6

96 7 1
                                    

La posibilidad de hablar con Louis lo atormentaba. Desde la última vez que se vieron, el día en el que Harry tuvo que aprender a jugar fútbol prácticamente obligado, no podía sacar de su mente lo que le dijo el mayor. La manera en que lo miró con esos gran ojos azules, y se preocupó por él. Estaba interesado en escuchar lo que el rizado tenía para decir, y eso no era nada bueno. No ayudaba en nada a lo que el menor sentía.

Que alguien se preocupara por él, era como, el acontecimiento del año. Algo raro, que no sucede muy a menudo. Por eso tenía esa forma de sentir hacía él. Porque si, el chico era increíblemente atractivo, y lo suficientemente carismático como para hacer suspirar al resto, pero eso no fue lo que hizo que el rizado sintiera por él. Le atrajo físicamente desde el primer momento, pero ya no era solamente atracción. Era mucho más. Que sin conocerlo para nada, insistiera en qué le dijera que andaba mal y se preocupara por él fue realmente lindo. Algo que no todo el mundo hace. Algo que hizo que el corazón del ojiverde se derritiera.

Harry deseo volver el tiempo atrás, y no hacer ese estúpido trato con Lottie. Sin el, podría estar con el chico sin objeciones. Aunque, de todas formas, probablemente ni siquiera se hubieran conocido. Pero eso es mejor. Es mejor no conocer a alguien, a conocerlo y saber que nunca van a poder hacer nada al respecto. Su amor siempre sería platónico, frustrado.

Sus pensamientos se cortaron cuando sintió su teléfono vibrar a su lado. Pudo leer que era Lottie.

"Tenemos una fiesta esta noche", acentuando fuertemente con un pequeño grito en la palabra 'fiesta'.

"¿Qué?", preguntó. Era jueves, no un día de fiesta.

"Lo que escuchaste. En la casa de Chelsea."

Bajó a la cocina a servirse un vaso de jugo de naranja. Con pulpa. Su favorito.

Harry frunció el seño dando un largo trago a su vaso antes de contestar. "No sabía que eras amiga de Chelsea. Es como de las más populares."

Lottie pegó un grito en acusasion. "¿Insinuas que no puedo ser amiga de alguien popular?", sonando ofendida.

"No, no es eso. Es solo que creí que no era tu estilo."

"Pues tienes razón, no lo es," rió. "Paige escuchó de la fiesta y se lo contó a Norah, Norah se lo contó a Robby, quien se lo dijo a Lila, porque ya sabes que están en un rooomance..", riendo, alargando la 'o' con tono burlón. ".. Lila se lo contó a Julia, quien finalmente me lo dijo a mí."

Se escuchó silencio a través de la línea. "Creo que me perdí en Norah."

"¡Harry!", exclamó la rubia. "Es muy fácil."

"No, no lo es. Nombraste como 10 personas, Lotts." explicó Harry. La situación era ciertamente graciosa para él. "Es imposible seguir la cuenta."

Se oyó un largo suspiro de frustración del otro lado de la línea. "Nombre a 5, de hecho. Deberías ser más atento. Bueno, no importa. Lo que si importa es que hoy hay una fiesta, e iremos. No me interesa si no quieres. Tenemos que salir, socializar un poco más. A ninguno de los dos nos hará daño tener más amigos."

El rizado giró los ojos. "Bien. Iremos."

"¡Sí!", festejo la chica. Grito con emoción, para quedar en silencio. "¿Cómo te fue con mí hermano la semana pasada? Olvidé preguntarte."

"Normal, supongo. No lo sé." bajó la cabeza para observar su vaso de jugo. La pulpa se asentaba en el fondo de este.

"¿Seguro? Traté de preguntarle a Lou, pero él estaba raro."

Harry levantó la vista inmediatamente de su vaso. "¿Raro cómo?"

"No lo sé, se veía como...", hizo una pausa buscando la palabra correcta. "¿Triste? creo."

Into you - < l.s >Wo Geschichten leben. Entdecke jetzt