¡Cásate con mi hermano!

No puede negarlo.

—Te gusta el idiota con cara de rata ¿No es así? —.

      Sanemi casi escupe su comida ante la pregunta tan directa de Obanai, aún así, trató de fingir demencia.—-No sé de qué mierda estás hablando, idiota —Respondió.

—¿Y acaso no te estaba cortejando formalmente? ¿Con tu consentimiento? —.

      El albino enrojeció ligeramente —Yo... Quizá le dije que sí, pero sólo porque seguramente es una maldita broma de mal gusto —.

      En realidad, el pilar de la serpiente ya lo sabía —al igual que todos los demás, era demasiado obvio— sólo porque Genya y Tomioka le habían ido a preguntar, súper discretos, como es que había comenzado a salir con Mitsuri, y aunque su primer impulso fue de mandarlos a la mierda, no pudo, y es que, pese a que él y él pequeño omega no se llevaban bien, no iba a escupirle todo el diccionario de groserías que se sabía, por el simplemente hecho de ser un niño; por otra parte Tomioka sólo se salvó por estar acompañado de dicho crío. Pero aún así, ninguno de los dos dió brazo a torcer, insistieron todo al día hasta que colmaron su nula paciencia; la verdad es que les dijo lo primero que le vino a la mente, sólo para que dejarán de molestar, pero jamás imaginó que todas esas estupideces funcionarían con su amigo.

       El heterocromatico suspiro con fastidio ¿Qué más le quedaba? Si bien era su amigo no era nadie para opinar con respecto a sus relaciones, si el muy imbécil quería meterse con el otro imbécil no podía intervenir; ya sólo le quedaba llevarle dicho reporte —por no decir chisme— a su amada Mitsuri.

       Continuaron almorzando, en silencio o cambiando de conversación a cosas sin importancia.

      Sanemi no pudo dejar de darle vueltas al asunto durante todo el día. ¿Gustarle Giyuu? Bien, quizá últimamente su compañía resultaba más agradable, se sentía más relajado a su lado, a veces esperaba pacientemente su visita, su hermano le había dicho que se veía más radiante y feliz, le habían encantado las flores que le había regalado y lo había besado en la mejilla...

      Paso sus dedos por sus labios al recordarlo, con un sonrojó en las mejillas. No podía creer que realmente había hecho eso ¡Ni siquiera sabía porque lo había hecho! ¡Sólo fue un maldito impulso que tuvo!... Pero aún así, no había sido tan desagradable.

     A estas alturas no podía mentirse a sí mismo, es decir, desde el primer momento en que lo vió le pareció jodidamente guapo, y cuando se enteró que este era un omega y no un beta como había creído al principio, algo en su interior se removió infinitamente feliz

      Porque su ojos eran hermosos, aún si no podía saber el color estos, al igual que ese cabello rebelde que siempre llevaba atado en una coleta, también ese ahori de dos diseños, que, aunque resultaba un poco raro, él lo hacía lucir como algo realmente bello.

      Quizá y sólo quizá, le había gustado Giyuu desde el principio, y ahora ya no puede negarlo.

      Mitsuri río divertida ante lo que su  omega le contaba con respecto al pilar del viento, mientras lo abrazaba por la cintura, por más serio y distante que parecía ser Obanai, él era quien más disfrutaba de esas platicas y sesiones de mimos nocturnas, aunque él nunca fuera decirlo en voz alta, siempre que le preguntaba o tocaba el tema, él lo negaba rotundamente.

      El más bajo también abraza a su alfa, llenandola de sus propias feromonas, sólo para que ningún otro omega, beta, o incluso algún alfa, intentará acercarse a su amada, Mitsuri hizo lo mismo, pero ella sólo tenía la intención de relajar al contrario, lo cuál logró porque poco después cayó dormido.

[🍉] Capitulo cortito porque se vienen cositas de estos dos 🤓☝️✨

Posdata: ¿Iguro es su nombre o su apellido? Me confundí, me perdí, una disculpita.

Posdata 2: Ya escucharon la nueva canción de Mitski??