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— ¡No jodas, bastardo! —
Gritó furioso el rubio ceniza, soltándose del agarre que mantenía con el bicolor. Éste pareció entristecerse, entonces, tragándose su orgullo, volvió a tomar la mano del contrario. Los ojos dispares se iluminaron y le regaló una cálida sonrisa.
— Sigue con tus mariconadas y te dejo aquí —advirtió furioso el oji-rubí mirando asesinamente al omega, el cual, solo asintió. Los minutos pasaron, ninguno de los dos habló y el rubio, nuevamente, estaba enojado. — Mierda, habla o te explotaré —
Y ahí, Katsuki Bakugou cometió el peor error de su vida.
En los próximos minutos, Shoto nunca dejó de hablar. A duras penas se detenía a tomar aire y seguía hablando, de su comida favorita, de lo que hacía con sus hermanos y uno que otro tema íntimo que tenía el bicolor. Como son, sus celos, el tipo de juguetes que usaba y más.
Aunque esto le incomodaba y hacía que se le subieran los colores a la cara al rubio, no era capaz de callar al tierno omega que hablaba tan energéticamente –e irritable a la vez–.
Obviamente, los coscorrones no se hicieron esperar cuando tocaban esos delicados temas y la vergüenza llenaba cada esquina de su tímido, gruñón y protector ser. Aunque algunos golpes iban más dirigidos a los alfas que veían de manera inapropiada a su autonombrado amigo. Podía gritarle, pegarle y hacerle callar, pero jamás dejaría que algo le pasara.
Cuando llegaron a la tradicional y elegante casa del más alto, tocaron la puerta y el hermano mayor de Shoto atendió esta. Encontrándose con su inocente hermanito agarrado de la mano con un ratero que había sacado de quién-sabe-dónde.
— ¿¡Quién mierda es este fulano!? —
En cuestión de segundos, Touya se había lanzado hacia el rubio. Gritaba al cielo que le quería quitar la virginidad a su hermano, y muchas más incoherencias que el bicolor, siendo tan tímido, no era capaz de negar a causa del enorme alipori.
Aunque la virginidad ya la había perdido.
Continuará. . .
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Ahh, me encantó escribir esto. Siento que Bakugou sería el tipo de amigo gruñón, protector pero amable a la vez.
