una argentina en España se muda a un departamento donde tiene un vecino un poco... ruidoso por la tarde y noche.
Luego de conocerse, comienzan a caerse mal entre ellos pero aún así, se van conociendo de apoco hasta darse cuenta que tienen muchas co...
Dejé en el suelo la última caja y saqué de mi bolsillo las llaves de la casa. Abrí la puerta y suspiré mientras veía todas las cajas que estaban dentro.
Ya cansada, empujé la caja con mis pies hasta ya estar completamente dentro y después Cerré detrás mío la puerta.
Me estiré, agarré unas tijeras y empecé a abrir las cajas una por una.
Me gustaba mucho hacer esto y me calmaba ordenar las cosas.
Cuando ya tenía más o menos las cosas guardadas, agarré algunas cosas que iban en el balcón y fui hasta la puerta de vidrio.
Abrí con una mano que de pedo estaba desocupada y salí a afuera.
Dejé un par de cosas y cuando vi rápidamente al balcón unido de mi vecino, la puerta de vidrio estaba abierta y en ella se podía ver una sombra que veía desde adentro.
Volví a entrar rápidamente al departamento y seguí acomodando las cosas tranquilamente.
Era un poco raro mi nuevo vecino pero bueno... tal vez alguna vez nos podamos presentar.
Me senté a descansar un rato y después volví a levantarme para bajar a la recepción.
Salí del departamento y después subí al ascensor. Apreté el botón a la recepción y después de unos minutos llegué.
Salí del ascensor y fui hasta la recepcionista que era una señora que era muy amigable con todos.
—hola como le va— le dije mientras le sonreía
—que tal cariño? Que necesitas?— me preguntó sonriéndome
—le quería informar que saldré unos minutos, si llegan más cajas déjenlas subir, si por favor?— le dije mientras le sonreía amigable
—claro que si querida... nueva verdad?— me preguntó
—si... vengo desde Argentina y todavía me faltan algunas cosas para traer— le dije mientras suspiré y sonreí cansada —una pregunta... quien es mi vecino del 4B?—
Veo como se pone a pensar mientras veía a otro lado y después me volvió a mirar
—no hay ninguna persona allí— la miré asustada y sorprendida por lo que me dijo —es broma es broma... si hay, un chico muy bueno y guapo—
Suspiré por el susto y sonreí mientras la veía que me miraba picaramente
—no lo vi todavía... igual creo que era él quien vi en el balcón— le dije mientras me cruzaba de brazos
—si... él es un chico muy bueno aun que casi nunca sale solamente a esta hora y luego vuelve en la noche— me contó mientras me veía
Yo Asentí entendiéndo lo que me contaba sobre él.
—debe de trabajar mucho...— le dije mientras veía a otro lado
—eso parece... oh, justamente aquí viene— me susurró lo último
Cuando me giré, vi un hombre alto con traje, el pelo un poco largo y la barba igual.
—nos vemos Marta— le dijo él seriamente a la recepcionista
—hasta luego querido, que tengas un buen día— le dijo con una sonrisa y lo saludó con la mano
Cuando ya lo perdí de vista, me giré y miré a la señora
—bueno... ya me voy— le dije mientras le sonreía
—vale cariño, cuídate por las calles y no te pierdas— me dijo
—no no, muchas gracias— le sonreí amigable y después seguí mi camino por las calles de Barcelona.
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El mismo día
10:09 p.m
Estaba tranquilamente en el balcón viendo como la luna y las estrellas brillaban.
De la nada escucho como la puerta del balcón de mi vecino se abre y cuando me giré, lo vi.
Tenía un cigarrillo prendido entre sus dedos, tenía una gorra puesta y estaba abrigado con un buzo y pantalón largo como yo usaba.
Él ni me miró y se acercó más al final del balcón y empezó a ver toda la ciudad mientras fumaba.
Por el viento, todo el humo iba a mi dirección haciendo que me moleste y haga que empiece a toser.
—podrías por favor apagar el cigarrillo?— le pedí un poco molesta mientras lo veía
—estoy en mi casa, no tengo por qué hacer lo que tu quieras— me dijo calmado y sin ninguna molestia
—literalmente compartimos balcón, vos estas en mi propiedad también— le dije mientras lo veía
—y tú en la mía muñeca, así que no me molestes— me dijo mientras veía a otro lado y sonreía
—te parece gracioso que esté sufriendo por el humo de la mierda esa?— le dije mientras me acercaba y lo veía enojada
—no, me parece gracioso que una enanita como tú, se enoje tan tierno— me dijo mientras ahora me veía
Ahí mismo me sonrojé, nadie nunca me dijo q me enojaba tierno y me hizo ponerme nerviosa
—enana?— me crucé de brazos tratando de olvidar el resto de la frase y lo miré todavía sonrojada
—venga nueva vecina, ve a dormir si? Mañana tienes que seguir acomodando cosas y haciendo ruido— me dijo mientras reía y veía a otro lado
—la "Nueva vecina" tiene nombre— le dije mientras hacía las comillas con mis dedos
—ahh si? Y cual es? Enana argentina?— me dijo mientras se reía
—enana la tenes taradito— le dije ya enojada mientras me volvía a la puerta de mi departamento al mismo tiempo que escuchaba sus risas
—recuerda que sigo siendo tu vecino y seguimos compartiendo balcón— me dijo mientras yo trataba de cerrar la puerta del balcón.
Saqué mi brazo y le hice fuck you para después cerrar la puerta de vidrio.
Enserió no podía creer que iba a tener un vecino así y peor, voy a tener que compartir balcón con él...
Suspiré y me preparé para dormir cosa que no pude hacer por pensar en todo lo que había pasado hace rato con mi "querido" y nuevo vecino, Robert o que se yo como se llama ese tarado de mierda.
Después de un rato de tanto moverme por toda la maca y que me haya levantado 30 veces para ir al baño y tomar agua, me dormí tranquilamente en mi calentita cama en una noche de invierno lejos de mi familia...
