Parte cinco.

180 22 4
                                    

ㅡ Ehm, ¿Señor?.

ㅡ Robert. ㅡ Codeó disimuladamente Leslie.

ㅡ Uh, la bomba...

Oppenheimer observó a las personas invadiendo su espacio personal. Los periodistas estaban haciendo su trabajo, algunos micrófonos casi estaban sobre su cara y algunos cuántos civiles se encontraban en las butacas de más atrás. Las miradas de curiosidad y fascinación con su sola persona le causaban repulsión y náuseas contenidas. Cómo le había dicho a Leslie antes de subirse al escenario, "Nadie en ésta habitación sabe realmente lo qué estamos haciendo."

Una pequeña sonrisa con un destello de molestia y cansancio se escapó de su boca sin poder evitarlo.

ㅡ La bomba está en desarrollo. ㅡ Espetó, callando todos los murmuros qué se oían por la sala. Prosiguió ㅡ Creo que estamos haciendo un trabajo sorprendente bueno. Nuestro equipo está altamente preparado y capacitado para los experimentos que estamos haciendo.

ㅡ ¿Eso quieren decir que van más avanzados de lo qué creemos?, ¿dentro de poco veremos alguna bomba explosionar?. ㅡ Se oyó decir a uno de los reporteros.

ㅡ No puedo dar ese tipo de detalles en este momento. ㅡ El rostro del hombre se contrajo de una forma poco sutil. Le molestaba de sobremanera las preguntas tan directas y poco discretas cuando claramente no podían decir cosas tan explícitas en una ronda de prensa. ㅡ Solo puedo decir que estamos trabajando arduamente en ello. Si esas son todas las preguntas, me retiro.

Se despidió sin ningún atice de amabilidad, dando por finalizada la ronda de prensa. Un Leslie un poco agitado se aproximó a él rápidamente a pasos apurados mientras lo seguía por detrás.

ㅡ Robert, no puedes simplemente irte. ㅡ Insistió con preocupación él ingeniero. ㅡ Van a matarte.

ㅡ ¿En qué sentido?. ㅡ Preguntó desinteresado él científico.

ㅡ En el sentido que van a sacarte de este Proyecto si no haces caso a cada maldita cosa que te piden.

Robert se quedó parado un momento meditando con seriedad, Leslie notaba la tensión en sus hombros y las bolsas negras bajó sus ojos. Sabía qué no era la ocasión para hostigar con preguntas a Oppenheimer, pero los grandes mandos estaban con los pelos de punta por el actuar del hombre, causando que él Ingeniero recibiera muchas de esas advertencias de formas poco amables. Si él científico no les daba importancia, tendría que ser a través del único hombre con él había podido establecer un lazo.

ㅡ No estoy de humor para responder estás cosas, Leslie. ㅡ Puntuó Robert con la mirada fijada al frente suspirando visiblemente atormentado por sus ideas. ㅡ Tengo una junta importante dentro de una hora. Hablaremos después.

ㅡ Por favor, ten cuidado Robert.

Unas pequeñas risas involuntarias salieron de la boca del recién mencionado, dignandose a mirarlo por primera vez después de un largo rato en silencio.

ㅡ Leslie estás son mis cosas, no te preocupes por eso. ㅡ Soltó él hombre mayor. ㅡ Son cuestiones que resolveré yo mismo.

Robert se alejó sin dejarle muchas más explicaciones a Leslie, quién con un rostro de visible preocupación se preguntó de qué reunión estaba hablando Oppenheimer. No les habían citado para alguna reunión de negocios todavía para hablar sobre algunos detalles sobre la bomba con los aliados, pero era de esperarse si querían hablar con Robert a solas para reprocharle sus actitudes totalmente despreocupadas.

También era un poco sospechoso saber que eran los únicos científicos alojados en la Gran Ciudad, los habían enviado, pero algo le parecía demasiado específico cuándo los eligieron a los dos. Jean insistió varias veces en ir para calmar a la prensa pero le denegaron aquella petición sin importarles sus argumentos, otros cuántos igual o más importantes que ellos también sufrieron lo mismo, acudieron y les negaron el acceso, así que eran solo ellos dos en esa ciudad.

Pacto suicida | Barbenheimer (Barbie x Oppenheimer)Onde histórias criam vida. Descubra agora