En El Fondo De Las Cicatrices (Borrador)

Capitulo II

Daemon

Como se supone que se sobrevive en lugar que odias, y sobre todo como lo haces cuando ni siquiera puedes salir de este infierno, trabajar mas de dieciséis horas al dia para tener un plato de comida, era algo relamente duro, pero lo hacía por Jess por que no queria que me separen de mi hermana.

Al ser solo nosotros dos el consejo del pueblo, nos tomaba debiles y deficientes, solo mis dos trabajos al dia me permitía tener una poca estabilidad económica.

Despues de todo el dinero se requieren en todo lado.

Estaba en la bodega de Jhos la única tienda de suministros del pueblo, ordenaba la mercancía llegada.

-Ven esta noche a cenar, con Jess.

La voz de Jhos resonó en la pequeña vodega trasera de la tienda. Mi mirada se dirigió hacia la puerta, él se encontraba recargado en ella.
Jhos era alto incluso un poco mas alto que yo, rubio y demasiado palido, su cabello se veia oscurecido por la poca luz que había dentro.

-No puedo- dije -Tengo turno en el club.

Hizo una mueca.

- Sabes que mi oferta de ayudarte sigue en pie ¿verdad?

Con esa palabras sentí amargura total. Moví mi cabeza en señal de negación.

-No necesito mas ayuda de la que ya me ofreces Jhos.

Mi mirada volvio a los paquetes cellados y volví hacer mi trabajo.

Oí suspirar a Jhos atras de mi.

-Dile a Jess que venga.

Y salió de la habitación.

Sonreí con amargura. Lo hacia por Jess.

Le envié un mensaje rápido a Jess con la petición de Jhos. No supe si respondió, guardé mi teléfono sin echarle un vistazo más.

✨

Cuando salí de la tienda fui directo al club, un lugar donde trabajando limpiando, la paga era poca pero servia para algo.

En el pequeño cuarto que soliamos dejar nuestras pertenencias me encontre a Cold el bartender, es un Yumik, son seres similares a los humanos como nosotros los hombre lobos, su naturaleza era tranquila pero cuando se enfadaban podian noquiar a cualquiera de un solo golpe y su cuerpo se tornaba totalmente de rojo. Había visto enfadado a Cold un centellar de veces pero en general siempre tenia una actitud pasiva.

-Listo para la noche- dijo burlón

-Perefiero limpiar meados, a que me coquetéen asqueroses chupa sangres- contesté. Cold era sin duda un seducidor natural- pero a ti te encanta.

Solto una carcagada

-Son delicioso.

Me rei suavemente

La música resonaba fuertemente tanto que mis sentidos se sentían desorientados, no entendia por que habia muchas criaturas que les gutaba el ruido. La música y el baile no estaba mal, pero el ruido era terrible, me emborrachaba y nublaba mi mente. Menos mal que contaba con mis tapones de oidos especiales.

Mi turno termino mas rapido de lo que creí. Fui directo a mi hogar. Me sorprendio ver las luces de las casa de alado con una luz en la paste posteriror de la casa. Heche una rápida mirada pues ya era muy entrada la noche. Aparque mi pequeña moto alado de mi cochera. Levante mi vista hacia la parte posterior de la casa y vi una silueta supuse era una chica por su largo cabello.

Vecinos nuevos, era muy raro que mas criaturas se muedaran a ese asqueroso pueblo, si yo fuera ellos quiesiera salir de aqui, no entrar.

Cuando entre Jess me recibió como siempre con un gran abrazo. Amaba a mi hermana y daría lo que fuera por ella.

-Llegaste- soltó con su voz estusiasmada. siempre me daba placer sonreírle cálidamente cosa que no hacía con nadie mas.

- Disculpa la demora - puse mi mano en la corona de su cabeza.

-Tengo la comida lista- me empezó a guiar a la cocina como si no la conociera.

Nos sentamos a comer, la poco comida que traía a casa Jess se encargaba de hacerla exquisita ella es una experta en la cocina.

- Se han mudado a lado.

-Si me di cuenta.

-Los vi por la ventana. Son una pareja y una chica creo que es de mi edad aunque se veía pequeña- lo dijo muy seriamente-son lobos.

Me asombre los lobos por lo general viven en manada, solo Jess y yo eramos los excepción.

- Talvez pertenezcan a alguna manada.

-No lo creo sus rasgos no son de ninguna manada que haya visto por aquí.

-Entonces estan locos al pensar en vivir en este pueblo.

-La chica..... tenía una gran sonrisa en el rostro. Se veía tan feliz.

No me miraba. Solía hacer eso cuando se sentía triste. Sabía que ella quería sonreír así. Como aquella chica. Aprete mis pueños por la impotencia que sentí.

-Jess.... - dije su nombre con un tono de advertencia.

-Lo se Daemon. Se que no nos quiere, pero ella puede ser diferen...

Suspire interrumpiendola

-Solo ten cuidado si.

Sabia lo que Jess quería. Una amiga. Tenía miedo de que la lastimaran, jamás seria capaz de quedarme sin hacer algo si algo le sucedía, pero entendía que es su decisión con quién decidiera juntarse.

Ansíaba con todas mis fuerzas salir de este asqueroso lugar, ir a explorar el mundo vivir como los humano lo hacían, sin preocupación, sin que te odien por errores que no cometiste. Mi promesa era esa, sacar sacar a Jess de este infierno.