Obsesion asesina

19. Patito.

Sentí un dolor agudo atravesandome el pecho, resquebrajando en mil pedazos mi interior. Me arrodille en el suelo con la respiración entrecortada, notando un dolor parecido al de miles de agujas atravesando mis pulmones por cada inspiración. Se sentía como aquella vez.

Me levanté como pude con los ojos nublados, teniendo que usar mis manos para asegurar el camino. No tarde en llegar a las escaleras, lo que me permitió ver a la mujer bajita de antes y a la rubia siendo retenidas por Ben y Jack. Ya que estas intentaban salir de la cabaña.

-B...Ben, ¿que está pasando? -logré balbucear por lo bajo.

Aún así tuvo que oirme ya que me respondió al instante.

-¡Slederman se ha vuelto loco de repente!¡Parece ser que tenemos visitas inesperadas! -gritó.

-Y no deseadas -finalizó Jack.

Tardé unos segundos de más en entender la situación debido a mi situación, pero al comprenderlo salte del sitio bajando de un salto al piso inferior. Para seguidamente salir por la puerta a toda prisa.

-¡Ten cuidado! -gritaron ambos a mis espaldas siendo seguidos por las quejas de parte de la chica rubia que no entendía nada.

-¡Se cuidadosa patito! -soltó de pronto la teñida, consiguiendo que sonriera por lo bajo.

Corrí lo más rápido que pude por el espesor del bosque hasta llegar a una zona incendiada. En ese momento recordé a Jeff y Ali, lo que me infundió temor. ¿Estaría mi hermanita mayor bien? ¿O tal vez habría sido víctima de él? Esta idea hizo que acelerara el paso hasta llegar a una torre en lo alto de una de las colinas.

Me pare para recuperar el aliento cuando me di cuenta de que la puerta se hallaba abierta. Por curiosidad a pesar de que mi mente me gritaba una y otra vez que no me acercara, que diera media vuelta y huyera de aquel lugar lo más lejos que pudiera. Pero todo pensamiento fue interrumpido al oír un grito a la vez que una figura salía del torreón.

-¿Toby? -dije confundida al verle con la ropa quemada y repleta de sangre.

-¿Sally? -su voz sonaba sorprendida, pero extrañamente note que a la vez parecía aliviada- Lo mejor será que salgamos de aquí, Slederman esta cabreado... o algo así.

-¿Están los demás adentro?

-Sí, están todos: Hoodie, Slederman, Liu...

-¿Y Jeffrey y Alice? -le corté desesperada. Si ella estuviera adentro...

-¿Qué? -ladeo la cabeza inquisitivo- ¿No estaban en la cabaña con los demás?

-No -negué con la cabeza a la vez que hablaba- Salieron antes de que todo esto comenzara... Jeff dijo que quería hablar con ella.

Su silencio y repentina rigidez fueron el primer aviso de que algo iba mal, muy mal. Y no me refería únicamente al Slederman medio furioso, al incendio y a aquello que tenia en ese estado a Slendy. Había algo más que no cuadraba, y este algo tenía nombre y apellidos.

-¿Crees que Jeff ha podido...? Ya sabes... ¿perder la cordura otra vez? -pregunte con la garganta reseca y con un nudo demasiado grande recién formado.

En momentos como esos odiaba que fuéramos como éramos y que por ellos nos ocurriera eso una y otra vez.

-Mejor vayamos a comprobarlo -respondió tajante en un tono demasiado duro para su persona. Eso me preocupo aun más e hizo que saliera corriendo en su búsqueda, ignorando sus continuos gritos y súplicas para que me detuviera.

Corrí y corrí hasta llegar a la linde del bosque, donde exhausta me deje caer. Preparándome para volver a mi carrera contra-reloj.

Hasta que me di cuenta de la sangre a mis pies.

Atemorizada seguí el río de sangre gateando. Cuando un grito desgarrador cortó el silencio como si de un cuchillo se tratase.

Reconocí la voz.

Alice.

Esto me dio el valor para ponerme en pie y correr hasta el lugar del que provenía. Parandome en seco ante la escena. Posando mis manos sobre mi boca para silenciar un sollozo.

Alice se encontraba tirada en suelo, sobre un charco de sangre que brotaba de una larga herida de arma blanca en el costado. A su lado, Jeff se mantenía en pie sosteniendo en su mano su inconfundible cuchillo. Cubierto de sangre.

No tardó en darse cuenta de mi llegada, girandose sin prisa hasta quedar frente a mi. Mirandome con sus ojos inyectados en sangre, completamente ido. Completamente furioso.

Sólo alcance a gritar cuando se lanzó hacia mi.

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Y como hacia tiempo que no subía y soy tan cariñosa os dejo con la intriga de que esta pasando XD. Se puede decir que en este capítulo me he asombrado hasta a mi misma, liandola como la he liado. ¿Vosotros que pensais que va a pasar? Porque ni yo estoy muy segura...

Muchos muakis muakis mis adorables patitos pingüineros.