Pero el animal ante su mirada bufó, haciendo que la hierba que rodeaba su hocico se moviese con el resoplido.

Muy maduro de su parte.

Hoseok estaba alucinando, casi sentía la tentación de pellizcarse la piel del brazo. La única explicación posible para esa absurda situación debía ser un sueño. Una maldita pesadilla planteada en el peor de los momentos.

—¿En serio? Vuelve a ser tú y mueve el culo antes de que algún guardián altiorem con más poder que yo decida apartarme de mi puesto de trabajo por sentarme a esperar hasta que mi prisionero decida que ha tenido suficiente diversión. Podremos volver al bosque otro día. En una ocasión más adecuada que esta y en una zona menos… Polémica. Supongo. Seguimos dentro del terreno que comprende la casa de líderes. Eso implica que solo podemos estar aquí si es para hacer nuestro maldito trabajo y retozar en la tierra no forma parte de mis obligaciones, por el momento.

"¿Prisionero?" —los sentimientos que fluían a través de la comunicación mental entre ambos estaban llenos de diversión por parte del lobo de viento—. "Creía que ahora era un miembro más de tu equipo. ¿Estás siendo un chico mentiroso, Hoseok?"

—No me hace gracias. Levanta el culo en tres… dos…

—¡Aquí estáis! —la voz conocida de Taehyung hizo que Hoseok girase instintivamente su mirada a la par que Yoongi se alzaba sobre las patas preparando sus dientes ante la posible necesidad de atacar—. Oh. Vaya. Ese lobo tuyo de nuevo. Creía que… —Taehyung miró con confusión a Hoseok, quién se encogió de hombros al instante—. Bueno, claramente me han informado mal sobre la situación porque se supone que tu lobo estaba algo así como dormido debido a la vigilancia a la que has estado siendo sometido.

—Un lobo dormido puede despertarse y el suyo lo ha hecho con sorprendente facilidad. Tanto que ahora no hay forma de volver a convencerlo para que deje paso al humano de nuevo. Estoy a punto de arrastrarlo hacia la biblioteca en su forma animal.

"Inténtalo si te atreves, alfa."

Hoseok gruñó sin poder evitarlo. Su instinto de alfa quemaba bajo su pecho cada vez que ese lobo se mostraba retador y casi juguetón. Para el animal que lo miraba, él parecía ser como una sencilla mariposa, nada parecido a un peligro y mucho menos nada similar a un lobo al que tenerle miedo.

"Tu maldito hocico debería guardar silencio, Yoongi. Cuando el humano gobierne sobre el animal de nuevo, podremos hablar con raciocinio."

Jungkook no tardó en sumarse a la escena. Manteniendo las manos tranquilamente en el interior de sus viejos vaqueros holgados a la par que caminaba hacia Taehyung. Los movimientos llenos de experiencia de este no habían cambiado en lo absoluto a pesar de haber vivido casi un año completo en su forma animal, no importaba que fuese un humano o un lobo, sus pies nunca parecían hacer ruido a través del suelo sobre el que se movía y quizás fue exactamente eso, la convivencia estrecha con su lobo, lo que logró hacer de eso algo incluso más notable.

La mirada de Jungkook se posó sobre Hoseok por un instante y luego voló hacia esa figura tan conocida para él, la sonrisa se plantó en su boca y cuando sus pasos finalmente frenaron, estiró el brazo para rodearle la cintura a su pareja en un gesto familiar. El peso de su cuerpo se dejó caer contra el de Tae. Cariñoso y cercano. Así se mostraba el guardián sureño con el alfa norteño sin necesidad de esconderse ni un día más ante nadie.

Y Hoseok no sabía por qué esa mierda estaba molestándolo tanto. Después de todo, hacía mucho que ya no sentía más que simple amistad y cariño hacia Kim Taehyung. No debería percibir irritabilidad de ningún tipo cuando sus ojos veían esas muestras de cariño tierno y vomitivo. Todo lo que tendría que hacer sería centrar su maldita cabeza en el trabajo que debería estar realizando a pesar de los inconvenientes.

ALPHA PLEASURE (YOONSEOK) - THE HOWLING SAGA ☽ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora