Sabor A Mí- Young Miko

24

14 de febrero

- tu sabes  que no soy piki para los regalos, loca te luciste te amo- hablo victoria por la videollamada mientras mostraba las flores y demás regalos que Carolina le había enviado

- ya estoy haciendo un espacio para ver cuándo puedo ir halla- comento Carolina

Las clases habían comenzado, y la única conversación que  entablaba con su padre  era sobre cosas que necesitaba para la universidad, por el cambio tan repentino de Carolina, quien parecía mas indecisa que nada

- nada me haría más feliz y si yo pudiera ya estuviera halla- contesto victoria

Carolina entendía que la situación económica de victoria no era como para estar gastando, nisiquiera se molestó cuando ella dijo que no podía enviarle nada por San Valentín, comprendio y no se molestó

- losé, pero por el momento no puedes gastar, ¿Que tal van tus estudios?- siguió preguntando

Victoria hizo una mueca y sonrió - ahí van- habló

- dijiste que querías comenzar a tatuar, ¿Por qué no tratas en eso?, Igual dibujas perfecto- sugirió Carolina

- losé mi amor pero es que ahorita no hay para una máquina, y  mis padres están con otros gastos, so, creo que buscaré un trabajo temporal- explico

- ¿Y cuando cuesta una máquina?- preguntó

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- no oí nada- murmuró Kimberly mientras se levantaba de su asiento - vamos a ir a un jangueo hoy en la noche, ¿Que harás tú?, ¿Quieres venir?- preguntó hacia Carolina

Ella sonrió y nego con la cabeza - tengo que cubrir un turno extra y no puedo levantarme tarde mañana, tengo cosas que hacer- contesto ella tomando sus cosas, la morena le miro con una mueca graciosa

- admiro tu valentía, yo apenas si junto pa mi arriendo, es que estoy joven- exclamó y Carolina le miro sin decir nada

La chica ya era mayor,  unos veintidos años,  había tomado la iniciativa de hablarle a Carolina por un trabajo que hicieron juntas

- si, tal vez yo disfruté después igual- hablo Carolina caminando a su lado

- ¿Tienes gastos extras?, Es que siempre me dices que tienes trabajo, siento que es una excusa- cuestionó

- ahora mismo no gasto en nada innecesario, pero quiero visitar a mi novia un par de días y darle un regalo, para eso ahorro, ya la carrera pues un gasto de mi padre- explico, la chica se impresionó un poco, ella nunca había mencionado que tenía novia antes, tampoco era que Carolina hablara mucho, solo le escuchaba, no le seguía, aunque a Kimberly le generaba bastante curiosidad

- oh vaya, no sabía que le tirabas a las cucas- comento y Carolina riyo bajamente

- es mi primera novia, supongo que es especial- se encogió de hombros

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- es que aún no puedo creer que te haga pagar arriendo, ese hombre está loco- hablo su abuela al teléfono mientras Carolina solo quedaba en silencio al otro lado de la llamada

- yo nose por qué tú haces show de todo mami, ya me está pagando la carrera, al menos debo servir para algo, él ahora está teniendo otros gastos- hablo con voz de regaño

- que gastos ni que nada, tú eres su único gasto, a esa mujer me la puedo...

- tu vas y le dices algo y solo va a ser peor, yo no te eh dicho nada nose como te haz enterado pero lo menos que quiero ahora es hacer un desastre por una vaina tan simple como pagar arriendo me oyó, ya tuve suficiente de sus quejas- suspiró y trato de no decir nada más grosero

- pero caro...esa mujer me cae mal, ¿Sabías tu que quiere expandir la casa para que quepan sus hijos?, Ay no, esa mondà que- reclamo

- mira mami, yo estoy al pendiente de todo y no me molesta, tu deberías dejar en paz a María y que ya ellos vean como rehacen su vida, y me disculpas tengo cosas que hacer, se me cuida- despidió y colgó la llamada

Rodó los ojos y se acostó en su colchon y observó el techo agrietado, faltaban pocos días para su visita a puerto rico y la semana y los trabajos se le hacían eternos, pero valdría la pena cuando viera a victoria de nuevo

- esto está como que muy solo- hablo sola mirando el cuarto que estaba rentando, no era la gran cosa y por poco cabían sus cosas, enrealidad solo se había llevado el colchón, el sillón rojo que fue el ultimo regalo de su padre, y pertenencias suyas, libros, fotos, y ropa, pero el arriendo era costeable a sus trabajos y agradecía por lo menos tener un techo donde alojarse, su padre no mintió con lo de "nada de tus abuelos" pues le prohibió por poco contarle de su situación actual

No había cruzado palabra con él, solo estaba al tanto de lo que pasaba en la casa por María, y sobre la vida de victoria hacían videollamada cada noche que podían, la ojiazul le había contado que sus padres le habían comprado una máquina para tatuar y estaba haciendo pequeños trabajos en su habitación, Carolina aún seguía con su plan de la sorpresa, y victoria le había contado que quería tatuarse la espalda

- adoptaré un perro- hablo como si alguien le escuchará y tomó sus celular

La tarde daba a ser tranquila, ya tenía suficiente ahorrado, ser niñera era tedioso pero era muy efectivo, también había estado trabajando de cajera en un súper mercado, ya tenía unos cuantos amigos en la ciudad

Una llamada de un número desconocido interrumpió el silencio del cuarto

- hola buenas tardes, ¿Quien habla?- pregunto cuando contesto