Ganador (Tweek x Craig)

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Capítulo uno:
Narrador Craig

Día 1
Apenas empezó el año escolar y ya me había amargado por completo. Lo primero que veo cuando llego a la escuela es al desgraciado de Tweek hablando muy reído con mi novia Ashley, no puedo creer que él teniendo su novia aún así quiera andar de baboso con la mía. Esta situación me puso bastante tenso así que decidí acercarme.

—Interrumpo algo?— cuestioné levantando una ceja al mirar a ambos —Oh amor, no interrumpes nada, aquí tweek me estaba contando que posiblemente sea el capitan del equipo de fútbol americano este año— dijo mi novia sonriente —Pero de que hablas si yo siempre he sido capitán— miré con cierto desprecio a Tweek —Bueno Craig, las cosas cambian, sabes? Que siempre lo hayas sido no significa que este año tenga que ser todo igual— respondió Tweek con una cara y sonrisa burlona —De verdad que contigo no se puede hablar sin que salgas con una de tus estupideces— tome a Ashley de la mano y justo cuando estaba a punto de irme Tweek habló —No creo que tu novia piense lo mismo de mi— suspiré profundamente y salí de ahí rápido antes de que se me saliera una barbaridad.

Luego de un largo día de clases, era hora de ir al entrenamiento de las tardes. Me despedí de Ashley que ya se tenía que ir a su casa y me dirigí a los cambiadores masculinos.

Ya ahí fui a mi locker y me desvestí, quedando solo en bóxers. De reojo pude notar que Tweek me estaba observando, extrañado y algo molesto, me giré en su dirección—Que me ves imbécil?— noté como había quitado la mirada cuando lo miré —Yo viéndote a ti? Pffft no me hagas reír, de seguro lo alucinaste— contestó tajante y por supuesto Cartman tuvo que meterse en la conversación —Ey Tweek, de seguro te volviste maricon por que tu noviecita ya ni te topa en la escuela— todos en los cambiadores nos reímos mientras que a Tweek se le veía avergonzado y sus ticks nerviosos aparecieron —Y-Yo no soy ningún maricon Cartman! Y tu no tienes derecho a hablar porque tu mamá es la única mujer que te quiere, en todo caso tú serías el que se volvería gay— .

Durante el entrenamiento, Tweek como siempre, se la pasó lamiéndole las bolas al entrenador, era tan irritante que realmente pensara que así me iba a quitar mi puesto como capitán, al menos yo si demuestro que me lo merezco con acciones y no con puras palabras vacías. Además que el tarado no me quiso ni pasar la pelota aunque le costará un regaño sobre trabajo en equipo, que él mismo se arruine todo lo que quiera, al final salgo ganando yo.