- Soy un año mayor que tú punk, no me hables de experiencias.
- Y yo llevo siendo Spiderman 2 años más que tú... Jack Escarcha.
- ¿Jack Escarcha? ¡Venga ya!
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
Abrí los ojos, todavía era de noche. Mi sentido arácnido me había despertado pero no ocurría nada.
— Hay una nueva anomalía. —escuché la voz de Miguel por el reloj y suspiré.
No tenía otro momento para molestar.
Había pasado un día desde la última vez que combatí como Spidermoon, y lo había agradecido. Necesitaba un día de descanso.
— Miguel... son las cuatro de la mañana. —me froté los ojos y me tapé hasta arriba con la sábana.
— El deber llama, —su holograma se proyectaba a través de la tela— te quiero ver aquí en seguida.
— Seguramente en otro universo no sean las cuatro de la mañana Miguel, llama a otro... —esperé respuesta alguna pero nada, destapé mi mano y no pude ver el holograma— Y volvió a cortar. ¿En qué momento acepté levantarme tan pronto cuando me uní a esto?
Con pesadez, me levanté de la cama y me arrastré a por el traje en el armario. En eso, la puerta de mi cuarto se abrió.
— ¿Qué haces? —escuché la voz de mi madre en la silueta situada en la puerta.
— La spider señal —tarareé moviendo mis manos.
— ¿Tan temprano? Hoy irás a clase, me da igual lo cansada que estés.
— Sí vale, gracias. Yo también te quiero mami. —empujé la puerta lentamente cerrándosela en la cara.
Me giré apoyándome en la puerta y cerré los ojos.
— Llévate comida. —dijo ella tras la puerta.
— Vale. —le mentí, no se iría de ahí si no aceptaba, pero no tenía nada de hambre, así que no le haría caso.
Al llegar a la sociedad me senté a esperar al resto, ya que fui la primera en llegar. Miguel miraba en sus pantallas mientras que Lyla observaba todo.
Yo por mi parte casi me quedo dormida hasta que escuché pasos y murmullos.
— Me muero de sueño... —escuché a Gwen, al mirar la vi estirándose y tras ella venían Hobie y Pavitr imitándola.
— Buenos días. —los tres me miraron y automáticamente bostecé.
— Buenos días Elowen. —Pavitr y su sonrisa iluminaron la sala— Espero que hayas podido descansar.
— No mucho... —miré con cierta molestia a Miguel— ¿Creéis que los vampiros duermen? —escuché una leve risa por parte de Hobie y Gwen y un gruñido por Miguel.
— La anomalía está en la Tierra-90214. —informó Lyla.
— El universo de Noir.
Miré a Gwen, estaba algo emocionada. Me había comentado que Noir era uno de los Spidermans que había caído en el universo de Miles aquella vez.
