Newt

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Cuando Leta Lestrange entró a la torre de astronomía en busca de su amigo, se extrañó al verlo tan absorto en sus pensamientos, con la mirada clavada en el enorme ventanal.

—¿qué miras, Newt?—

El rubio dio un respingo, volcando por accidente el cuenco con agua que cargaba sobre su ropa.

—L-leta...—volteó apenado—. Nada... n-no miro nada.—

Sin creerle ni un poco aquella vaga respuesta, la morena se asomó por la ventana, extrañándose al ver aquella cabellera desagradablemente conocida.

—¿Malfoy?—lo miró incrédula.

—____... escuché que quiere entrar al equipo de quiddich.—Leta frunció el ceño al ver la sonrisa enamorada en el rostro de Newt—. Se está esforzando mucho...—

—No va entrar, ninguna chica esta en el equipo.—

—Bueno, yo creo que ella es buena.—la morena rodó los ojos.

—¿y tú qué sabes de quiddich? Tienes tanto deporte como yo amigos...—

Ignorando la evidente molestia de su amiga, Newt volvió la mirada a la rubia, quien recorría el cielo sin mucho esfuerzo intentando atrapar la pequeña esfera dorada.

°•°

Como todas las noches, Newt se escabullía de su cuarto para cuidar aquel pequeño bowtruckle que vivía en un árbol del patio.
Sabía a la perfección el recorrido del celador, y a pesar de que nunca había tenido ningún inconveniente, esa noche cierto Slytherin se interpuso en su camino.

—Vaya, vaya, vaya... miren qué tenemos aquí.—el moreno empujó con brusquedad a Newt, tumbándolo en el suelo.

—No quiero problemas, solo... déjame ir.—

—Ya lo escuchaste, lárgate de aquí.—

El corazón del rubio dio un brinco cuando cierta chica se acercó al lugar.

—¿qué haces aquí? Deberías estar durmiendo.—

—Lo mismo va para ti, idiota. Vuelve a los cuartos antes de que le diga al celador que estabas vagando por la escuela.—el moreno la miró molesto.

—Tú también estás fuera de la cama, ____. Estamos en las mismas.—

—Soy una Malfoy ¿te crees que le tengo miedo al viejo celador? Ya, lárgate de aquí... y no vuelvas a ser un estorbo, o mi padre se enterará.—

Con una evidente molestia, el chico se marchó, dejando al dúo a solas.

—¿estás bien?—____ finalmente se dirigió a Newt, a quien le ofreció la mano.

—S-sí...—

—Duncan es un imbécil, si vuelve a molestarte avísame... le daré su merecido.—

—Gracias...—

—Entonces, Scamander... ¿a dónde ibas? —

—¿Sabes quién soy?—los ojitos del rubio brillaron emocionados.

—Newt Scamander... el Hufflepuff que le teme al trabajo de oficina.—una sonrisa divertida apareció en el rostro de ____—. Nunca olvidaré esa clase de defensa contra las artes oscuras... estuviste genial.—

Newt agradecía enormemente la poca iluminación del lugar, pues sabía muy bien que su rostro estaba más rojo que el cabello de los Weasley.

—¿y tú... qué haces fuera de la cama?—

~One shots e imaginas de Harry Potter Où les histoires vivent. Découvrez maintenant