Another Love •FarfaRich•

C9

—No lo entiendo.

Aquello llamo la atención del farfano, quien había permanecido en silencio mientras el de cicatrices trataba las recientes heridas repartidas en distintas partes de su cuerpo debido a la reciente expansión de la corrupción que habitaba en su interior.

—¿Qué cosa no entendés?

—Porque esta cosa ha vuelto.

—Ni idea, pensé que todo se terminó después de la últimaa vez. 

—¿Quizás fue mi culpa? Hago que te preocupes mucho últimamente.

—Si, lo haces— Ante sus palabras una pequeña sonrisa se arrastró en los labios del contrario— Pero ya fue, estoy acá porque quiero igual.

—Lo haces porque eres muy tonto.

Un bufido fue la única respuesta que Rich había obtenido, continuo con su labor con manos expertas, eventualmente la sustancia en su cuerpo se había drenado, dejando como única evidencia de lo sucedido heridas abiertas, reemplazando la sustancia profana con escarlata.

—Bueno, al menos ya no es la cosa esa del nether.

—Me estoy desangrando la concha de tu madre, cóseme rápido.

—Supongo que ya sabes esto, pero va a escocer un poco.

Farfadox no tuvo tiempo a responder antes de que la aguja perforara su piel obligándolo a resoplar mientras dejaba caer la cabeza hacia atrás, no tenía que ver el rostro ajeno para adivinar que la situación divertía al más alto.

No era como si no estuviera acostumbrado a aquel dolor tan característico, los enfrentamientos en los que se había enzarzado a lo largo de su vida se encontraban grabados en su piel, había perdido la cuenta de las veces que tuvo que unir su carne una y otra vez para impedir que la vida escapase de su cuerpo.

Por lo que el dolor era una vieja sensación conocida que se transformaba en molestia, sin embargo, aquella sustancia profana en su cuerpo corroía todo a su alrededor, la piel en su torso era más bien una amalgama de quemaduras y bordes demasiado sensibles.

Siseo cuando la aguja atravesó un punto especialmente sensible, oyó una disculpa descuidada por parte del otro, quien inmerso en su concentración apenas era consciente de la molestia del farfano.

—Venga, esto esta listo, lo has aguantado bien.

—Cállate— Gruño mientras dejaba escapar lentamente el aire que había estado conteniendo.

—¿Quieres algo para el dolor? No pensaba que te dolería demasiado.

—No, solo dame un minuto.

—Tienes suerte de que tus ojos se encuentren intactos.

—Aja, la mierda esta casi me deja ciego.

Le tomo apenas un par de segundos recuperarse de la picazón y el ligero mareo que había llegado a su cabeza, sus ojos ardían y su mirada usualmente clara ahora se encontraba irritada, mientras vendaba las recientes suturas observó como el contrario se movía por el lugar arreglando todo, fue allí donde un pensamiento llego a su cabeza.

—Che, ¿Vas a organizar el Secret Santa? Ahí Conter me lo pregunto.

—Ah, lo había olvidado, pero si, lo voy a planear pronto.

—¿No es mucho trabajo para vos?

Aquellas palabras consiguieron arrancar una ligera carcajada al de cicatrices.

—Farfa, soy el administrador de todo esto, nunca es demasiado— Al farfano le hubiese gustado rebatir ese hecho, pero no tuvo oportunidad antes de la siguiente oferta— Pero si tanto te preocupa ¿Por qué no me ayudas con eso?