Lynn! —escucho un grito cuando entran a la cancha, yo estaba trotando, apenas llevaba 17 minutos.

Veo que es Halle y la saludo con la mano mientras que sigo trotando.

—Necesito que hablemos —me dice ella y le hago señales con mi mano para que corra conmigo— ¡Lynn!

—¡Ven! —le grito mientras sigo trotando.

Ella suspira y se acerca a mi mientras trotamos las dos.

—Dime.

—Es Chad —murmura— me dijo muchas cosas, necesito contarte todo.

Hago un ademán para que siga.

—¿Cuanto falta? —pregunta ya cansada. Le hago una seña de que solo quedan 2 minutos— no puedo, préstame atención.

Ella toma mis hombros y hace que me detenga.

—Le gusto a Chad —me dice haciendo un puchero— ¡él no me gusta!

—Halle...

Ella me abraza y deja su cabeza en mi cuello.

—Él no me gusta, me dijo que de verdad quiere como formalizar todo —me dice y se aparece de mi aunque aún toma mis hombros— yo solo me fui diciendo que tú me necesitabas.

—Vale... —la tomo de los hombros cuando veo que se está alterando— dime.

—Me dijo que le gusto, que la verdad me mintió tratando de acercarse más a mi, pero a mi no me gusta él.

—Tienes que decirle que no te gusta, que no se siga ilusionando.

—No puedo —dice negando— no me gusta romperle el corazón a la gente, Lynn.

—Halle no tienes otra opción, a menos que quieras estar con él de verdad.

—No —ella niega y me abraza de nuevo— no sé que hacer, no tengo ni la menor idea.

—Ya te dije la única opción que se me ocurre —le digo acariciando su cabello— mira, aunque no lo creas no es el fin del mundo ¿si? no va a pasar nada porque le digas que quieres acabar su relación, aunque sea falsa.

—Ayúdame —me dice muy cerca de mi cara.

—¿Como te podría ayudar yo?

—Termínale por mi.

—Halle

—Por favor —me dice tomando mi cara y dejando su frente en la mía.

—Puedo estar contigo si eso quieres, pero es tu deber hablar bien con él.

—¿Luego de tu entrenamiento?

—No creo que quieras vernos entrenar por dos horas —le digo riendo.

—Pero te necesito.

—De acuerdo, si eso quieres te acompaño después de mi entrenamiento.

***

Halle cargaba mi chaqueta -de nuevo- ya que hacía frío y siempre cargaba una chaqueta de más.

—Dame tu mano, necesito fuerzas —me dice y entrelaza nuestras mano cuando nos estamos acercando a su casa.

Ella toca el timbre y a los minutos aparece Chad.

—Halle —sonríe y luego me mira— con Lynn, ya parecía extraño que no estuvieras detrás de ella.

—Chad —dice Halle mirándolo fijamente— vine a decirte...

—¿Tiene que estar ella? —pregunta mirándome— un día apareció de la nada en tu vida y nunca se fue, y como eres mi novia apareció también, ella es un poco molesta.

—Halle quiere terminar contigo —le digo ya un poco enojada— no le gustas.

—¿Le contaste a ella? —le reclama Chad a Halle— se supone que era un secreto, Halle.

—También se suponía que era algo arreglado —le dice ella— que ninguno de los dos siente nada por el otro.

—¿Entonces por qué aceptaste? Yo tuve mi razón, quería estar cerca de ti, ¿cuál fue la tuya?

—Yo estaba cansada de que mis papás me preguntaran por un novio —le replica ella— li siento por no cumplir con tus expectativas de que los novios falsos se hacen novios reales.

—¿Te gusta alguien más? —le pregunta Chad.

—Sí ¿algún problema? —se queja ella y me jala para ir fuera de la casa— ¡Ni me llames de nuevo, Chad! ¡O les diré a mis amigos que eres gay!

—¡Halle!

Ella se va enojada aún tomando mi cara y la detengo porque está caminando muy rápido.

—Cálmate —le digo tomando sus hombros— Halle, por favor, ya estás bien, querías esto ¿no?

Ella asiente y me abraza.

—Ya no tengo novio falso, ufff.

Menos mal.

—Te llevo a tu casa y luego me voy a la mía —le digo y ella me abraza— ¿te parece?

—Si —ella me sonríe y seguimos caminando— mañana te quiero invitar a hacer un picnic.

—Halle, yo...

—Y antes de que te niegues, va a ser después de tus entrenamientos, tengo todo calculado.

—¿Cómo sabes a que hora tengo entrenamientos?

—Soy yo quien organiza tus horarios —se ríe— soy como una mini asistente para mi papá, y las últimas semanas he acomodado todo a mi antojo.

Yo río y ella me sonríe amablemente.

____

volví de nuevo, ahora si ready 🤟🏻

-luv

STORY OF US | LYNN LOUD JR ✓Where stories live. Discover now