El Cartel del Sur [kookv]

Capítulo 1: Ruleta Rusa

Los ojos del encargado de aquel casino que tenía una máscara parecía a la del otro sujeto pero esta era de un color rojo oscuro, sus ojos se fijaron en aquella figura espectral y los ojos de aquel misterioso ser lo vieron con una incontrolable ira y con suma fineza, seguridad y tranquilos pasos esa solemne persona prendió camino hacia donde se encontraba el encargado y como para representar mejor su papel, pavoneándose de un lado a otro entre los que habían dejado de lado sus apuestas para contemplar a ese imponente ser.

Todos se apartaron rápidamente dejándole el paso libre ya que una perturbación momentánea recorría toda aquella multitud y es qué sintieron un aura frío e vanar de él, un violento estremecimiento de terror les calo por su columna vertebral haciéndolos ponerse más rígidos en su lugar.

— ¡Draco! – llamó el encargado del casino que lo estaba esperando en la entrada de su oficina y lo vio acercarse más hacía su persona con paso tranquilo y majestuoso.

— ¿Qué paso RM? – respondió con voz neutra el misterioso sujeto — Para que me llamaste, tengo cosas importantes que hacer.

— Tenemos que hablar en privado, así que entremos a la oficina – dijo el de mascara roja que se hacia llamar RM

Entraron a la oficina y esta hacia un perfecto contraste con el casino que quedaba en la parte baja del lugar, esta no era muy diferente al casino, sus paredes de un color gris, el escritorio era de caoba con un barniz café oscuro y los asientos de terciopelo negro con una gran ventana que tenía un espejo unidireccional que daba a la vista a todo el casino.

— Es casi media noche – se sentó con suma elegancia en la silla frente al imponente escritorio — Espero sea algo que valga totalmente la pena Namjoon.

— Alguien nos está asechando desde la oscuridad.

— Si hablas de un infiltran lo sé — respondió sin tomarle mucha importancia a él asunto – Se que hay uno.

Y no era mentira desde hace una semana atrás le había llegado el informe de un posible traidor en su cartel y aun qué él ya sospechara de quien se trataba decidió dejar las cosas como están para ver hasta donde sería capaz de llegar esa persona y cuál sería su cometido haciendo semejante idiotez.

— No solo eso, me han informado que Mark Black el hijo del jefe del Cartel del Este no a pagado su deuda y huyo a Corea.

— Entonces hay que viajar a Corea, hay que ir a visitarlo se atreven a poner un pie en mi territorio y luego les da miedo y huyen del país, patéticos.

— No te va a importar que sea hijo del jefe del clan del Este ¿verdad?, él Cartel del Este es el segundo más grande.

— Tienes razón, no me importa y me importa un culo si se arma otra guerra entre los carteles.

— Además Liam nos embargó una carga de drogas que iba directo a Corea del sur, al parecer está ahí porque está reclutando a otra persona para que le ayude a atraparte.

— Maldito Liam es como un grano en el culo, hay que descubrir quién va a ser el otro investigador, hay que ir siempre un paso adelante.

— Además tenía que decirte que ya están listas las mujeres y hombres que contratamos hace unas semanas, ya están listos para ser sicarios en nuestro club Big Dragón y algunos de los preadolescentes que secuestramos ya los pusimos a entrenar para ser sicarios del cartel del sur.

— ¿Qué les dijeron esta vez a esos niños cuando fueron sacados de sus casas y fueron llevados a el lugar de entrenamiento?

— Les dijimos lo de siempre, que algunos fueron elegidos para ser militares, a otros les dijimos que son huérfanos y que los adoptamos y a algunos le dijimos que están en el cartel del sur por una deuda de sus padres y que los ofrecieron como paga.