2.-Psicologo

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Un nuevo día empezaba y el insomnio en leo no desaparecía, lo bueno era que aprovechaba este tiempo para meditar sobre sus acciones pasadas y arreglar las cosas que le faltaran a lio para la escuela. En este momento se encontraba haciendo la primera opción, pues ya había revisado unas tres veces las cosas de lio y todo estaba en orden.

-Leo, ¿que haces despierto a esta hora?, deberías estar descansando, mañana empiezan tus terapias

No pudo evitar soltar un gruñido ante tal recordatoria, a pesar de que había accedido a asistir a estas "terapias" aun la idea no le convencía del todo, pero ya no podía hacer nada, ya habían agenda do su hora y para evitar que leo se escapara iría Rapha con el, se preguntaran, ¿porque rapha? pues la respuesta es simple, es al único que obedece sin refutar, bueno en su mayoría

-No podía dormir así que me puse a meditar, deberías alegrarte de que cupe mi tiempo de forma productiva

-Leo no empieces por favor

Rapha se gano al frente de leo llamando la atención del mismo al sentir que lo abrazaba

-¿que te dio para andar cariñoso de la nada?

-No se, solo quería hacerlo, ¿te molesta?

Leo se acomodo entre los brazos del mutante, la verdad si lo tomo por sorpresa, pero no negaría que sentirlo de aquella forma era reconfortante, sentía que podía confiar en el siempre y eso le aterraba y animaba de cierta forma

-No

Ambos se quedaron en un comodo silencio, Rapha estaba concentrado en observar cada parte del cuerpo de leo, podrían llamarlo como quisieran pero hacer esto es parte de sus cosas favoritas, pues ama observarlo en todo momento, admirar la belleza con la que se mueve, Leo es la perfeccion en persona si se lo preguntan a el

Leo se sentia protegido entre los brazos del mayor, era una sensacion muy calida, que habia descubierto que ama, y a la vez lo calma como nadie lo a podido hacer.

Poco a poco y sin darse cuenta los ojos le pesaban al igual que su cuerpo, tuvo el impulso de acomodarse mejor para acurrucarse y caer dormido entre los brazos de Rapha, este lo miro con una sonrisa por cada pequeño movimiento de su cuerpo, cuándo sintió que ya estaba totalmente dormido, se levantó con leo en brazos y lo llevo a su habitación para que durmiera. En eso sonó su alarma por lo que la apagó lo más rápido que pudo y procuro que leo no se halla despertado, cosa que no sucedió pero noto que tenía el ceño fruncido mientras hagarraba la almohada y la abrazaba

-Jaja

Rio suavemente, al notar por qué era el descontento de leo, pero no podía hacer nada, había que despertar a Lío y prepararlo para clases.

Y eso fue lo que hizo

-¿Tío Rapha?

-Dime

-¿Y papá?

-Leo está durmiendo, me pidió que si te podía ayudar a arreglarte para que tuvieras un lindo día en tu escuela

-Oh, ya veo

-Ya terminamos así que anda a lavarte los dientes, que April no tarda en pasarte a buscar

-¡Si!

Para cuando llegó April Leí se encontraba saliendo de la habitación del líder de la camada, no entendía como había llegado ahí pero sin perder el tiempo Lío lo abrazo en forma de despedida y salió corriendo a dónde estaba April, la cual se lo llevó con ella para pasarlo a dejar a su escuelita

— ¿Lío ya se fue?

