La historia comenzará desde la temporada dos a la ocho.
La historia será casi igual que la serie sólo que con un nuevo personaje ósea t/n.
Ningún personaje es de mi creación, sólo t/n.
Espero les guste.
Está historia es 100% mia, se prohíben copias!
Los meses pasaron desde que los salvadores se rindieron, desde que esa lucha parecía no tener fin. Avanzamos, hicimos que funcionará el trabajar todos juntos, no había sido facil, pero se logro, todas las comunidades se abastecían entre todas por igual y funcionaban bien. Al principio nos había costado un poco a Daryl y a mi, estar a cargo del santuario, pues los recuerdos que teníamos ahí no eran muy buenos, pero aún así supimos mantener el orden, tanto en nosotros como con los salvadores que estaban aquí.
Las grandes puertas de Alexandria se abrieron frente a nosotros dejándonos pasar.
Daryl y yo nos bajamos de la camioneta y comenzamos a saludar a los demás.
- ¡Que gusto verlos!
Me dijo Michonne, mientras me abrazaba.
Su miraba se dirigió hacia mi panza, la cual ya era muy notoria por el embarazo.
- ¡Dios! Mírate. -dijo ella con una gran sonrisa.- ¿Cuánto te falta?
- Muy poco, tendrías que ver a Daryl, está cada vez más paranoico por la llegada del bebé. -dije riendo un poco.-
- No lo dudo.
Ambas soltamos una risa, pero deje de reír cuando escuché una voz algo chillona, mire en esa dirección y pude ver cómo la pequeña Judith, venía hacia mi con sus brazos abiertos y con una sonrisa.
- ¡¡¡Tía ___________!!!
Yo sonreí enormemente al verla llegar y sentir su pequeño abrazo, me incline un poco para mirarla mejor. Había crecido tanto está niña.
- ¡Hola! -la saludé feliz.-
Judith se separó un poco de mi y puso su pequeña mano en mi panza.
- ¿Cuánto falta para que pueda conocerlo?
- Falta poco pequeña. -le dije sonriendo.-
Judith soltó un chillido de emoción el cual me lleno de ternura, después ví como se puso al lado de Michonne, quien la miraba con mucho cariño.
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- Cada vez está más grande. -le dije y ella asintió dandole una pequeña caricia.-
- Pero bueno, ¿A mí no me piensas saludar?
Se escuchó la voz de Rick, mientras se acercaba a nosotros, yo lo mire y sonreí, para después acercarme a él y darle un abrazo.
- ¿Que tal todo por aquí?
Le pregunte al separarnos.
- Todo marcha bien. -me dijo.-
Heche un vistazo a mi alrededor y era verdad, Alexandria se había expandido un poco más, habían más cultivos, más casas, algunos molinos de viento y sobre todo, gente trabajando juntos por todo esto.
