Leucemia [Sillie] [TERMINADA]

19.

Días después de su última quimioterapia

—Te quiero –Susurra Sadie acariciando la muñeca de Millie, ella estaba en cama de hospital todavía (por los obvios tratamientos)

—Yo también –Ella suspira profundamente al ver cómo Sadie le da un pequeño beso en el dorso de su mano– Tengo que irme, Lo sabes

—Lo sé

Sadie asiente con pesar, la iban a trasladar a un hospital de NY por cuidados intensivos, lo peor de todo era que se iría por cuatro meses

Unas pequeñas lágrimas salen de sus ojos al pensar lo difícil que sería estar sin Millie, cuando ella lo nota, lleva su mano a la mejilla de la chica y limpia las lágrimas de ella

La pelirroja voltea a verla, sollozando

—Hey, Hey no llores. No tienes por qué llorar, volveré –Sadie asiente tratando de formar una sonrisa, Millie agarra su cara y la atrae para un largo beso– Estaré bien, y más cuando me veas con una linda melena –Ambas rien

—Nunca me importó eso –Ella acaricia su cabeza por encima de la lana de su gorro– Solo me importa verte feliz, y lo sabes –Deja un beso en su frente y se separa

—Te veo en cuatro meses, Sads

—Solo cuatro meses –Susurra la pelirroja para si misma, un último beso antes de separarse e irse, sollozando– No, no puedo –Antes de irse, vuelve para darle un fuerte abrazo– Te extrañaré

—Yo también. Solo no te enamores de alguien más –Bromea, Sadie niega de inmediato con una sonrisa

—Jamas podría –Se separa del abrazo y deja un beso en su frente antes de salir por la puerta de la habitación

Al fin, Millie, la más fuerte en esa situación, se derrumba, abraza a su almohada y presiona su cuerpo en ella, no puede imaginarse cuatro meses sin su pelirroja

Lapso de tiempo
Cuatro meses después

Esos cuatro meses fueron tortura, tortura extrema

Sadie no podía ni saludar a las personas, siempre estaba tan enfocada en enviarle mensajes a Millie y quién era ella para negarse

Millie se la pasaba en el hospital, pero siempre respondía sus mensajes. Su cabellera había crecido considerablemente, un hermoso cabello castaño que le llegaba hasta un poco más abajo de su barbilla

Se veía realmente hermosa

Dejándonos de cursilerías, Millie ya se encontraba de camino a casa, su verdadera casa

Esperaba que Sadie la recibiera con un grande cartel diciendo “Bienvenida”, y aunque lo hizo, Millie no estaba de humor para eso

Algo normal debido a que pasó cuatro meses en un hospital y poco más de cuatro horas en el transporte

Subió de largo a su habitación, Sadie frunció las cejas y subió con ella, dejando de lado el cartel

—¿Ni un hola? –Su sonrisa era considerablemente más pequeña

—Hola. Lo lamento, estoy muy cansada, ¿Podemos hablar mañana? –Su capucha estaba cubriendo su cabellera, y aunque Sadie quisiera quitársela, respetó eso

—Bien, lamento entrar a tu casa –Murmura ella– Nos vemos en la escuela

Sadie sale a toda prisa para recoger todo lo que había hecho, se va en menos de quince minutos y en cuanto Millie baja, lo único que puede ver es su sala sin ningún color llamativo

Solo suspira antes de ir por un vaso de agua y regresar a su cuarto

Extrañaba ese... Miserable cuarto

Buenas

Bueno, ahora que ya recompuse mis ideas, aquí les traigo su capítulo semanal

Los quiere

Mitaco5