Rosas Rojas [Jaden Walton]

010

GREECE LINN

—¿Ya te pusiste a pensar quien puede ser? —Pregunto una vez más Ashley sobre ese tema.

—No.

—¿Entonces que haremos? —Cuestionó ahora abriendo su taquilla. Pensé un momento.

Yo no la iba a abrir, no hoy. Primero quería asegurarme si tal vez hoy día podía descubrirlo.

—Greece reacciona, tienes que agarrar tus libros de ciencia. —Río mi mejor amiga. Maldición.

Otro día será.

🌹🌹

—Está vez café frío para ti. —La señora Roció me entregó uno café late con hielos.

—Yo también quiero que me reserve los cafés, ¿cuánto le pago? —Lloriqueo Ashley con un leve puchero.

Reí levemente ante tal acción.

—Nada cariño, solo me lo tienes que pedir. —Ella acarició su mejilla.

Nos despedimos de la señora roció y nos volteamos dispuestas a encontrar una mesa libre pero se nos iba a hacer algo imposible, había demasiada gente para ser una martes.

—Ven, acá hay una mesa libre. —Aviso Ashley. Al parecer había encontrado una mesa pero estaba del otro lado de la cafetería.

Quise reprochar pero fue muy tarde, ella ya me estaba jalando hacia esta.

Pasaba por las mesas de todos literalmente todos los alumnos de este high school pero solo una acabo llamando mi atención.

La mesa donde se encontraba él junto a todos sus amigos. Él reía fugazmente con Javon. A mi parecer congeniaba muy bien con ellos, ellos tenían que ser los de su equipo de baseball.

Las dudas mentales desaparecieron cuando vi a mi primo Mike entre ellos.

Al pasar a un costado de su mesa, su mirada cayó en mi. No lo volví a ver desde esa noche que cené en su casa con su familia, sin duda había sido una de las mejores cenas.

Cuando nuestras miradas se cruzaron no puedo negar que sentí una sensación bastante extraña ni yo sé dónde, pero la sentí.

Pasé a un lado suyo y agité mi mano para saludarlo con una de mis mejores sonrisas.

Seguí mi camino hasta la mesa, podía sentir como su mirada seguía en mi o más bien sus miradas seguían en mi. Otra sensación rara.

—¡Greece, Greece espera! —Una mano agarró mí ante-brazo haciéndome frenar por completo.

—Te espero en la mesa amiga. —Murmuró Ashley en mi oído, de nada había servido, él seguramente lo había escuchado.