NARRA CARLOS.
El cansancio terminó venciendonos quedando totalmente dormidos con mi bella novia encima de mi pecho, se siente tan bien tenerla así, Y no evadiendome como lo estaba haciendo este último tiempo, asumo que fue mi culpa pero todo se debe a qué quiero librarme de una vez por todas de Verónica.
No la soporto.
Cuando pienso que todo va salir bien y que por fin voy a poder darle una familia mi Luana junto con su madre la mujer que amo todo se frega por qué Verónica vuelve a aparecer y siempre lanza algo venenoso como lo que ocurrió hace unos días dónde me amenazó con dejarme sin un solo centavo si seguía con los planes de divorcio y yo como el estúpido que soy caí en ese chantaje a punto de perder a la mujer que amo.
Hablando de ella la siento removerse y comodarse mejor en mi pecho, pasamos una excelente noche, o mejor dicho una noche de puro sexo, quise darle un poco de emoción dejando que me ate a la cama como era su deseo desde hace mucho, según ella era un castigo por todo lo que había pasado con Verónica recientemente, pero lo que ella no sabe es que me encanta que tenga el control de la situación.
- buen día - susurra incorporándose mientras se talla los ojos.
Hasta recién levantada mi mujer es hermosa.
La agarro de la nuca y la acerco a mí para luego besarla apasionadamente mientras paso mis manos por su espalda desnuda.
- ahora sí buenos días mi amor - ella se ríe - estás bien?
Asiente y rueda los ojos.
- sí, solo me arde un poco el trasero - lanzo una carcajada - claro ríete, ya veremos cuando sea yo la que te azote las nalgas - sigo riendo.
Pasado los minutos se levanta de la cama, puedo ver sus hermosas nalgas rojas con mis manos marcadas, anoche nos envolvió la pasión y la lujuria, tanto que éramos incapaces de parar, solo lo hicimos cuando ambos caímos rendidos, fue alusinante.
Somos insaciables.
- y esa sonrisa de pervertido? - escucho la voz de mi mujer, la miro y va saliendo del baño tal como entró - tengo hambre - se soba la barriga, de un salto estoy fuera de la cama, la tomo de la cintura y la acerco a mi, cuando intento besarla pero se hace para atrás - de comida amor.
Ruedo los ojos.
- que agua fiestas eres - estoy a punto de hacerla enrollar sus piernas en mi cadera pero todo se queda en intento cuando mi celular suena anunciando una llamada entrante, ambos bufamos con frustración.
Tomo mi celular que se encuentra todavía en mi pantalón que está regado en el suelo al lado de la cama, me asombra ver en la pantalla el nombre de Fernando, no es que no me llame sino que es sábado y demasiado temprano.
- Es Fernando - le digo a mi mujer que me mira con curiosidad - solo espero que sea algo importante para que me interrumpas mi momento con mi mujer.
- creeme que no es agradable escucharte decir eso, te recuerdo que tú mujer es mi hermana - gruñe y yo me río a carcajadas seguido de mi Mujer, el teléfono se encuentra en altavoz - bueno a lo que voy Carlos - se calla unos segundos y luego prosigue - me hablaron de la comisaría, dicen que agarraron a los culpables del extravío del cargamento.
Suspiro aliviado, es lo que más deseo, que esos malditos paguen por habernos robado.
Tengo una leve sospecha pero no quiero adelantarme a nada.
- que bueno amigo - exclamo emocionado - quien es el cabeza de todo?
- no lo sé, en una hora debemos estar en la comisaría - asiento aunque no me vea - los veo allá - dice y cuelga la llamada.
KAMU SEDANG MEMBACA
Solamente Tu, Simplemente Tu. (+18)
RomansaLa Universidad, sus padres, sus hermanos y sus amigos era lo mas importante para Ximena Navarro, una joven brillante, estudiosa y cien por ciento dedicada a lo que mas amaba... Cursaba su cuarto semestre de Administración de empresa con excelentes n...
