041

6.8K 418 23
                                    

Finalmente ___ acepto, pero se negó a ir en mi auto asi que tuvimos que ir en el suyo. Llegamos a una heladería que los niños eligieron ya que tenía una enorme área de juegos.

Tenían cerca de veinte sabores, los cuales ___ tuvo que mencionar al menos tres veces para que Jared y Jennifer pudieran decidir, en especial Jennifer quien aun no sabía leer del todo bien.

- ¡Fresa!- dijo Jennifer quien estaba en brazos de su hermano

- ¡Vainilla!- se unió Jared

-Me hicieron repetir los sabores ¡tres veces! Para elegir lo mismo de siempre- les reclamo en juego y ambos rieron al igual que la cajera quien con una enorme y por supuesto estúpida sonrisa no dejaba de mirar a ___.

-Chocolate- dije de mala gana

Como era de esperarse no me dejo pagar y no precisamente por caballerosidad, si no por su actitud de "No necesito nada de ti"

-Yo los había invitado- le dije molesta sentándome en uno de los cómodos y llamativos sillones del colorido lugar. No me respondió nada, solo recargo sus codos en sus rodillas y cubrió su rostro. - ¿Porque me habías dicho que te "comenzaba" a agradar si no era cierto? - tome la cuchara para tomar un poco de helado y llevarlo a mi boca.

-Yo no mentí- dijo volteando hacia mi -Me agradaba la Camila de ese día.

- ¿La Camila de ese día?- pregunte entre risas

-Si- se recargo en el sillón y recargo su brazo en el respaldo de este quedando su brazo casi a la misma distancia que mi hombro. -Despreocupada, sin maquillaje, sin todos esos accesorios de sobra- rio

-Es lo mismo ___- le dije riendo -Con vestido, en pantalón, en short, con maquillaje o no, soy la misma.

-Claro que no- dijo seria -Nunca eres la misma. - Aseguro -Eres una en el campus, eres otra en tu casa, eres otra conmigo, eres otra con Dinah, eres otra con Casy, eres otra con mis hermanos- tenia razón. - ¿Y sabes que es lo malo?

- ¿Qué?- conteste intimidada

-Que nadie sabe cuál es la verdadera- un silencio nos inundo, solamente entre nosotras ya que todo alrededor nuestro seguía su común ritmo, personas platicaban, niños corrían de un lado a otro.

-Entonces ya tenemos algo en común...- dirige mi mirada hacia ella, quien solo volteo y me miro esperando una explicación. -También en el campus eres otra, en tu casa otra, conmigo otra... incluso ayer eras otra- regrese mi mirada al helado que comenzaba a derretirse

-No es...

-No digas nada- la interrumpí, no le estaba pidiendo explicaciones. - ¿Quieres?- le dije rompiendo el silencio nuevamente solo entre nosotras.

-Odio el chocolate-dijo negando con la cabeza

- ¡Eres una mentirosa!- le dije riendo -Casi acababas tu sola con un pastel de chocolate y ahora lo odias- se unió a mis risas, no podía negar que no era otra.

-Solo comí un poco- dijo frunciendo el ceño

- ¿Un poco? Si claro- dije sarcásticamente, tome un poco de helado con la cuchara una vez mas y la acerque a ella -Vamos solo un poco- me puse de rodillas sobre el sillón para acercarme solo un poco mas

-No- se negó nuevamente

-Se derretirá y caerá en tu ropa- canturreé

-Que no- dijo riendo al mismo tiempo que me abrazaba por la cintura haciéndome quedar nuevamente sentada solo que nuestra distancia se había convertido a prácticamente nada. Levante nuevamente la blanca cucharilla y la acerque a ella quien finalmente abrió la boca. Sonreí victoriosa y esta vez yo tome su mejilla con mi mano libre, no necesite guiarla y mucho menos acercarme, ella solo se dirijo hacia mis labios.

Subió su mano hacia mi cuello, evitando que me separara pero era algo que ni de broma haría.

-Tu mano esta fría- dijo riendo entre besos, era lógico después de haber sostenido el vaso con nieve por más de quince minutos. Le sonreí y volví a unir nuestros labios, solo que tome su mano que estaba en mi cuello y la baje para entrelazar nuestros dedos y que la temperatura de esta se regulara. Una vez más se alejo de mis labios y su mirada se enfoco en nuestras manos entrelazadas, levanto una de sus naturalmente bien definidas cejas.

-Ya no esta fría- fue lo único que logre decir y negó con la cabeza riendo. Por un desconocido motivo gire mi rostro y me encontré con nadie mas y nadie menos que Dinah y Tamara quienes nos miraban más que sorprendidas. Tamara reacciono y sacudió un poco su cabeza y volteo a ver a Dinah quien seguía con los ojos como platos.

Había ganado la apuesta.




la cosa está cada vez mejor aksdfdksldj, por si alguien lee "dulce tentación" haré maratón alli muy pronto c:


ily -obviouslana

Me, Myself and Time | Camila Cabello y tú [EN EDICIÓN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora