Collection

No sueltes mi mano.

Asuna miraba de un lado a otro. Debía de ser una broma, ¿verdad? En ese bosque no había fantasmas, ¿verdad?

*Crash*

—¡Kya!

—Este, Asuna-san... ¿Estás bien?

Kirito generalmente no usaba los honoríficos; estaban dentro de un juego y usualmente todos eran informales. Cuando tu vida está en constante peligro, las formalidades son lo de menos. Por supuesto, había excepciones, pero él no era uno de ellos. Sin embargo, en esa ocasión las utilizó como forma de mostrar su incomodidad. No era que en sí le disgustara que aquella bella joven se aferra a su brazo, pero claro que no. No, eso en sí no era el problema. Su conflicto era más que nada que no sabía cómo reaccionar. Como un chico asocial con cero experiencia con las chicas y que se había refugiado en los videojuegos por mucho tiempo, ese tipo de situaciones eran nuevas para él.

Tal vez alguien más en su situación podría decir palabras de apoyo y hacerla sentir mejor. Pero lamentablemente solo estaban ellos dos y no podía cambiar ese hecho.

—E-Estoy bien.

*Bush, bush*

—¡Hyaaa! —Asuna gritó y se aferró aún más al chico.

—Todo es culpa de Argo. No tengo pruebas, pero tampoco dudas.

Por un instante Kirito quiso golpearse contra algún muro cercano. Nunca debió haber dejado a Asuna sola con Argo. Se arrepentía de haber tomado esa ducha horas antes de salir de aquel pueblo. Gracias a eso seguro que Argo habló de más y ahora Asuna estaba asustada.

¿Lo había hecho a propósito?

Tal vez sí, tal vez no. No estaba seguro, pero fuera como fuera, ya no tenía caso llorar sobre la leche derramada. Asuna estaba convencida de que en ese bosque había fantasmas.

Ojalá no se hubieran topado con varios monstruos durante el camino, pues de esa forma sin problema hubieran llegado al siguiente pueblo antes de que cayera la noche y ahora no estarían ahí, en medio de la oscuridad sin poder avanzar tanto ya que Asuna se sobresaltaba ante cualquier ruido mínimo.

—¿Asuna?

La mencionada, al darse cuenta que seguía aferrada como koala al brazo del chico, se separó rápidamente.

—Lo siento, estoy bien. Es solo que yo...

*Push*

—¡Hiii!

—Por supuesto que no estás bien... —Pero qué más podía hacer si no parecía querer ayuda. Kirito suspiró y trató de pensar en una forma de ayudarla—. No estamos avanzando mucho... —susurró para sí mismo, sin ninguna intención de hacerla sentir mal, sino más como una realidad que le pesaba, pues si salieran rápidamente, la chica ya no estaría sufriendo como lo estaba haciendo.

Por otra parte, Asuna sabía que estaba reteniendo su avance, pero no podía evitarlo. Tras esa plática con Argo y tras ese inocente comentario por parte de la rata, no supo qué hacer para quitarse esa idea de su mente y ahí estaban las consecuencias; no avanzaban como debería y solo incomodaba a su acompañante.

Fue por eso que rápidamente lo medito y se decidió por una solución que les ayudará a avanzar sin mucho problema. Lamentablemente no era infalible, pero de eso a nada... Algo era algo. Por ello, estiró la mano hacia el chico.

Sin embargo, Kirito no comprendió la decisión de la chica y solo se limitó a mirar la mano que le ofrecía la chica con confusión en espera de que la chica le explicara el motivo tras su acción.

—... mano...

—¿Eh?

—¡Dije que la mano! —gritó avergonzada y con la mirada baja—. Tomémonos de la mano, ¿sí? —pidió con un gran sonrojo.

Kirito se quedó sin habla pero tomó la mano de la chica.

—No la sueltes, ¿sí?

—No lo haré —dijo el azabache avanzando junto a la chica.

—Definitivamente no la debes de soltar, ¿entendido?

—Lo juro —respondió apretando su agarre.

—¡En serio, en serio, en serio no lo hagas, ¿sí?!

—Sí, sí.

—No sueltes mi mano por lo que más quieras, ¿sí? —susurró más para sí misma que para él, pero el azabache la alcanzó a escuchar.

—Nunca lo haré —pensó para sí mismo sin entender qué demonios estaba pasando con él—. Definitivamente jamás te soltaré —prometió mirando la luna. No sabía si cumpliría su promesa en el futuro, pero en ese momento, se aseguraría que así fuera.

Horas después, finalmente llegaron a su destino, sin embargo, ninguno soltó la mano contrario. Uno, porque esa había sido la promesa que hizo, y el otro... porque era agradable estar de esa forma.

Lo que sucedió después, es otra historia.

『 Fin 』 

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Hi, hi!

Buenas! 

Hoy finalmente es el cumpleaños de mi reina Asuna y da inicio a la Kiriasuweek!! :3

Este año decidí que los días canon estuvieran en un mismo apartado porque, en mi mente por lo menos, están ubicados en la misma linea del semi-canon que creé, así que aquí estarán viendo esos días y los AU en uno aparte porque son historia totalmente separadas. No serán muy largos los OS; lo escribí más pensando en que fueran Drabbles porque no quería dejar pasar desapercibido este año y este evento que desde hace ya tres años comence a participar. Aunque sea con algo pequeño quiero seguir contribuyendo y aquí estoy, con mi veinteava historia de esta bella pareja :o 

En fin, espero les haya gustado y nos vemos en el siguiente día.

「 Luna de Verano 」

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『 Porque su mano le hace sentirse segura 』

『 30 de Septiembre』