The First One- Sammy Wilkinson

Capítulo 3

-¿A quién necesito matar?

-¿Recuerdas a ese par de nuevos?-pregunté- Sammy cree que debo dejar de hacer tanto drama y permitir que Leila haga su vida. Me refiero a que es mi mejor amiga, no puedo dejarla ir así de simple

-Si estoy de acuerdo con ese chico me matarás. Déjalo pasar, tal vez Leila entró en la fase ciega del amor, dentro de unas semanas se olvidará de cuanto ama a su novio y las cosas serán iguales

-Pero...

-Pero yo creo que necesitas un novio

-¿Por qué todos dicen lo mismo?- me quejé

-Por que detestas estar sola, la mayoría de tus amigos lo tienen así que tu lo necesitas-. Después de hablar por casi 2 horas, envié un mensaje de texto a Leila pidiéndole disculpas de nuevo, no contestaba así que decidí llamar.

-Jourdan, es media noche- se quejó

-No lo estuviera haciendo si contestarás mis mensajes que llevo enviándote

-Lo lamento, no he visto mi celular desde la tarde

-Sólo quería disculparme- confesé

-Eres mi mejor amiga, sabes que soy un poco celosa hasta para eso. Creí que estabas enojada conmigo y por eso habías conseguido a otra chica

-Tu también eres mi mejor amiga, primero con Nate y su primo, luego con Aaron creo que debo de darte tu espacio

-Como lo dijo Sammy- se burló -Oh okay lo siento

-Es nuestro último año Leila después no sé qué pasará con nosotras

-Ya se, pero quiero pasar tanto tiempo contigo como con Aaron

-Lo digo en serio, si quieres pasar más tiempo con tu novio lo entiendo

-Oh no caeré en tu trampa- reí- sólo quiero que las cosas sean como antes. Olvidemos que los nuevos llegaron y que Aaron pasa tiempo con nosotras. Sólo con una condición

-¿Y esa es?

-Aceptaras a Nate y a Sammy y no te enojarás por que salga con Aaron. Así como te dejaré hacer tu vida sin importar con quién salgas

-Trato hecho

La ultima clase que tuve fue Física, normalmente en estas me quedaba dormida o no ponía atención por el clima pero esta vez fue diferente ya que alguien detrás de mi comenzó a lanzar papelitos hacia donde estaba mi lugar. Giré y me sorprendí al ver que era Sammy no habíamos tomado ninguna clase juntos y no tenía idea de qué estaba haciendo ahí.

-¿Podrías dejar de molestarme?- susurré

-Que aburrida- me volteé pero un nuevo pedazo de papel cayó a mi banca, al abrirlo pude leer un "lo siento"

-¡Sammy!- espeté y él me guiñó un ojo

-¡Jourdan!- me imitó, le lancé un bolígrafo y soltó un quejido.

-Supongo que esto es tuyo- dijo en la salida mostrándome la pluma, la tomé y me dirigí por el camino a tomar mi casa -Jourdan- gritó detrás de mí, aceleré mi paso pero el ya estaba caminando junto a mi -Aún no me has respondido

-¿Sobre qué?

-¿Me disculparás?

-Por qué lo haría- pregunté, estaba siendo un poco cruel pero verlo así me divertía

-Por que eres una gran persona, y confío que me perdones. Vamos Jourdan, no quiero estar peleado contigo por todo el ciclo escolar, no lo sé tal vez podamos ser amigos

-¿Amigos?- me reí y seguí caminando

-Al menos podrías intentarlo

-Eso no es lo mío- giré en torno a la calle que daba con mi casa

-O podrías intentar no odiarme

-No te odio

-¿Entonces eso da una oportunidad?

-No- caminé un poco más rápido-¡Oh esta es mi casa!- dije a unos pocos metros de ella

-¿Puedo entrar?- preguntó sonriente

-Por supuesto que no, ¿acaso no te han dicho que no dejes entrar extraños a tu casa?

-No soy un extraño

-Da igual, no te dejaré entrar

-Esta bien- se colocó frente a mí obstruyendo la entrada -No me iré

-¿Qué te pasa?- espeté- Es mi casa y puedo entrar cuando quiera

-¿Me disculparás?

-No

-Entonces no me iré- se cruzó de brazos y descansó su espalda sobre la puerta, lo miré con el ceño fruncido y exhale.

-¿Si digo que si, te irás?- dije finalmente

-Supongo

-Te odio