Tome impulso y sacando mi mano del asqueroso cuello de ese tipo, lo empujo contra los demás para que perdieran una vez más el equilibrio.
Kiyotaka- Ahora –ordene al ver como una brecha se generó
Espere a que haya se pusiera delante y siguiendo su ritmo. Una persecución inició debido a que, de los tantos salones, más y más salían a cazarnos al escuchar nuestras pisadas.
Ichinose- Nos alcanzan... -cansada, su velocidad disminuía y tras nosotros una manada de salvajes se acercaba- Cada-cada vez, hay más... ya no puedo...
Kiyotaka- Cuidado –advertí secamente para de un tirón tomarla de mi mano y aferrarla por mi cuerpo- Esto se pondrá feo –le susurré seriamente para junto a ella arrodillarme
"¡PUUMM!"
Un disparo directo al cerebro que desparramo la sangre sobre mi saco, es asqueroso
La manada se alertó y centrándose en la dirección del disparo, cambiaron de objetivo, pero su reacción otra vez fue tardía.
"¡PUUMM! ¡PUUMM! ¡PUUMM!"
Tres disparos en 30 segundos, 1 por cada intervalo de 10.
Aquella mujer, ¿mi salvadora? Portaba una fina puntería, ¿qué habrá pasado en la sala blanca?
¿?- El mundo es muy pequeño, ¿verdad, Senpai? –de un tono agraciado me remarco- Sabía que estarías vivo. Pero, ¿no me darás las gracias?
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Kiyotaka- ¿A qué te refieres? –pregunte tras soltar a Ichinose y levantarme para limpiarme un poco la sangre- Como yo lo veo, solo has alertado a más de esas cosas... -comento al señalar hacia el pasillo de atrás y ver como en la entrada se amontonaban- ¿Quién te dio el arma, Amasawa?
Ichika- ¡Llámame, Ichika! –refuto y exclamo- Y sobre esto... hablaremos después, más cómodos. No quisiera ser destrozada por nadie más que tú... senpai –se expresó coqueta
Kiyotaka- ¿Estas bien? –ignoré su comentario y me dirigí a Ichinose- Lamento haber sido tan brusco, no tenía opciones y ahora... tampoco las tenemos, ¿puedes seguir?
Ichika- ¡Hey! ¡No me ignores!
Ichinose- Estoy agotada... -expresó cansancio, su respiración era agitada. Sumando el pánico, su condición le jugaba en contra- Tal-tal vez debería quedarme, es-esconderme... solo los retrasaré
Ichika- Tu sacrificio no será en vano, Ichinose-senpai. ¿Nos vamos? –acepto de inmediato y me brindo la mano
Kiyotaka- Cúbreme –pedí al ejercer fuerza para cargarla, no soy tan cruel como para abandonar a alguien que a futuro me pueda servir. La mentalidad de esta mujer y su evolutiva personalidad, me impulsan a salvarla- Usa bien todos los cartuchos que lleves, si queremos sobrevivir. Llegar al gimnasio podría ser la respuesta
