Fanfic ganador 3er puesto en omegaverso 🥉.
Ad mendacim Awards 2023.
Un hermoso omega que nació con un aroma dulce, casi como una maldición , el cuál lleva a la locura de varios alfas.
Jungkook un muchacho donde ama su soltería, pero pierde la co...
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Jungkook y Suga se encontraron en la cafetería con los chicos, el dulce omega les había avisado que los esperaban ahí, ellos se hallaban hablando tranquilos.
-Hola mi osito. - saludo el alfa dándole un beso en los lindos labios.- Hola Park.
-Hola Jeon, y mi gatito? - dijo preocupado.
-Ya viene, se quedó estacionado el automovil.
Suga entró y el alfa se levantó para resibirlo besandolo con ternura. -Hola mi gatito. - le susurró.
-Hola mi alfa. - respondió murmurando al oído de Jimin .
El mozo se acercó a la mesa, no miró a ninguno de los cuatro, aun estaba todo moretoneado de los golpes que le había dado Jungkook. Jimin lo vio y soltó una pequeña risa, ese chico había entendido por las malas a no mirar a Tae.
Jungkook lo barrio con la mirada aún con ganas de volver a golpearlo. Pero por suerte para todos la tarde fue tranquila, el alfa mantuvo controlados sus celos.
-En unos días hay una fiesta de la universidad, son por las vacaciones de invierno. - hablo Jimin estaba emocionado. -Obvio gatito tú vendrás conmigo.
-Una fiesta, la última no resultó muy bien. - Jungkook negó con la cabeza, cruzando los brazos.
-Pero para esa fiesta, mi celo ya habrá pasado. - respondió Tae tratando de convencer a su novio poniendo ojitos de cachorro.
-Por mi esta bien, me gustaría divertirme un rato. - acotó Suga tímido, era demasiado introvertido. El alfa le sonrío y lo abrazo.
-Está bien osito, iremos. - a Jungkook no le gustaba la idea, tal vez por celos, o por el simple hecho de que le traía malos recuerdos.
Jimin y Suga saludaron y se retiraron, dejando a la pareja solos.
El omega seguía pensando en el sueño, pero como le preguntaría sin ser directo.
-Osito, en unos días llega tú celo. - hablo el alfa, sacando de sus pensamientos al omega.
-Si, lo sé. Pero tengo miedo que mis padres no me dejen estar contigo.
-También lo pensé. - se quedo unos momentos en silencio. -Y si nos escapamos juntos unos días?.
-Esa sería una buena anécdota, para contarles a nuestros hijos. - mientras reía y levantaba las cejas.
-Tengo un departamento, en el centro de la ciudad.
-Tenemos un problema.
-cuál?
-Los gorilas que me cuidan.- señalando a los guardaespaldas.
-Y si los mando a matar? - bromeo.
-Tentadora opción. - dijo riendo. -No me quedará de otra que hablar con mis padres o mejor dicho mi mamá, será más fácil de convencer.
