Arreglé un poco mi pelo dejando a la vista mi ojo el cual me forcé un poco para intentar ver por el, era inútil, el ojo era inútil, no lucia como tal, había aprendido un par de "trucos de magia" y cambiar mi aspecto era sencillo.

Pero el ojo seguía igual, completamente destrozado.

Todo era una ilusión.

Ya no dolía, el dolor se había vuelto tan frecuente que ya no se sentía.

Ahora sí di un paso lento y seguro mientras tarareaba una melodia, que no sabía de dónde salía, pero el ritmo me resultaba agradable.

Cuando llegué a la cocina, lugar en el cual parecía estar siempre el imbécil la melodía se mezcló con la de el Demonio Radio, al parecer ya sabía de dónde venía esa estúpida melodía que se me había pegado.

El pareció reírse algo burlón al verme, maldito bastardo.

Terminé de tararear para mirarlo de mala forma, el pareció no inmutarse.

~Hijo de puta...~ Murmuré de mala forma mientras me sentaba en la mesa de la cocina, al parecer se estaba haciendo costumbre todo esto ~ ¿Y la princesita?~ Le pregunté a el contrario con algo de desinterés.

- ¡Probablemente siga dormida! ¿usted durmió? ¡Supongo que no! ¿Gusta otro café? Al parecer esto ya se volverá una rutina diaria en usted- Habló con su típica voz que tanto me frustraba

~¿A que te refieres idiota?~ Pregunté puesto que al parecer no había captado el contexto de la conversación, normalmente tomar las pastillas de mierda me desconcentraba.

-Que usted venga aquí y yo le prepare café, terminamos adueñandonos de la cocina cariño, últimamente hablamos aqui-

~Nah, no exageres, solo ha pasado unas ¿5? ¿4 veces? más bien te uso como una cafetera personal~ Ví como su sonrisa se tensó un poco ¿Eso significaba que lo había molestado? Espero que si

Cuando me quise dar cuenta el ya se encontraba a escasos centímetros míos mientras unos ruidos algo molestos de estática se escuchaban.

~ Uhhhh cuánto miedo, alejate de mi rarito~ Murmuré con burla mientras me alejaba de el, no era por miedo, me molestaba el contacto físico y el cabrón estaba muy cerca.

-Tranquila cariño no muerdo- Murmuró burlándose de mi, hijo de puta.

~Yo soy la que te puede morder aquí~ Me acerqué a él mirándolo mal, el pareció alejarse un poco, a el tampoco le gustaba que interrumpieron su espacio personal eh.

Bufé para luego volver a sentarme encima de la mesa, el contrario me miró unos segundos y luego me sirvió el café

~Buen trabajo exclavo ~ Murmuré con una sonrisa mientras le daba un sorbo a el café.

-Tenga cuidado con lo que dice, podría terminar en más problemas de los que cree- Simplemente le levanté el dedo de el medio mientras seguía tomando el café - Eso no es apropiado para una dama-

~Ahhh que mal~ Murmuré con sarcasmo. ~ Eres un puto dolor de huevos Alastor ~

-Wow al fin aprendió mi nombre- Terminé de tomar mi café

~ Vete a la mierda ~ Me levanté de la mesa y salí de la cocina para luego subir las escaleras.

-¿No dará las gracias señorita Kunai?- Simplemente lo ignoré

~ Vete a la mierda ~

-¿Ya se le acabaron los insultos?
-... Si.

Bufé queriendo irme pero algo me detuvo a mi misma, si seguía yéndome en cuanto me enojaba no avanzaría una mierda.

𝑫𝒐𝒔 𝑶𝒗𝒆𝒓𝒍𝒐𝒓𝒅𝒔~| ᴀʟᴀsᴛᴏʀ X ᴛᴜWhere stories live. Discover now