A mí me gustaría amar así, y que me amen así.

—Estaba pensando que podría venir tu familia para el próximo partido, yo no tengo mucha familia que digamos y estoy seguro de que me voy a encariñar al toque si son al menos una fracción como vos —propuso y negué de inmediato.

Yo ya había pensado en esa posibilidad, pero teniendo en cuenta de que casi toda la plata se había invertido en el taller de mis hermanos, no tenía los medios para traerlos y costear todo el viaje.

—No, ellos no tienen los pasaportes y eso —excusé rápido.

—Ah, pero no hay drama con eso. Yo se los consigo al toque, como te los conseguí a vos. No me gusta que estés tanto tiempo sola.

Amaba lo bueno que era Enzo, siempre pensaba en los demás sin importar qué. Era demasiado bueno, incluso para él mismo. Y aunque hubiera amado decir que mi familia sí podía venir a Qatar porque me encantaría compartir esta experiencia con ellos, no podía traerlos.

—Mi respuesta sigue siendo que no.

—Bueno, está bien —levantó las manos en señal de rendición—, ¿Te gusta Spiderman?—cambió de tema, lo que internamente le agradecí.

—¿Y a quien no? Mi personaje favorito es Gwen Stacy.

—Pensé que no lo conocías, teniendo en cuenta que no sabías ni quién era el dibu —se burló e intenté hacerme la ofendida, pero terminé riendo—. Tiene sentido que te guste Gwen, te pareces a ella.

—¿Y eso es bueno o malo?

—Es bueno ya parecerte físicamente, pero le sube muchísimos puntos saber que como persona sos bastante parecida —ahora fue para él para quien preparó un mate—. A mí me gusta mucho Gwen Stacy.

—¿Te puedo decir algo sin que te ofendas? —pregunté ya más confiada, y él asintió—. La primera vez que te ví solo pude pensar que eras un turro.

—¿Yo?, ¿Turro? Noo, ¿Cómo se te ocurre? Jamás —respondió entre carcajadas—. Mira que diferencia che, yo la primera vez que te ví pensé que eras la persona más milipili del mundo. Y la más hermosa...

—Bueno, parece que solo uno se confundió.

—Yo me confundí a medias, porque sí sos hermosa Sol.

No supe qué responder, así que solo me quedé callada y metí una galletita a mi boca para no hablar de más. Enzo parecía estar bastante tranquilo y confiado, tomaba su mate como el ser más pacífico del universo.

—¿Por qué te pusieron sol? —cuestionó.

—No sé. Mis papás tienen un humor muy raro y supongo que por eso se aman, porque son iguales —hablé con bastante dificultad, porque me había ahogado con la galletita—. Nací de noche, entonces me pusieron Sol. ¿Vos por qué te llamas Enzo?

—Es nombre de leyenda —respondió, como si fuese lo más obvio del mundo—. ¿Conocés la frase "si es nene ponele Enzo"? Estoy seguro de que la crearon por mi.

Solté una sonora carcajada y él sonrió, nunca la había pasado tan bien con Enzo y esta vez no había una película de por medio, ni siquiera estaba Oli de por medio.

—¿Siempre fuiste de river? —pregunté y él asintió—, ¡Yo también! Bueno, mis papás son de river y yo también. Por eso fuera de Messi o Di María, solo los conocía a Julián, Armani, a vos...

—¿Conoces el monumental? Es la cosa más hermosa del mundo, cualquiera que lo visite se haría de river.

—No conozco el monumental —comenté avergonzada, y me miró bastante sorprendido.

—¿O sea que tengo la posibilidad de ver tu reacción en vivo a conocer el monumental? No dejo pasar esta oportunidad por nada en el mundo —frotó sus manos como un nene emocionado—. Cuando volvamos a Argentina, lo primero que voy a hacer es visitar a mi vieja y comerme un buen asado mientras le cuento a todo el mundo que soy amigo de Messi. Pero lo segundo, tené por seguro que va a ser llevarte al monumental.

No pude evitar sonreír al verlo tan entusiasmado, nunca nadie se había emocionado tanto por hacer algo conmigo como lo hacía Enzo. Era bastante tierno y gracioso a la vez.

—Jamás se puede competir contra Messi.

—Es el sueño del pibe —me siguió la corriente—. Hay prioridades, y la mía es river pero después, Messi y mi hija. Posiblemente te haga un huequito en mi agenda.

—Ay, que considerado. Te voy a poner como mi prioridad número cincuenta entonces.

—¿Cuál es la cuarenta y nueve?

—Comprarles golosinas súper calóricas a mis hermanitos futbolistas.

—¡Auch! Bueno, supongo que voy a tener que esforzarme para subir de nivel entonces.

Sobre Ruedas-Enzo Fernández Where stories live. Discover now