¿Qué sería de mi sin ella?

Capítulo 7

Nunca espere que la moto en la que me había apoyado Saúl al sacarme de la escuela fuera de él, pero bueno eso no importaba yo sólo quería llegar a mí casa y por fin había llegado, me baje corriendo de la moto y subí las escaleras para llegar a la casa, abrí la puerta y ví a mi mamá recargada en el sofá
-Mami ¿estás bien?
-Si, hija- por alguna razón no me creía sus palabras, me acerque a ella y sentía como alguien estaba a mis espaldas, claro se me había olvidado Saúl, y ya cuando iba a llegar a mi madre ella denuevo se desmayo y enserio agradecí que Saúl estuviera allí porque él la sostuvo antes de que cayera, esto no parece una simple baja de presión.
-Gracias Saúl, podrías acostarla en el sofá porfavor
-Claro, Tess lo que tú digas-se quedo algo pensativo como si estuviera indeciso entre decirme algo o no-yo se que esto no me incumbe Tess pero... ¿Qué tan frecuentes han sido estos desmayos repentinos?
-Delante de mí, esta ah sido la segunda vez
-Tess yo sé que no me incumbe de verdad, pero deberías de llevarla a hacerse unos estudios...
-Lo sé Saúl pero no puedo
-¿Por qué dices eso?
-Porque yo no quiero que nadie me haga ningún estudio-respondió mi mamá
-Ma, ¿ya estás mejor?
-Si, hija, lo que pasa es que en toda la noche yo no pude descansar, lo lamento hija, no quería preocuparte
-Ma, quieras o no siempre me preocupare por ti.
-¿Por qué estas aquí?, la escuela todavía no ah terminado-me dijo mi mamá, hasta yo se que sonaba estúpida mi razón.
-Sólo quería comprobar que estuvieras bien.-Saúl se me quedo viendo y mi mamá también, ¿acaso tenía monos en la cara? Oh, cierto, no los había presentado
-Ma, él es Saúl Amaury, fue el que me trajo a la casa. Saúl, está es mi mamá, Lorena.- Saúl extendió la mano hacia mi mamá y se saludaron
-Mucho gusto señora-le dijo Saúl a mi mamá
-Igualmente Amaury-le dijo mí mamá-hija no puedes quedarte aquí, debes de regresar a la escuela, yo prometo no moverme de aquí
-No, ma, no voy a poner mis estudios antes que a ti, tú eres mucho más importante
-Hija, no te preocupes.
-Hace rato no me preocupe y bueno, no fue buena idea no preocuparme
-De verdad te vas a quedar a cuidarme ¿verdad?
-Asi es mami, no pienso dejarte. Saúl de verdad muchas gracias por traerme.
-¿No quieres que me quede por si se te llega a ofrecer algo, bonita?
-No, Saúl, de verdad, ya me ayudaste trayendome
-Esta bien, hermosa. Cualquier cosa sólo llámame.-iba a decirle que no podría debido a que no tenía su número pero al parecer él lo recordó- o mejor dame tu número
-O mejor te llevo a la entrada y te agradezco por traerme-lo se sone un poco grosera pero es sólo que no tenía ganas de hablar con nadie.
-Claro, disculpa. Espero se mejore señora.
-Gracias, Amaury.- lo acompañe a la puerta.
-Hasta luego Tess- se inclinó hacía mí y me dio un beso en la frente, eso se sintió bien, vi cómo se iba, le sostuve su mano y lo abracé
-Gracias Saúl, de verdad- él me correspondió el abrazo y deposito otro beso en mi nuca, lo solté pero él todavía tardó un poco en soltarme, tomo mí barbilla entre sus manos y levantó mi cara
-No me gustó verte llorar, hermosa y si lo puedo evitar o por lo menos puedo ayudar, lo haré.- beso mi mejilla y se fue.

Al siguiente dia mi mamá ya amaneció mejor y ayer ya no se volvió a desmayar, y eso me hizo sentir bien, le preparé si desayuno y desayuné con ella para asegurarme de que comiera, intente convencerla para llevarla a hacerse estudios pero siempre era la misma respuesta, un NO, Dios de verdad mi madre era terca, incluso más que yo, decidí mejor dejar el tema por ahora e irme a la escuela, subí a lavarme los dientes, me vestí con un vestido floreado ya que se veía que hoy iba a hacer mucho calor, baje corriendo, tome mi mochila, me despedí de mi mamá y al salir de mi casa me sorprendió lo que vi, vi a un Saúl afuera de un audi, con una sonrisa en la cara y una rosa roja en la mano, subió las escaleras para llegar a la casa y me saludó
-Hola, hermosa.-no lo pude evitar y empecé a sonreir como idiota.
-Hola, Saúl.
-Espero no te moleste que haya venido por tí para llevarte a la escuela
-Honestamente no me molesta pero hubiera preferido ir caminando para asi tener una excusa y poder tomar tú mano.-Saul me dedico una de sus sonrisas que yo clasificaría como coqueta y tomo mi mano
-Hermosa, te puedo asegurar que no hace falta ninguna excusa. Ahora permíteme tomar tú mochila por tí.
-Vaya, pero que caballeroso Saúl.-tomó mi mochila de mi hombro y yo le di un beso en la mejilla.-gracias.
-Ven, guapa- yo pense que me iba a llevar al coche pero no fue así.
-¿Adónde vamos?
-A la escuela
-¿Y tú coche?
-No importa, así tendre una excusa para regresarme contigo.- y sorprendentemente así fue por un mes, mí mamá ya no se había vuelto a poner mal, Saúl era super dulce conmigo pero al parecer eso le molestaba a Wendy, un día decidí preguntarle pero ella sólo me dijo que era porque yo era su amiga y no quería que ese idiota me lastimara, pero yo no le podía creer por alguna razón, sentía que habia alguna itra razón por la cual Wendy se enojaba, Cristian no había llamado para saber de mí, eso de cierto modo me asustó ¿y qué tal que sólo me había dicho esas cosas en broma y yo me las creí? Hoy Saúl no vino por mí hoy a mi casa, ¿Se habrá enojado conmigo?, pero ¿De qué?