Another Love •FarfaRich•

C8

—¿Estás bien? —Fueron las primeras palabras que el farfano había dejado escapar en un acto reflejo.

—Farfa— Musito el de cicatrices, tomando un par de segundos para recuperarse por completo— Si, lo siento tío.

—¿Una pesadilla? —Cuestionó mientras se dejaba caer en el espacio que el azabache palmeaba a su lado.

—Sorprendentemente no— Respondió, intentando desviar el tema antes de que el otro indagase demasiado —¿Llevas mucho rato ahí?

—No, estuve dando una vuelta por el Imperio, pero los chabones seguían durmiendo, recién llegué acá— El contrario asintió a sus palabras.

—Y que ¿Todo bien con tus colegas?

—Sí, solo uno de los pelotudos que no vino— Comenzó a relatar lo sucedido, mientras se deshacía de su casco.

Pronto sus palabras llenaron el silencio del lugar, lo cual Rich agradeció internamente, escuchó pacientemente su relato con los ojos cerrados permitiendo que el descanso se acentuará sobre sus hombros.

Mientras escuchaba al farfano, sus pensamientos comenzaron a divagar sobre la idea que había echado raíces en su mente en el frenesí que había tenido al despertar.

Rebusco en su memoria todo aquello que conocía del de armadura, recopiló la información con cuidado, buscando la manera más efectiva de llegar a los sentimientos del otro.

No había notado que Farfadox actuase de un modo romántico con alguien antes, lo más cercano que podía tomar como referencia eran las interacciones con Cristinini, pero estaba seguro de que aquello ni siquiera era una actitud sentimental sino algún ligoteo en el mejor de los casos.

—¿Me estás escuchando, boludo? —El repentino cuestionamiento lo obligó a salir de sus pensamientos y abrir los ojos.

—Que sí— Repuso forzando una pequeña sonrisa— ¿Te hace ilusión verlos de nuevo?

—Y obvio— Respondió con obviedad mientras revisaba su teléfono— ¿Tenés algo que hacer ahora?

—¿Ahora? —Se tomó un par de segundos para pensarlo— Nada, iba a dar una vuelta por Elite a ver si todo está en orden.

—Te acompaño— Menciono mientras se levantaba— Los chicos del imperio quieren hacer algo más tarde.

—¿No deberías descansar? —Sugirió mientras terminaba de complementar su vestimenta.

—No me siento cansado— Respondió con simpleza, puesto que en su larga formación como guerrero había aprendido a subsistir con el descanso mínimo— De última no sé, duermo en la tarde.

Rich tarareo en respuesta mientras lavaba su rostro, intentando deshacerse de cualquier vestigio que delatase la tortuosa noche que había pasado, intentó aplacar algunos rizos salvajes sin demasiado éxito.

—Ya está— Menciono, ganándose la atención del farfano— ¿Nos vamos?

—Vamos.

Ambos emprendieron camino con sus élitros, desde las alturas la extensión de las tierras de Elitecraft lucia diferente, las distintas construcciones a lo largo de su extensión le daban un aire pintoresco que reflejaba la personalidad de cada uno de sus constructores.

Aquella tierra era el segundo orgullo del administrador, demasiados años de esfuerzo perfeccionando cada uno de los detalles para que la convivencia fuese tranquila.

Era consciente de que muchos de los habitantes estaban agradecidos con él debido a ello, sin embargo, aun viendo todos sus planes realizados con éxito, ya no podía sentir las cosas de la misma manera.