Delincuente

9.

Miró un poco mas atrás de los mellizos y ahí estaba ella, Amity Blight, quién no estaba dispuesta a mirarla pero sabía que estaba ahí, la ignoraba a propósito.

—Vinimos porque la princesa va mucho a lugares costosos—Dijo Edric mirando a su hermana menor.

—Si, asi que le daremos un toque de humildad—Emira se puso al lado de Luz y abrazó su brazo con total confianza, no le molestaba mucho a la chica, pero no era mucho de su agrado—Además, queremos ver esas peleas callejeras.

—Oh.... No traen nada de valor, ¿cierto? Suelen robar entre la multitud de vez en cuándo—Examinó a los hermanos y era obvio que mínimo llevaban 15,000 dolares en joyería, sin contar sus celulares.

—Pues vas muy seguido si sabes todo eso—Refutó con un tono algo molesto la peliverde, finalmente le había hablado a Luz después de esa pelea.

—Me lo han dicho.

No dejaba claro si era porque habia gente que le contó eso, si era por que se lo decían muy seguido, o por otra cosa, su confusión molestó mas a la señorita.

—Puedo acompañarlos si no les molesta—La de beanie no estaba dispuesta a dejar que algo les pasara a esos tres, quedaría en su conciencia, además, si alguien iba a robarles en algún momento, sería ella.

—¡Claro! Entré más mejor—Edric también abrazó a la castaña y esta se rió nerviosamente, tambaleaba un poco por cómo los mellizos la jaloneaban.

—Aviso que si me roban algo, me lo van a pagar—Amity no parecía muy convencida con esa idea, incluso le daba algo de miedo, de por si la gente en ese parque ya se les veía la intención de robarles.

—No te preocupes mittens, te daremos nuestros ahorros si algo te pasa.

Para tristeza de Luz (Ella se ofreció de todas formas) fueron a esas peleas, era una fábrica que ya no estaba en uso con un cuadrilátero viejo en el medio, para verse turbio y descuidado, prometía diversión.

—Huele a gasolina—La ojitos dorados arrugó la nariz y caminó mas rápido, ella a diferencia de sus hermanos, caminaba sola y a paso algo rápido; mientras que ellos iban abrazados a Luz, algo asustados de que les fueran a hacer algo.

—Ya va empezar, suban aquí—La delincuente subió a un tipo de tubo largo y grueso que conectaba con muchas cosas, estaban mas arriba de la gente y ese lugar estaba sólo, correrían menos riesgo de robo.

Los mellizos disfrutaba mucho la pelea que estaba debajo de ellos, Amity sólo la miraba con algo de aburrimiento. Por su lado, Luz sentía que debía hablar con ella, aclarar las cosas y por que hizo todo ese alboroto la última vez.

—¿Y cómo has estado?—Era una pregunta neutra, una que la cuestionada no pensaba responder de buena manera, seguía molesta con ella.

—Esto es ridiculo—Amity se bajo a como pudo de los tubos y se alejó de ahí, sus hermanos ni cuenta se dieron, pues estaban muy ocupados animando a un hombre musculos y de cabello largo.

—¡Oye!—Luz tuvo que seguirla en cuánto se bajo, no podía dejar que algo le pasara, a ninguno de los tres—Mierda—Mientras la seguia a paso apresurado, sacó su teléfono para llamar a un contacto cercano.

—¿Luz?—Una voz tranquila, serena y pasiva se escucho en su celular pegado a su oreja, era Owlbert, el vivía en la zona.

—Owlbert, necesito que vayas a la fábrica abandonada, esa en la que hacen peleas; hazme un favor y protege a los mellizos Blight.