¿Una última pregunta? - Max Verstappen

Capítulo 13

Recibí un mensaje de Lando con la ubicación de la casa. Me cambié y me puse algo cómoda para ir a casa de Lando.

Cuando salí, Susie estaba saliendo de su habitación con el pelo mojado y mientras que se terminaba de peinar yo comencé a hacer el chocolate.

- ¿A dónde vas tan guapa? - preguntó.

- ¿Papá está durmiendo? - pregunté.

- Sí, estaba muerto ya - dijo y cogió su chocolate y salimos a la terraza.

- Voy a salir ahora con unos chicos, bueno más bien he quedado con Norris y Verstappen - dije y a Susie se le abrieron tantos los ojos que parecía que se le iban a salir.

- ¿Con Max? - preguntó.

- Y con Lando.

- ¿Verstappen?

- Norris, sí.

- ¿Max Verstappen el de Redbull, el piloto? - comenzó a decir de nuevo.

- Sí, Lando Norris el de McLaren - dije intentando dejar el tema de Max.

- Laia, lo único que espero es que tú padre no se entere lo de Max - dijo Susie.

- Si no lo dices tú vamos bien, y me va a ver hablar con él por el Paddock pero porque al final trabajo ahí - dije.

- Pero no por fuera del Paddock. Yo te guardo el secreto pero, tienes que tener mucho cuidado.

- Ya lo sé, son buenos chicos y me han invitado a pasar un rato con ellos ahora - dije mientras que bebía.

- Anda, vete y disfruta - dijo y me dio un beso.

- Adiós - dije y la abracé.

Cogí las cosas y me fui directa a casa de Lando.

Llegué a casa de Lando, estaba muy nerviosa y más después de haber tenido la conversación de Susie estaba un poco más tranquila, principalmente porque no quería que mi padre se enterará.

- Ya pensaba que no llegabas - dijo Lando cuando me abrió la puerta.

- No sé qué hago aquí la verdad - dije y lo miré, tenía una gorra hacia detrás y la ropa de su merch.

- ¿Por? - preguntó Lando.

- Os acabo de conocer - dije.

- A ver, eso nada. Somos jóvenes tenemos que disfrutar - dijo Lando.

- Si tu lo dices.

- ¿Vas a pasar la  oportunidad de empezar a disfrutar de la vida después de todo lo que haces? - preguntó Lando.

- Ya, en eso tienes razón - dije y lo miré.

- Entra anda - dijo Lando.

- Mejor no, creo que ha sido una mala idea - dije.

- Ven acá anda, no te comas la cabeza. Piensa que somos del mismo círculo, mismas edades y encima del mismo mundo - dijo Lando mientras que me cogía de la mano para frenarme.

- Pero... - dije.

- Tienes que disfrutar anda - dijo Lando y me entró en la casa y me abrazó.

Entré a la casa y caminamos hasta la terraza donde se escuchaba bastante ruido.

- Tenemos a una invitada especial - dijo Lando cuando salimos a la terraza.

Max se quedó sin palabras al verme y yo me puse un poco nerviosa porque no paraba de mirarme, también estaba Alex Albon, Charles y su hermano, y algunos amigos de Lando.

- Hola chicos - dije y todos me saludaron.

- Tienes un sitio al lado de Max - dijo Albon, mientras que se levantaba y cogía una silla.

- Gracias - dije y sonreí.

Me acerqué donde estaba Max, me senté y Max me sonrió, pero estaba muy serio.

- Estás muy callado - dije.

- ¿No estabas ocupada? - preguntó Max.

- Sí, pero no quería perder la oportunidad y me he escapado - dije y lo miré y sonreí.

- Bueno, me alegro que vinieras y que disfrutes - dijo Max y sonrió.

- Espero no arrepentirme - dije.

- Espero que no - dijo y me miró.

Comenzamos a hablar en grupo, la verdad es que me lo estaba pasando muy bien, las conversaciones eran muy interesantes y cuando se hablaban de cosas series ellos cambiaban.

- Y bueno Laia, ¿Tienes pareja? - preguntó Albon.

- No, y por ahora no están en mis planes - dije.

- ¿Y eso? - preguntó Charles y todos me miraron.

- Una muy mala experiencia, lo pasé muy mal así que pasando de la vida amorosa. No busco nada de nada  - dije y Max me miró.

- ¿Ni un rollo? - preguntó Lando.

- Menos todavía, estoy cerrada a todo. No me quiero ni enamorar ni ilusionar - dije.

- Veo que estás muy decidida - dijo Charles.

- Pues sí, la verdad es que pasó de los chicos, a ver de amigos encantada y de quedar pero ya - dije.

- Bueno, a muchos nos han roto el corazón - dijo Lando.

- Sobre todo a ustedes, eso es al revés. No sabéis la cantidad de mis compañeras de profesión que están detrás de ustedes - dije.

- Normal, ¿me has visto? - dijo Lando.

- Puff, es que querido Lando, las conquistas y luego las dejas con la miel en los labios - dije.

- Ya lo sé - dijo y me guiñó su ojo derecho.

Seguimos hablando en grupo y diciendo tonterías. Conocerlos fuera de su mundo era increíble porque son muy divertidos y te hacen sentir muy agustos.

- Gracias por invitarme - dije despiendome de Lando cuando todos nos íbamos.

- Gracias por venir - dijo Lando.

- Y porque me obligaras a quedarme - dije.

- Y menos mal - dijo Charles.

Salimos de casa de Lando, y nos despedimos todos en el portal.

- ¿Tienes el coche muy lejos? - preguntó Max cuando todos se marchaban.

- Un poco - dije.

- ¿Te acompaño?