Kookgi|| Santé

[31]

Yoongi subió su camisa y contempló su vientre en el espejo, hizo una mueca de disgusto, no le gustaba como se veía, ahora ya ni siquiera lograba contemplar la punta de sus pies, cabizbajo se subió a la cama y se arropó, sus ocho meses de embarazo ya le eran una total molestia, estaba más incomodo para dormir, agregando que se sentía con muchos altibajos.

Escuchó la puerta del cuarto abrirse, el omega se cubrió rápido y se hizo el dormido, se suponía que ya era tarde y a esas horas era tiempo de descansar. Jeon Jungkook se asomó y se sentó en la cama, contemplando las espalda ajena, se acercó y rozó su nariz con el cuello del hibrido, ofreciendo un casto beso. Yoongi se esremeció y se giró, no podía seguir fingiendo que dormía.

—¿Te desperté?—Jeon Jungkook acarició la mejilla de su amado.

—No...no puedo dormir, me cuesta dormir más estas noches—musitó el mayor y se sentó con cuidado. El sangre pura acomodó rápido unas almohadas tras la espalda de su prometido para que se recostara. Yoongi se dejó caer con suavidad—¿Ya terminó su trabajo?

—Si, vine a ver como te encontrabas—Jungkook rodeó sus manos alrededor de la cintura baja de Min Yoongi y ofreció un beso en los labios del hibrido. Yoongi se sonrojó y cuando sintió que el aferre era demasiado, se trató de liberar, el sangre pura soltó un suave quejido—. Porque tratas de alejarme.

El mayor bajó su mirada, notando una notable erección en los pantalones del vampiro, suspiró y apretó los labios, puso su mano sobre el pecho ajeno, nervioso se bajó de la cama y se dirigió a la ventana, alzó el rostro contemplando la luna llena que había esa noche.

—Duque...¿Acaso quiere tener sexo conmigo en estos momentos?—Jungkook se fue acercando a su prometido, lo abrazó desde atrás, poniendo sus manos en el vientre bajo y besó sobre el cuello blando—, pero...no puedo. No es que no quiera, es solo que y no estoy tan bonito, mi vientre se ve feo ¡Más mi ombligo, parece un botón salido!—chilló haciendo un puchero en el proceso.

—Pero que tonterias estás diciendo—Jeon Jungkook tomó de los hombros a Min Yoongi y lo giró con cuidado, alzó el rostro del híbrido, notando el ojo negro y luego el rojo—Sigues siendo precioso. Ven, te inspeccionaré.

—¿En estos momentos? pero...si ya estoy bien–comentó quejoso—¡Ya me rellenó!

El Sangre pura se sentó en la silla de la esquina de aquel cuarto, con su boca quitó su guante derecho y ya con su mano desnuda, le hizo un gesto al omega para que se acercara. Min Yoongi se acercó obediente, dando un largo suspiro para calmar sus nerviosismos. El menor se abrió de piernas y lo acercó a él, empezando a desabotonar la camisa ajena hasta que la dejó caer al suelo con suavidad. Jeon Jungkook pasó la yema de sus dedos por el pecho de Min Yoongi hasta bajar por el vientre y colocarla alrededor de la esquina de los pantalones, ofreció un casto beso sobre su parte baja y empezó a bajar la prenda inferior junto con la interior. Yoongi se cohibió un poco al sentir su piel erizarse por el frio que coló un poco por la ventana. El Duque ofreció una leve sonrisa y con disimulo mordió un poco sus labios, recorrió su mano desde el pecho de su amado hasta bajar a las caderas.

—Hace...un poco de frio—musitó Yoongi que se abrazó a si mismo.

—Terminaremos en un rato, girate—ordenó haciendo un circulo con su dedo indice.

Yoongi se giró sobre sus talones y cuando lo hizo, el sangre pura acomodó su semi-erección, agarró de la cintura a su prometido y lo sentó sobre él, el mayor dio un suave quejido cuando las manos del menor rodearon sobre su cintura, Jungkook empezó hacer un suave vaiven, presionando su miembro en el trasero ajeno, sintiendo su cuerpo muy caliente.

Jungkook alzó con una mano el cuerpo del omega y sacó de su protección su dura erección, cuando lo hizo, rozó su glande con la mejilla trasera derecha de Min Yoongi, el omega se estrmeció y arqueó su espalda, se recostó sobre el pecho del vampiro, empezando a respirar con agitación, Jungkook subió su mano, poniendo su mano desnuda sobre el pecho de Min Yoongi y apretó un poco parte de sus hinchados pechos, con su boca liberó su otro guante y lo tiró a un lado de aquel cuarto.