Apocalipsis de elite (Classroom of the elite)

Piedad y crueldad

¡Hey! Muchas gracias por el apoyo. Espero les guste el nuevo capitulo. 

Comencemos

Los pasillos estaban inundados, sangre desparramada, estudiantes despedazados. La resurrección dejó de ser un concepto surrealista para mí y para cualquier persona consciente de la extrema situación.

Esas cosas se aproximaban hacia nosotros, la azotea pudo ser un lugar tranquilo para pasar el confinamiento, pero conociendo a esta chica. De alguna u otra forma querrá ayudar a los demás, incluso si el precio es pagar con su propia vida.

Kiyotaka- Quédate detrás de mío –ordene de un grave tono- Sino quienes terminar como el resto, se fuerte... Honami... -la llamé por su nombre y me asegure de transmitirle seguridad. Era vital contar con su apoyo, no quiero cargar con peso muerto por siempre

Ichinose- Está-está bien –contesto nerviosa y se pegó hacia mí. Sentí como su cuerpo temblaba del miedo

"¡RAAHHH! ¡WUAGHHH!"

Gruñidos, al parecer se comunican o avisan de su inminente llegada mediante tales sonidos. Eran unos cincos, acababan su festín y se aproximaban hacia nosotros. Al principio caminaba, pero sus pasos se volvían rápidos.

Me desajusté la corbata, la envolví en mi puño derecho y soltando un suspiro. Di a entender lo problemática que era esta situación, demasiado esfuerzo para un alumno normal como yo.

Lance un gancho hacia el resto del primero, mi fuerza fue suficiente para desplomarlo al suelo y ganar tiempo con los demás, trataron de atraparme con sus brazos, pero rápidamente levante un poco mi pierna para asestar una patada en el torso que empujo al otro contra el tercero.

Eran lentos a la hora de recuperarse, al parecer las partes perdidas... las mordidas o miembros que perdieron era otro factor más en su contra.

Ichinose- ¡Cuidado! –exclamo preocupada y me alerto

El cuarto consiguió su cometido, se abalanzo contra mí. Quería derribar al suelo, pero enganchando mi mano en su garganta, conecté un recto golpe a la tráquea... literalmente... su piel era débil, tanto que lo atravesé.

El último de ellos también se lanzó, aunque con viveza utilice de escudo el cuerpo del otro. A pesar de que su traque había sido perforado, seguía moviéndose... mordisqueaba el aire...

Los otros se levantaban y los cada vez me veía más acorralado.

Kiyotaka- Honami... -la llamé, era ahora o nunca. Necesitaba de ella- Prepárate para correr

Ichinose- ¿Q-qué...? –replico nerviosa

Kiyotaka- A mi señal –fui directo, podré haber tenido un entrenamiento y mi fuerza es incomparable, pero en grupos estas cosas son peligrosas- 3...

Ichinose- Es-espera... -asustada

Kiyotaka- 2... -como escudo lograba mantener a raya a todos. No iba a resiste mucho y pronto tendríamos que salir huyendo- 1...