—Hola, ____.—Scorpius llamó la atención de la mujer, quien revisaba el horno antes de apagarlo.
—Buenas noches, señor.—le sonrió con dulzura—. Felicidades.—
El chico le sonrió antes de perderse en la sala de nuevo, seguramente en busca de su hermana. El par de adultos quedó a solas.
—Si vinieron.—____ miró a Draco con una leve sonrisa, mientras abría el horno y corroboraba que estuviese bien.
—No nos lo perderíamos.—
—Me da curiosidad qué excusa usaste para venir.—
Draco se sentó en la isla de la cocina, mirando a la mujer sacar la carne del horno.
—Pues... Ninguna. Nos escapamos de casa de papá.—
—¡Malfoy! Esa es una pésima idea.—
La mujer se quemó apenas por un descuido, y Draco no tardó en acercarse.
—¿¡Estás bien!?—
—Si si, solo es una quemadita pequeña...—metió la mano bajo el agua de la canilla—. ¿Seguro de que esta bien que hayan venido asi?—
—¿Por qué lo dices?—
—Tu padre... ¿No crees que se preocupará por tu desaparición y la de su nieto?—
—Tranquila, ya pensaré en eso luego.—
—Pues no te tardes mucho...—____ comenzó a cortar la carne, sirviéndola en una bandeja—. Porque no pienso dejar que tu padre venga a armar un alboroto por estos lares.—
—No lo dejaré, lo prometo.—Draco le sonrió, dándole tranquilidad—. ¿Te ayudo con eso?—
~•~
Después de una agradable cena, los cuatro se sentaron en el jardín trasero a observar el cielo.
—Solo faltan unos minutos, cuando sean las 12, se iluminará todo el cielo.—
Zafira miraba a Scorpius, quien traía a su hurón en brazos.
Draco y ____ los observaban desde unos metros atrás, sintiendo una agradable sensación por toda la situación.
—Oh, tengo algunos regalos en el auto ¿Crees que deba ir por ellos ahora?—Draco llamó la atención de la mujer, quien negó apenas.
—Déjalos para después.—lo miró—. ¿No te parece que recibir la medianoche juntos es más importante?—
Juntos...
—¿Juntos cómo?—un rayo de emoción en su rostro lo delató. La mujer no tardó en sonreír.
—Lo dejo a tu imaginación.—
—Ah, me temo que mi imaginación está más allá de la realidad, no me des tanto margen.—
La risita de ____ alegró sus oídos, justo cuando Zafira y Scorpius se acercaban apurados.
—¡Ya son las 12!—
El cielo no tardó en cubrirse de cientos de luces, y los lejanos estruendos de fuegos artificiales retumbaban en armonía. Zafira sacó su varita, disparando al cielo pequeños destellos de luces. Scorpius se emocionó, pidiendo a su hermana que le enseñara cómo hacerlo.
—Es la primera vez que lo veo tan emocionado...—
—¿Qué hay de ti?—____ llamó la atención de Draco—. ¿Fue una buena noche?—
Algo inseguro, Draco tomó las manos de la mujer, estrechándolas con cariño. Se sintió realmente bien al ver que ella no lo apartó.
—Feliz navidad, ____... Volverte a encontrar, conocer a Zafira... Sin duda fue el mejor regalo que pude haber recibido.—
La mujer se liberó de su agarre, guiando sus manos al rostro ajeno. Draco sintió que se quedaba sin aliento en cuanto las manos ajenas acunaron sus mejillas.
—... ¿Puedo pedir un regalo más?—____ sonrió al ver aquel par de orbes azules mirarla de la misma manera en que lo hacían años atrás. No tardó en besarlo.
No fue un beso muy complejo, ni tampoco muy extenso, pero fue suficiente para que Draco se decidiera no volver a perder esa dulce calidez que le brindaban.
—Feliz navidad para ti también, Malfoy...—
~•~
*Algunos días después*
Las clases en Hogwarts volvían a la normalidad, y por miedo a lo que podría pasar en el ciclo lectivo, ____ y Draco pidieron una cita con la directora Mcgonagall. Debían asegurar la seguridad de sus hijos.
—Tenemos que esperar un poco más ¿Vas por tu hermano?—
____ le alcanzó a su hija una bufanda, indicándole que saliera al patio. Zafira caminaba a paso tranquilo, cuando un hombre solitario se mantenía sentado en un banco a la intemperie. Se lo veía distraído. Absorto.
—¿No cree que hace mucho frío, señor? Si quiere lo acompaño adentro.—
El anciano volteó al escuchar aquello, sintiendo como su corazón se estrujaba un poquito.
—Narcissa...—
La joven miró confundida al hombre, pues aquel era el nombre de su abuela. Antes de poder consultarle, vio a Draco acercarse con Scorpius.
—... Hija, volvamos con tu madre ¿Si?—
La chica asintió, y tras acercarse a su padre, se adelantó junto a Scorpius, quien parecía apurado por alejarse. Draco se mantuvo dubitativo un segundo, hasta que finalmente se acercó a su padre. No dijo nada, solo revisó en el bolsillo interno de su chaqueta, sacando una pequeña foto. Tan rápido como Lucius la tomó, Draco se alejó, perdiéndose en los pasillos de la escuela.
Lucius presionó aquella fotografía con pesar al ver a su querida esposa posar con aquella pequeña en brazos.
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