Tamal De Dulce °memo Ochoa X Lionel Messi °

CATORCE

Dedicado a Glc____

Cuando menos te lo esperas el tiempo arrasa con todo.

La gente cambia.

Las cosas cambian.

Tres habían pasado, ¿O eran más?

En las orillas de Querétaro, en una grande casa, un joven de apenas 18 años empacaba todo los necesario en una maleta pequeña, había esperado tres años para poder ser un mayor de edad y salir de aquella casa.

No era su casa, no la consideraba su hogar.

Su padre aún estaba trabajando, así que decidió salir lo más rápido posible, le era un poco difícil debido a al llanto que tenía acumulado, por la mañana, cuando su padre se había ido, Diego había entrado a la oficina de este buscando sus papeles para tramitar su credencial de elector.

Por una terrible casualidad.

Encontró una carta, que tenía el nombre de su hermano, estaba abierta y el contenido lo dejo sin aliento.

Desde que se lo llevaron, desde la última vez que lo vio en el juicio, pensó que Guillermo lo había dejado, como su madre.

Pero la carta le explicaba todo, tenía fecha de hace tres años, la perfecta caligrafía de memo le removió el estómago y lo único que se repetía en su mente era, España, estudiar y volver.

¿Memo se fue?

Veía que si.

Su padre le había ocultado la carta, así que no se pudo resistir, tomo todo lo indispensable, había llamado desde un teléfono público oara reservar un viaje a la ciudad, solo eran cuatro horas en el camino.

Cuando eran las cinco de la tarde, salió de la casa y tomo un taxi hacia la terminal, ni siquiera volteo hacia atrás, todo lo que había vivido ahí se iría tan pronto como llego.

También había tomado el suficiente dinero para quedarse por unos días en un hotel.

Sabía que cuando su padre llegará lo buscaría hasta morir, pero esperaba que no pudiera encontrarlo, y si llegaba hacerlo, el tendría una vida hecha.

La terminal estaba casi vacía, su maleta estaba aún lado de el, una mochila también lo acompañaba, a su teléfono le había quitado el chip y lo había tirado por ahí.

Solamente saco el número de Kevin, esperaba que no lo hubiese cambiado.

Un camión se estacionó y llamo a los que pasajeros que iban a la ciudad, Diego se levantó y dejo su maleta y mochila en la parte maletera del camión, subió al camión entregando el dinero de su pasaje y se sentó hasta los últimos asientos, suspiro algo nervioso.

Esperaba poder encontrar a alguien conocido cerca de su casa, que le explicará que demonios paso.

Durante todo el camino hacia la ciudad no dejo de pensar en Guillermo, aún se sentía mal porque se hubiese ido, sabía que no era su culpa no poder avisarle, puesto que ni el sabía dónde viviría después del juicio.

Extrañaba a memo.

Durante los tres años en aquel lugar no hizo más que llorar por las noches, porque no estaba memo abrigandole, dándole un desayuno con amor, recordándole que lo quería.

Odio a su padre, o más bien, lo odia.

Porque se encargo de hacerlo miserable durante tres años.

Tratando de despejarse, recargo su cabeza en el respaldo del asiento y cerro los ojos, entonces el sueño le ganó, quedándose dormido, su respiración tranquila y algo entrecortada dió aviso del anterior llanto.