TRECE

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El despertador sonó a las cuatro de la mañana.

Guillermo y sus amigos se levantaron cuánto antes, Paula la mando a asearse y después bajar sus maletas al auto, sus amigos le estaban preparando un desayuno pequeño para que mientras salía su vuelo comiera algo.

A su casa habían llegado Lionel y sus padres.

La madre de Lionel le había traído un Topper con un postre que no reconoció pero le gustó demasiado, los abrazo.

Cuando faltaban cinco minutos para las seis, después de dos horas arreglando los papeles de compra venta que tenía listos para su casa, subió a su habitación para sacar un sobre blanco sellado con mucha cinta adhesiva, tenía la dirección de la escuela de Diego y la carta era para el, esperaba que pudiera recibirla.

Un tema que le dolió fue, nuevamente, vender su casa, después de discutirlo con sus amigos y visitar la tumba de su abuela, decidió dejar atrás el recuerdo de su madre.

Por aún así supiera la verdad le dolía su abandono.

La casa sería adquirida por la abuela de Paula, por si llegaba de repente Diego o memo, la mujer mayor había insistido en comprarla a un precio razonable, prometiendo guardar sus cosas que el dejara.

La camioneta de memo ya estaba cargada y lista para partir, Kevin lo había llevado a ver a su abuela, la mujer le lloro hasta que su nieto la calmo, le dió algo de dinero a Guillermo enredado entre una bufanda, tal vez no se daría cuenta hasta llegar a su destino y desempacar, pero le serviria de mucho en España.

A las seis con quince partieron al aeropuerto, Lionel viajo en la camioneta con sus padres y a parte memo con sus amigos en la suya, la música sonaba casi a todo volumen, con memo, Kevin, Paula e Hirving cantando a todo pulmón, Javier y Cristiano se habían quedado dormidos, Andrés manejaba mientras sonreía.

Aquellos momentos tan simples se volvían buenos con la compañía de sus amigos, estaba claro que extrañaría mucho a Guillermo, lo conocía desde que eran niños, fueron compañeros en travesuras, cómplices en sus problemas emocionales, se apoyaron tanto que se querían como si fueran hermanos de sangre.

Esperaba que la estadía de Guillermo en España fuera buena y lo tratarán cómo merecía, puesto que el de cabellos rizados se merecía lo mejor.

Eran las siete de la mañana cuando llegaron al aeropuerto.

Una bolita de chicos y dos adultos estaban en el aeropuerto, los padres de Lionel quería despedirse de Guillermo antes de que se fuera, recordándole que las puertas de su casa estarán abiertas cuando quisiera regresar.

Los amigos de memo lo habían abrazado sin poder aguantar las lágrimas, Guillermo tampoco pudo con sus propios llanto, llorando abrazado a sus amigos.

Lionel habia quedado al final.

Pronto memo tendría que abordar el vuelo y no quería irse sin antes despedirse.

Se abrazaron con cuidado, Lionel quiso llorar.

—Te voy a extrañar mucho Lio—memo se separó del abrazo para dejarle un besito en sus labios—Por favor no me olvides—

—¿Cómo podrías olvidarte?—lionel enterró si rostro en el pecho del más alto, unas lágrimas traicioneras bajaron por si rostro y suspiro entrecortado—¿Volveré a verte?—

La pregunta sonó más como una suplica, Guillermo sintió su corazón apretarse, levantó el rostro de Lionel con sus manos, sus ojos se encontraron, parecía que se decían todo con la mirada.

—Lo harás, volveré—guillermo dejo un besito en sus labios—Te prometo que lo haré, y cuando el día llegue, podremos vivir felices—

Lionel no aguanto más, un jadeo triste salió de entre sus labios y junto sus rostros para regalarse un beso, esperaba que aquel fuera suficiente para esperar a darse otro en un futuro.

Guillermo se dejó hacer, cerró sus ojos, disfruto el contacto y extendió más el beso, no quería que se acabará, no quería irse.

Pero estudiar era una oportunidad perfecta, alejarse de los problemas lo mantendría tranquilo.

Y cuando volviera, Diego ya estaría con el, alejado de su padre y viviendo en una casa más grande, junto a Lionel y a Diego.

Los altavoces anunciaron el abordo de los pasajeros, Guillermo abrazo muy fuerte a sus amigos, a los padres de Lionel y a este.

—¡Cuídate mucho memo!—grito Hirving sacudiendo su mano en una despedida, Guillermo solo asintio y camino para abordar el avión, entregando su boleto y sellando su pasaporte.

El pasillo que lo conducio al avion se le hizo eterno, sus manos le sudaban y no dejaba de temblar, a pesar de que el clima no era frío, el no dejaba de temblar, tanto así que tuvo que ponerse una chamarra calientita.

Cuando por fin entro al avion, busco su asiento, que afortunadamente estaba a lado de la ventana, nervioso se puso el cinturón y acaricio sus cabellos, miro hacia afuera, ya no podía ver a sus amigos y eso lo lleno de tristeza.

Era increíble como en poco tiempo conoció el amor, vivió feliz por un tiempo y después paso lo de Diego.

Muchas emociones le hubieran causado un infarto si no fuera tan cuidadoso con su salud.

Pero todo estaría bien.

Estudiaría, trabajaría un año en España y después regresaría a México.

Buscaría a Diego, le pediría perdón por irse.

Después buscaría a sus amigos, para que le abrazaran con tanto cariño.

Después buscaría a Lionel, le llenaría el rostro de besos, tendrían una cita, tal vez dos, se la pasarían todo el tiempo juntos y harían esas cosas tan obscenas que el argentino le susurró al oído.

Por último iría a la tumba de su abuela y madre.

A su abuela le regalaría unas flores, le agradecería lo mucho que hizo por el y Diego.

A su madre solo le desearía un descanso eterno y tranquilo.

Que más daba ya.

Sabía que las cosas mejorarían.

El avión dios aviso de la partida, Guillermo miro por última vez hacia afuera y suspiro, cerro los ojos con fuerza.

—Tranquilo memo, todo saldrá bien—susurro mientras apretaba los descansa brazos—Estare bien, todo estará bien—

Y entonces salió el vuelo.

Los amigos de memo y lionel vieron como el avión marchaba.

Todos decidieron regresar a casa, pronto los amigos de Guillermo tendrán que regresar a sus vidas normales, Lionel también tenía que hacer su vida como siempre.

Sin memo.

Pero el prometió regresar.

Y el le creía.








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Pronto acabará esto.

Pronto acabará esto

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Tamal De Dulce            °memo Ochoa X Lionel Messi °Where stories live. Discover now