Solamente Tu, Simplemente Tu. (+18)

CAPITULO 6

Después de un día bastante movido por fin había llegado la noche y con ello la fiesta de compromiso de mi hermana y su novio, quién por cierto no hemos visto en todo el día.

Ha Sido un día muy ajetreado, después de que nos entregaran los vestidos Lorena y yo nos fuimos al salón de belleza donde mi madre se hace peinar constantemente, ni Lorena ni yo somos muy amigas de visitar estos lugares así que tuvimos que ir por obligación de nuestra madre, el peinado que le hicieron a mi hermana se veía hermoso, moño alto con algunos flequillos y el maquillaje ni que se diga, son todas unas profesionales en lo que hacen, en cuanto a mi solo me plancharon el pelo ya que es crespo y me lo acomodaron un poco para que no se alborote y el maquillaje era algo no muy extravagante pero tampoco algo simple, quedamos muy bien.

Al salir del salón de belleza nos fuimos a una casa donde venden zapatos y la única que se compró uno fue mi hermana, yo tengo una montonera de zapatos y sandalias sin estrenar y tengo uno que combina con el vestido.

Cuando ya íbamos a volver a la casa a mi padre se le ocurre llamarme y decirme que me esperaba afuera del centro comercial para ir a ver el departamento que me iba a regalar alegando que era el único día que podía hacerlo, por más que le pedí que lo viéramos mañana no quiso, dijo que tenía compromisos para mañana, resoplando y todo me encontré con él afuera del centro comercial, vimos varios departamentos y por fin me decidí por uno, era hermoso, bello y grande sobre todo, pasamos toda la tarde en eso así que llegamos a las justas para alistarnos y bajar a la fiesta.

- por Dios Ximena dónde se han metido, los invitados están a punto de llegar y tú recién yendo a cambiarte - dice mi hermana, ya está lista y se ve deslumbrante, hoy Sergio se enamorará más de Lorena.

- tranquila no te agüites, aquí la protagonista y la que tiene que recibir a los invitados eres tú no yo - le sonrío y sigo subiendo las gradas al segundo piso - recién nos desocupamos.

- yo tengo que recibir a los invitados pero tú tienes que estar deslumbrante para cuando llegue el que sabemos - me sonríe con picardía, ruedo los ojos - anda apúrate que ya no tarda en llegar.

Enserio sigue con eso? Ojalá y se le atraviese algo a Carlos y no venga, verlo solo va afectar mis hormonas que lo quieren lejos de mi.

- sabes? Ojalá y no venga - sigo subiendo, - y ya deja de dártela de cupido que no te queda - llego a mi cuarto y me entró directo al baño.

A quien quiero engañar? Claro que quiero verlo, quiero que venga, quiero que me vuelva a besar, quiero sentirlo nuevamente, quiero que me tomé en sus brazos y me haga sentir amada, quiero tantas cosas que son prohibidas para nosotros solo por el hecho de que él está casado.

Que mierda de vida la mía.

Tiro la puerta del baño con toda mi fuerza, me da mucha rabia todo, mi hermano, Melisa, que Carlos esté casado, que haya otra mujer que si puede disfrutar de él, que si puede besarlo cuántas veces ella quiera, la puerta se abre y entra mi hermana, yo me encontraba apoyada sobre el labado, agarra mi brazo y me hace girar para luego abrasarme, me acurruca en sus brazos.

- yo te entiendo hermana y se que duele todo lo que está pasando con Carlos y que tus principios que te inculcaron nuestros padres te impiden correr a los brazos de ese hombre cierto? - asiento, mis ojos estaban llenos de lágrimas - lucha por lo que quieres, se que está mal que te diga esto por qué no es lo correcto pero nadie como tú lo haces va amar a Carlos y si hoy tienes que estar a solas con él hazlo Ximena, no te digo que te revuelques con él pero si hablen, hay muchas cosas que se tienen que decir y muchos años que tienen que recuperar - dice y sale de mi baño dándome espacio para pensar mientras me baño.