Crisis en el Universo del Videojuego

Capítulo 23- Panther Kingdom

Dallas.- Pero que rayos...

Chains.- ¡Alto ahí, niña! Es hora de...

Momo.- ¡Wonder Ring!

Al ver que Chains le apuntaba con su arma, Wonder Momo sacó una especie de anillo brillante y lo arrojó, partiendo el arma en dos y dejando a Chains con una clara expresión de sorpresa.

Marcus Reed.- ¿Quién eres?

Momo.- ¡Soy Wonder Momo! La gran peleadora de la justicia y castigaré a los villanos que perturben la paz.

Dallas.- Creo que este atraco se está complicando...

Pero en ese momento, sucedió algo extraño. El cielo repentinamente se puso rojo y un montón de portales aparecieron por todas partes, por lo visto...

-Sí, sí. Déjame adivinar, Giygas conquistó otro mundo.

Pues sí, ¿quién está hablando? ¿Quién es el que se atreve a interrumpir al todopoderoso autor de esta historia?

-Pues nada más ni nada menos que el protagonista de este capítulo.

¡Conker la ardilla (Diddy Kong Racing)! Debí suponer que aparecerías rompiendo la cuarta pared... Aunque nunca imaginé que llegarás a este extremo. ¿Qué es lo que quieres, Conker?

Conker.- Bueno, tengo muchas quejas... ¡No me incluiste en el fic original! Soy una insignia de los videojuegos.

Oye, eso no fue mi culpa... Banjo y Kazooie eran una mejor opción para representar Rare. Además, ya estas incluido en esta secuela, ¡felicidades!

Conker.- Y aun así te tardaste en actualizar mi capítulo... Como sea, quiero una gran aventura en este capítulo. ¡Algo épico, ya sabes! Quiero mi universo bien representado, con todas mis obscenidades, humor negro y referencias, ya sabes, nada infantil.

Haré lo que pueda, pero este fic es apto para todas las edades y...

Conker.- Sí, supuse que dirías eso. Por eso te traigo una propuesta.

¿Qué propuesta?

Conker.- ¡Yo narraré el capítulo de hoy!

¿Enserio? ¿Quieres narrar el capítulo?

Conker.- Por supuesto que sí. Soy una insignia del Nintendo 64 (Aunque ahora esté atrapado con Microsoft), seguro que todos estarán felices si soy yo quien narra este capítulo.

Bueno, eso tiene algo de sentido, pero no me convence del todo...

Conker.- Vamos, autor. ¡Voy a contarles cómo comenzó todo y dejaré mi mundo bien representado! Ya sabes, mi gran mundo lleno de alcohol, dinero, corrupción, parodias, sangre, armas, humor negro y donde cualquier objeto inanimado tiene ojos y puede hablar.

Pues... Está bien, te dejaré narrar el inicio del capítulo, pero recuerda que este es un fic para todas las edades.

Conker.- Oye, soy una ardilla que habla. Cualquiera que me vea y no me conozca, seguro pensará que soy un personaje infantil.

Sí, tu juego causó polémica por eso mismo... Como sea, puedes narrar el capítulo, pero si se te ocurre decir alguna palabrota, te voy a censurar.

Conker.- En ese caso, será mejor que se preparen, lectores. Tengo una gran historia, una larga y gran historia que contar. Acérquense y se las contaré...

Había tenido uno de esos días, un mal y peludo día, así que fui a desahogarme un poco en mi bar favorito. Ahí conocí a un tipo interesante que venía de otra dimensión. Era un sujeto bastante extraño, tenía una cabeza de taza con un sorbete y parecía una caricatura antigua... Pero da igual; soy amigo de una especie de tenedor de granja, así que esto no es tan raro para mí.