capitulo 15: Recuerdos de encuentros.

780 40 16
                                    

Serkan Bolat

Jamás me había dado cuenta de lo rápido que podían pasar los días. Había hecho tantas cosas con Eda en los ultimos dias que no había notado de que por primera vez comenzaba a sentir que algo marcha bien. Quizas mi vida comenzaba a ir bien.

Estaba sentado en mi oficina con mi vista puesta en el gran ventanal recordando algunas de las citas que había tenido con Eda. Debo confesar que, si hubiese sabido la manera en la que ella logra que cada una de ellas fuese perfecta, hace mucho tiempo le hubiese pedido una cita. Pero, ella no debe saberlo. No debe saber que tan rendido estoy a sus pies.

FLASH BACK

Recordé la "primera cita":

Ningún cantante en la tierra podría superar lo melodiosa que podrías sonar Eda Yildiz al decir "Te odio, Serkan Bolat".

¿Qué? — habló Eda al otro lado del teléfono — ¿A las 8:00 pm? — Afirmé — Pero, eso es en 30 minutos. Serkan, estoy envuelta en mi pijama, tirada en el sillón, con el cabello hecho un desastre — Reí ante su dramatismo — Y tu solo dices, pasaré por tí a las ocho — escuché su supiro — ¿En verdad  crees que estaré lista a esa hora? — Sonreí.

— Yo espero que si — La escuché renegar de mi respuesta — Entonces a las ocho estaré allí — miré los dos boletos en mis manos — Eres preciosa, si fuese por mi te llevaría en pijama, pero se que no lo aceptarías — Reí.

— Cada vez le sumas más a mi odio, Serkan — Sé qué sonreía.

— Que bonita manera de decirme que me quieres más que ayer — Solté — llegaré pronto — colgué sin esperar respuesta alguna.

Y tal como lo prometí toqué su puerta cinco minutos antes de que el reloj marcará las ocho. ¿Que si me gane un insulto por restarle esos cinco minutos a la media hora que tenía para arreglarse?. Si, y no solo fue uno, fueron miles, desde que salimos de su casa hasta que llegamos al lugar destinado.

— De haber sabido que te quejarías por todo... —  Solté. Gran error.

— ¿Qué? — Interrogó casi que de inmediato — ¿No me hubiese invitado o
No estarías conmigo? — entrecerró sus ojos con cierta picardía e hizo un leve puchero, por lo cual sonreí.

— Escucha, Eda Yildiz — puse ambas manos en su mejilla y me acerqué a su rostro — No trates de decir cosas para sacar mi lado "consentidor y romantico", no soy ese tipo de hombre — ella rió. Yo sonreí y acerqué mis labios a su frente para dejar dos besos.

— ¡Ay serkan¡, Si tan solo pudieses verte a ti mismo no dijeras tal cosa — Quitó mis manos de su mejilla para entrelazarlas con la suya — ¿Así que tu plan es un concierto? — soltó mirando detrás de mi el enorme póster afuera del coliseo.

— No es cualquier concierto — mencioné — ¿Vamos? — Solté mostrando ambos boletos. Ella lo tomó.

— ¿Te he dicho lo bien que luces esta noche? — preguntó ella. Sentí mi corazón acelerarse.

— Lo que quieres decir es que me veo guapo, ¿no?  — Quise tontear un rato.

— Solo dije que luces bien. Tampoco es para tanto — Soltó con una pequeña risita — Vamos — prosiguió a tomar delantera y guiarme hacia la entrada.

Lleve mi mano al lado izquierdo de mi pecho en la busqueda absurda de que mis latidos disminuyeran. Luego sonreí al notar la manera tan perfecta en que ambos bromeabamos con respecto a nuestra relación.

¿Y si Te Quedas? - Edser.Where stories live. Discover now