Capítulo 1:

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Hoy me levanté como todos los días, temprano; salí de mi casa con una botella de té verde en mi mano, con los audífonos puestos y cargando una mochila llena de libros, estaba extrañamente nublado.

Me topé con Marcelo que me preguntó si podíamos ir juntos al colegio, le dije que no, que mi recorrido ha sido y siempre será un sendero que pasa por parte de un bosque sobre una colina, como es solitario, trae mucha paz y tranquilidad; mis padres me llaman la atención cada vez que pueden, también Antonia, no le gusta que pase por aquí, pero si supieran lo fantástico que se siente.

Iba tarareando una canción cuando en el cielo se ve una estela azul delgada que se estrelló a unos cuantos metros adentrados al bosque, pensé que podría ser una pelota de algunos niños que jugando se les perdió y no costaba nada hacerles el favor, así que de buena persona, y de curiosa, fui a ver que era; mientras más caminaba aquella luz se hacía más y más fuerte, hasta que llegué al lado de este destello que me encandiló los ojos y no podía ver, pasados unos segundos la luz empezó a disminuir, y cuando mis ojos se adecuaron pude visualizar, a duras penas, un cuerpo en el piso.



- ¡Ay, Dios mío! ¿Qué te pasó? -lo dije sin esperar una respuesta, estaba claramente inconsciente.

Le revisé la nuca, para ver si se había lastimado la cabeza, no tenía nada, solo una pequeña herida en la mejilla, al ver que no tenía nada más, solo quedaba despertarlo, quité la botella de agua de mi mochila, para dejarla más acolchonada y dejársela de almohada, después verifiqué si estaba respirando.

- ¡¿hola?!, vamos, ¡a levantarse!¡arriba! -no reaccionaba, necesitaba saber si estaba bien, opté por darle unas cuantas cachetadas y le zamarreé un buen rato. Nada. Mojé un pañito y se lo estrujé en la cara, tampoco despertó, noté que tenía una vestimenta peculiar, de un material que nunca había visto, muy ajustada, áspera y elástica.

Habían pasado 10 minutos, la herida se le inflamó y no recuperaba la conciencia, me empecé a preocupar, así que decidí llevarlo a un hospital, va a ser muy difícil, pero es lo que haría cualquiera en esta situación ¿o no?, lo cargué a mi espalda y lo sujeté con mi chaleco; había llegado tan solo al sendero y ya estaba muerta de cansancio, solo tenía que llegar al pie de la colina y ya ahí podría pedir ayuda. No sé cómo llegó a allí, o si tiene que ver con la luz que vi, ni sé cómo se llama porque no tenía identificación, solo ese traje raro, unos shorts, una polera y sandalias, como un surfista, lo que es aún más raro, ya que aquí no hay mar o ríos, tampoco sabía cuánto tiempo llevaba tendido en el piso antes de que llegara, pero de algo estaba segura, este tipo necesitaba un médico.



- ¿Qué pasó? - llegué a saltar, su voz era muy ronca.

-No lo sé, te encontré en el piso desmayado y estaba por llevarte al hospital, ¿Cómo estás? ¿Cómo te sientes? ¿te duele algo? - paramos para que se recuperara

- estoy un poco mareado-

- ¿sabes quién eres o dónde vives? –

- Sí, soy Mack, vivo en el interior. Estaba entrenando...- hizo una pausa, me miró- y no recuerdo nada más, pero sí que estoy bien y puedo caminar solo, gracias- le solté

- Estuviste desmayado más de 10 minutos sin contar el tiempo en que yo no estuve, no te pienso dejar solo-

- ¡Ah!, pero no voy a estar solo, en un rato más van a venir unos amigos, ¿Qué hora es? –

- Son las 7:22 de la mañana-

- Sí, llegan en un rato, este iba a ser el punto de encuentro, así que puedes ir tranquila - ... Miente

- ¿Seguro? – Asiente con la cabeza. – Ok, he olvidado la mochila donde te encontré, debo ir a buscarla–

- Bueno, te acompaño, por cierto ¿Cómo te llamas? –

- Luciana, pero me dicen Lus. Mucho gusto. – solo me vio y sonrió.

Hablamos del accidente y me dijo que alguien le había golpeado mientras entrenaban y que el sujeto desapareció. Es raro, pero sé cuándo alguien miente y esta vez fue a medias. Sinceramente no me lo quiero cruzar de nuevo.



-Llegaste tarde, ¿Qué te pasó? – Así me recibe hoy Antonia, mi mejor amiga.

- ¿Qué dices?, llegué a tiempo –

- Sí, pero tú siempre llegas 30 minutos antes de las 08:00 y adivina...son las 08:00. Llegas inclusive antes que Marcelo y hoy te ganó, ahora dime, ¿Qué te pasó? - ¿Cómo le digo que le salvé la vida a un "tipo" que podría estar en algo turbio?, ya que estoy segura de que me mintió.

- Me distraje, nada más; ¿Hiciste la tarea? – Por supuesto que no la hizo.

- ¿Qué tarea? - .

Protectores: Ania GhosterWhere stories live. Discover now