— Si, como buen tío lo ayude a prepararse para la escuelita

— Mhm~ Gracias Rapha

Leo aún estaba dormitando por lo que simplemente se abrazo al torso de Rapha restregando su nariz en el pecho de este, Rapha lo tomo nuevamente en brazos para ahora llevarlo a la habitación de el, pues necesitaban buscar algo abrigador que se pusiera antes de salir

Cuando ya ambos estuvieron listos y con Leo totalmente despierto y con ganas de hacer una rabieta se dirigieron a la salida de la alcantarilla, estaban totalmente cubiertos por lo que no tendrian problema con que los vieran

Caminaron un par de cuadras hasta llegar a una vieja casa que por fuera se veía abandonada pero por dentro era hermosa, pasaron directamente a la oficina que seria dónde los atenderían

— Buenas tardes, ustedes deben ser Raphael y Leonardo

— Así es señor

— ¿Tengo que estar aquí? — aquel susurro había salido de los labios de Leo haciendo resoplar a Rapha y sonreír al psicólogo

— Tu debes ser leo, ¿O me equivoco?

Leo salió de atrás de Rapha para inclinarse en forma de respeto hacia el contrario al ser una persona mayor que el, se enderezó y asintió mientras no quitaba la mirada de los orbes dorados de aquella lagartija humanoide

— ¿Nos podrías dejar solos Raphael?

— Claro, esperaré afuera — se acercó a Leo para darle un beso en la frente — Suerte Leo — con eso dicho salió de la habitación con una sonrisa, realmente estaba tratando de ganarse a Leo de a poco

— Bueno Leonardo, siéntate por favor

— Llámeme Leo, si tendré que confiar en usted, usted también debe confiar en mi — con eso dicho se sentó en la silla que se encontraba frente al escritorio de la lagartija

— Bien dicho, puedes decirme cómo quieras, aquí lo que importa es como te sientes tú, como te manejas en tu entorno, que es lo que te preocupa, que es lo que produce tu ansiedad, que te llevo a aisalerte, ¿Te gustaría empezar?

Leo quedó callado unos segundos antes de suspirar y quitarse su bandana junto a sus armas para dejarlas a un lado, miro a la lagartija aún no denominada de forma en específico para luego bajar la mirada, sus manos empezaban a picar al mismo tiempo que su pierna empezaba a golpetear contra el suelo reiteradas ocasiones, mientras empezaba a contar cada cosa de lo que había sucedido, la llegada de Casey hasta la pelea con la señora Krang. Al terminar sentía su cabeza doler y el como sus ojos picaban por el ardor de las lágrimas en sus heridas aún no totalmente cerradas, en algún momento del relato había empezado a rascarse los brazos produciéndose heridas, su desesperación y ansiedad eran totalmente entendibles pero el que se hiciera daño era algo que la lagartija debía buscar la forma de controlar, claro que eso dependía más de Leo que de el

— Leo, necesito que respires de forma lenta y tratemos de que te tranquilices, has esto, inhala lentamente, retenlo un poco y luego exhala de forma lenta — mientras decía aquello había Sido seguido por Leo quien había empezado a hiperventilar, cosa que de inmediato noto aquel mutante, y según la información que tenía debía llamar a alguien en quien leo tuviera total confianza, Raphael

Se levanto de la silla para salir mientras Leo trataba de controlar su respiración, no demoro mucho cuando Rapha entro cerrando la puerta detrás de el

— Leo...— se acercó a el para alzarlo de la silla y mantenerlo entre sus brazos apegado a su voluptuoso pecho — Todo está bien Leo, estoy aquí contigo

— Ra-Rapha...— su voz entrecortada solo buscaba la contención del mutante — es mi culpa...fue mi culpa...todo

— nada es tu culpa Leo, solo fueron errores que todos cometemos

Los sollozos y pequeños gritos que soltaba Leo era desgarrador para el corazón enamorado de Rapha, pero sabía o al menos tenía un indicio de lo que sentía Leo por lo que lo mejor era contenerlo en sus brazos y dejarlo desahogarse, sus grandes manos acariciaban su cintura mientras Leo se aferraba a su cuerpo

— Leo nada de lo que pasó fue tu culpa, somos un equipo el cual nos apoyamos entre todos, así como tú te preocupas por nosotros, nosotros lo hacemos por ti, estaremos siempre para ti Leo

¿que esconde leo?Место, где живут истории. Откройте их для себя