Capítulo 41

2.3K 183 195
                                    

NARRA DAMIAN

—Umm... no quiero intervenir en este asunto vuestro, pero... me gustaría que me explicarais de qué va todo esto —dijo Lockridge a mi lado.

Gruñí como un león al escucharle hablar.

—¡Tú mejor sigue comiendo! —le dije, volviendo a meterle el pan en la boca.

—Segundo... —dijo Anya.

—¿Qué? —preguntamos Lockridge y yo a la vez.

Le fulminé con la mirada y Lockridge se metió otra vez el pan en la boca.

—¿Qué pasa, Anya? —le pregunté.

—Creo que debemos explicarle lo que pasa. Es nuestro amigo —me dijo.

—No creo que sea necesario —respondí— y... no es "nuestro" amigo, solo es el tuyo.

Vi que Anya se entristecía, lo cual me puso nervioso.

—Ugh... Está bien. Se lo explicaré... después de comer —accedí desviando la mirada.

—¡Genial! —lo celebró ella a su manera.

Me sonrojé un poco.

~~~

Después de la comida, Becky se dirigió a una parte del comedor donde había una cola de alumnos para apuntar los grupos que hicimos para lo de la limpieza.

Mientras ella apuntaba, me dirige adonde Ken y Ewen.

—¿Seguro que queréis hacer estos grupos? Sigo pensando que os iría mejor si reemplazarais a Lockridge... —dije exhausto.

Ambos me sonrieron.

—Ánimo, jefe. —Me dieron unas palmaditas.

Suspiré.

—Por cierto, es esta noche —les avisé.

—¿El qué? —me preguntaron.

—Lo de la PDDD —respondí.

Para evitar que nadie alrededor nuestro nos escuchara, inventamos esas siglas para referirnos a lo de la pastilla.

—Ah, ok —respondió Ken—. ¿Y quién irá a la farmacia?

—Eso lo haremos por sorteo después de que Becky termine de apuntar... Nos reuniremos en el parque que hay cerca del hotel... ¿Tenéis papel, tijeras y un boli? —pregunté.

—Yo tengo papel —respondió Ewen.

—Yo tijeras —dijo Ken.

—Vale, ahora que recuerdo, yo traje un boli. Así que traed esos materiales y nos reuniremos en dicho sitio, ¿vale?

—Entendido, jefe —me respondió Ewen y se fue a su dormitorio junto a Ken.

~~~

Unos minutos después, todos nos reunimos en el parque.

Estábamos los ocho juntos y empezamos a recortar el papel mientras escribíamos nuestros nombres en cada papelito.

Una vez terminado, empezó el sorteo.

—Ojalá no me toque... —dijo Ken.

—Yo quiero que me toque solo para reírme de la experiencia... —dijo Ewen.

«Solo espero que le toque a Lockridge para que, de esa manera, pasemos menos tiempo juntos en la habitación», pensé.

—Vale, que alguien coja un papelito de mis manos —dijo Becky.

Léeme - Damian x AnyaWhere stories live. Discover now