Hoy

12 2 0
                                    

Hoy... vuelvo a escribir, y tengo miedo; tengo miedo de volver a esos tiempos de antaño donde todo me parecía arte y me distraía y escuchaba... No sé si es arte pensar que la soledad me trae una tristeza profunda que se consume como el cigarrillo que al final me quema los labios, que se evaporizan con cada suspiro... No sé si tengo miedo de volver a tiempos de antaño donde era feliz sola porque solo me escuchaba a mí misma y sonreía y fingía que era feliz. Porque no sé si estoy feliz o triste o estoy fusionada en un sentimiento vacío que sólo es mío. No sé si tengo miedo de ser quien era, con el mismo miedo de no poder ser quien quiero ser.

Me miro al espejo y no puedo verme la cara, porque solo me miro a misma en este sentimiento indescriptible que me consume, que me vuelve nada. Y a veces soy feliz de ser nada porque me nutro de todo y de nada... Podría quedarme aquí estancada en el piso frío, escuchando los ruidos que no me interesan pero que se funden en mi alma, como en mi mente...

Quizás he vuelto a esos días dónde sólo quiero escuchar algo que me importe, porque no me importa nada... y me escucho a mí misma que no tiene nada que decir, que está estancada en el sabor del cigarrillo en los labios, en la misma persona que disfruta morderse los labios que están resecos por pura satisfacción, y de nuevo no sé quién soy. Y sigo tratando de escucharme y de ignorar lo que hay a mi alrededor, así sea puro silencio, porque no sé qué es lo que me consume y porqué siento esta tristeza tan profunda que me canaliza en un estado de incertidumbre y de nada, sencillamente de nada. Y vuelvo a leer, aunque sé que estoy sola, que estoy dañada, que no me importa nada... Porque podría durar horas encerrada en este piso, frío y solo, con un cigarrillo en la mano.

Qué mal hábito este en el que vine a parar, pero que me ayuda, porque me siento a mí misma como una persona vacía que tiene mucho que decir, como una persona que escucha a todos pero nadie escucha, como una persona que ama escuchar pero odia prestar atención y estoy sola, aquí, esperando que el día acabe para seguir no sintiendo nada... Este defecto o virtud que me viene a la mente cuando algo me pasa, mas no sé qué es, porque podría ser ahora o más tarde o nunca, porque podría ser cualquier cosa o sencillamente no podría ser nada. No sé en qué pensar cuando me veo a mi misma en el piso frío, a oscuras, fumando otro cigarrillo esperando que nunca acabe, ya que me veo a mi misma consumiéndome en la llama baja que lo acompaña, porque me veo a mi misma yéndome con el aire y no escuchando nada, no siendo nadie... Y podría jurar que esta soy yo, que está feliz pero triste y se confunde, porque no sabe lo que siente, porque está en un trance que es incompatible con el exterior, porque está en un trance que no le permite escucharse ni escuchar a nadie, porque soy yo misma en este piso frío escribiendo sin pensar si está bien o está mal, sólo que este es el reflejo de ella misma escuchando sonidos lejanos en una noche fría de junio en un piso frío de Caracas...

Podría jurarme a mí misma que estoy bien, porque sé que lo estoy y que quizás no esté tan triste ni tan vacía ni tan sola, porque podría jurarme a mí misma que este es solo un momento donde podría corregir mis sentimientos y seguir adelante, porque podría jurarme a mí misma que no me interesa así me interese, porque podría jurarme a mí misma que en este trance perfectible y repetitivo es solo una fase que me hace creer que puedo seguir adelante, que podría jurarme a mí misma que esta no soy yo, así lo sea...

You've reached the end of published parts.

⏰ Last updated: Jun 10, 2015 ⏰

Add this story to your Library to get notified about new parts!

HoyWhere stories live. Discover now