Recuerda el hecho de abandonar su país natal por un desamor.
Recuerda haber rogado porque le mandaran a Corea
Recuerda sus manos, sus palabras
Que ironía de la vida, abandono su hogar por un amor y ahora vuelve para escapar de otra desilusión
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
Sus cambios de humor disminuyeron constantemente, el piano era una buena manera de verter sus emociones y nunca faltaba los halagos de sus compañeras al escucharla tocar varias melodías, en tan solo 3 meses aprendió a leer correctamente las partituras, aunque algunas eran un poco difíciles.
.
.
.
- Señorita ¿le gusta tocar el piano? - JinZhu la interrumpió
- Si, es maravilloso - 'pero ahora no se si pueda volver a tocarlo'
- Continúe por favor
- Como les decía...
.
.
.
Aun no sacaba de mi mente el hecho de no ver a XiChen, pareciera que esquivaba cada cosa que realizaba por ella, faltaba un poco para celebrar su cumpleaños, debía de preparar alguna canción para ese día, iba a impresionarlo. Pensando no se dio cuenta que chocó con alguien, mojándolo con su jugo de naranja, bueno el solo no se mojó, ella también se manchó la blusa
- Ay disculpe - intento sacar el pañuelo de su bolsillo, pero la otra persona fue más rápida y comenzó a secar su blusa, aunque había una gran mancha anaranjada
- No se preocupe señorita Jiang - 'esa voz...' , visualizo bien a la persona que manchó, era Jin GuangYao, uno de los amigos de su prometido
- ¡A-Yao! - XiChen apareció, pero no para ayudarla sino que sostuvo al joven más bajito - ¿Estás bien? Tu blusa... - la mirada angustiada de su prometido, clavó una astilla más en su corazón
- Er-ge estoy bien, pero... - el Jin la miró, un poco apenado - tu prometida - ni bien terminó de decir la palabra, XiChen me miró, pero no era una mirada preocupada, sino una de fastidio, como si yo fuera algo malo
- Señorita Jiang, vaya a cambiarse de blusa, es vulgar que una señorita esté en esas condiciones
- Si, discúlpenme - estaba roja de la vergüenza, pero no me iba a dejar caer la cara de esa manera - también es vulgar que alguien comprometido abrace de esa manera a otra manera, mas si es un doncel - las voces de los alumnos que habían visto la escena estaban divididas, algunas a su favor, otras con XiChen, aun así no detuvo su avanzar.
El chisme fue como pólvora esparcida en campo de batalla, no hubiera pasado a mayores actos si no hubiera llegado a oídos del director Lan QiRen, quien enfurecido llamó a su sobrino mayor, sin importarle sacarlo del aula en la clase de economía. Pero no fue el único, poco después llamaron a Jiang Cheng la cual se encontraba con su traje de educación física.
- Ambos saben porqué están aquí - los dos ni se miraban, había cólera en la postura de la dama Jiang - les pido que hablen lo que verdaderamente pasó - Jiang Cheng iba a decir lo que pasó, pero el Lan le ganó
