014

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Cuando Jungkook aparcó frente a la veterinaria, vio a Taehyung sentado en la acera con un pequeño cachorro en sus brazos y se sintió feliz de saber que el castaño estaba bien.

Le envió un mensaje avisandole que ya estaba ahí, Taehyung rápidamente se levantó y se subió al auto en el asiento del copiloto.

— Lo siento— Taehyung es el primero en hablar— No quería preocuparte, pero te aseguro que estoy muy bien, no me pasó nada malo.

— Está bien, hyung— dice Jungkook mientras pone el auto en marcha— Mejor cuéntame que pasó, ¿de quién es ese carrocho?

— Lo encontré cuando salía de la estación del tren, estaba en una caja llorando y obviamente no podía dejarlo ahí, así que lo llevé al veterinario más cercano que encontré— empezó— Mi teléfono se descargó y tuve que preguntarle a uno de los trabajadores si tenía un cargador que me prestará, por suerte alguien me dio el suyo y pude cargar el teléfono un poco.

— Yo preocupado por ti y tú salvando vidas— bromeó Jungkook, sintiéndose más alivió ahora que sabía que Taehyung estaba bien.

— Ya dije que lo siento.

— Eso ya no importa, lo bueno es que estás bien.

— El cachorro también está bien.

— ¿Te lo quedarás?— pregunta Jungkook, dándole una rápida mirada al castaño.

— No lo sé, ya tengo a Yeontan y no creo que a él le guste tener un hermano.

— ¿Entonces que harás?

— Puedo quedármelo unos días mientras busco a una persona responsable que lo quiera adoptar.

— Le preguntaré a mis amigos, tal vez alguno lo quiere.

— Te lo agradecería mucho.

El resto del viaje fue tranquilo, hablaron sobre cualquier cosa y bromearon un poco entre ellos. Ambos se sentían bien con la presencia del otro, la confianza entre ellos cada vez aumentaba más y lo sentimientos no se quedaban atrás.

Taehyung se reía a carcajadas por la anécdota que le estaba contando Jungkook de cuando era un niño y su papá lo hizo correr desnudo todo una cuadra porque no quería vestirse.

— No te rías, esa fue la peor vergüenza de mi vida y solo tenía seis años.

— Me imagino a un mini Jungkook corriendo desnudo, se ve tan gracioso en mi cabeza

— Todo es risa hasta que eres tú el que está en esa situación.

— Pues que suerte que a mi no me pasó.

Jungkook nego con la cabeza, entro al complejo de apartamentos ya aparcó frente al edificio en donde estaba el de Taehyung.

— Gracias por ir a buscarme y traerme.

— No es nada, hyung.

— ¿Quieres pasar?

— No, ya es algo tarde y tú debes estar cansado— miro a Taehyung y luego al cachorro que estaba dormido en el regazo de este— Esté bebé también está cansado.

— Espero que Yeontan no haga escándalo.

— No lo creo, pero esperemos que no.

— Nos vemos mañana, adiós Jungkook— dijo Taehyung, desabrochando el cinturón de seguridad y bajando del carro.

— Adiós, hyung— se despidió con la mano— No olvides de llamar a Seokjin hyung, él pobre estaba muy preocupado.

— Seguro me va a regañar.

— Lo más probable— río— Ve, me quedaré aquí hasta que entres.

— Okay, conduce con cuidado y me avisas cuando llegues.

— Lo haré, no te preocupes.

— Perfecto.

Taehyung de mordió el labio nervioso y se dio la vuelta entrando al edificio, saludó al guardia de seguridad y se dio prisa en llegar al ascensor.

Una vez entró a su apartamento pudo respirar tranquilo, dejó al cachorro en el sofá mientras el iba a su cuarto encontrando a Yeontan durmiendo en su cama, se acercó a él despacio y le dio un beso en la cabeza. Busco su cargador con la mirada encontrandolo en el piso a un lado de su espejo, lo tomó y se fue de nuevo a la sala.

Dejo su teléfono cargando mientras iba a la cocina por un vaso con agua y buscar algo para comer, tomo dos sándwiches de huevo que le había regalado Jimin el día anterior y fue de nuevo a la sala.

Tomó su teléfono encontrándose con llamadas pérdidas de su hermano, sus amigos, Jungkook y Namjoon. Fue directo a la aplicación de mensajes para avisarle a su hermano que lo iba a llamar, encontrándose con un mensaje nuevo de Jungkook.

Jungkook the prettiest:

Acabo de llegar a mi casa y estoy bien.
Buenas noches, hyung. 

...

Gracias por leer.

- Waan.

Guardaespaldas | Au Taekook Donde viven las historias. Descúbrelo ahora