ONE SHOTS MULTI RHAENYRA

Harwin Strong

Capitulo Anterior: Harwin Strong

La noticia llega a ella tarde.

El día que había ocurrido la desgracia, su familia y ella se habían estado trasladando a Rocadragon.

Había demorado en acomodarse en su nuevo hogar y por ello tardo en leer la carta de que su padre le había mandado a penas el día siguiente de su partida.

Cuando finalmente tuvo tiempo libre, lo primero que hizo fue escribirle una carta a Harwin.

Querido Harwin,

Tal vez ya te hayas enterado de que los niños y yo nos hemos mudado a Rocadragon, lamento no habértelo dicho antes, pero al no tener tu compañía no creí que fuera necesario que permaneciera más tiempo en ese horrible lugar.

Te extraño, los días han sido sombríos sin tu voz y risas, y las noches han sido más largas sin el calor de tu presencia.

Los niños también te extrañan. En especial Jacaerys, tiene la sospecha que es tu hijo, de hecho, me lo pregunto el mismo día que te fuiste, se llamó así mismo "bastardo" y no sabes lo mucho que me dolió, porque muchos lo consideran y consideraran así por haber heredado su apariencia de ti, nadie tomará en cuenta las circunstancias en las que fue concebido.

Quiero decírselos, quiero que ellos sepan quién es verdadero padre y quiero que estes aquí cuando se lo diga a Jacaerys y Lucerys, sé que te duele escucharlos llamar padre a otro hombre, tal vez una vez se enteren de que tú eres su padre te comiencen a llamar así en privado, sé cuánto deseas escucharlos.

Espero verte pronto.

Tu amada princesa.

 Ella sello la carta y la dejo a su lado.

Tomo la carta de su padre, la abrió y la leyó.

Fueron apenas dos líneas, dos líneas directas y concisas, las que borraron parte del brillo de la princesa.

Lord Lyonel y Sir Harwin Strong están muertos.

La carta tenía unas cuantas palabras más, pero ella solo se concentró en la primera oración.

No, No, era imposible.

Él prometió que volvería.

Harwin no podía estar muerto.

Pero lo estaba.

Mientras parte de ella trataba de negar el hecho, lagrimas cayeron por sus mejillas y su cuerpo comenzó a temblar.

-No... No... No...

Poco a poco sus susurros pasaron a ser gritos; cada vez más fuertes, más largos, más dolorosos.

Ella estaba tan consumida por el dolor que sentía en ese momento que no fue capaz de notar como su esposo la llamaba a gritos o como sus hijos la llamaban entre sollozos.

Rhaenyra grito por horas, sin parar, mientras las lágrimas caían por sus ojos, mientras el aire apenas ingresaba a sus pulmones, mientras su garganta dolía a más no poder.

Sus gritos solo se detuvieron cuando ella finalmente se desmayó por todas las emociones que sentía en ese momento.

Cuando despertó al día siguiente, Laenor trato de hablar con ella, de preguntarle que le pasaba, pero ella simplemente lo ignoro.

No espero a las plebeyas y se cambió por su cuenta.

Se tomo unos minutos para tranquilizar a sus hijos, cosa que fue muy difícil porque todo lo que veía al verlos era a Harwin.

¿Cómo podía decirles a sus hijos que su padre estaba muerto?

¿Cómo podía decirles quien era su verdadero padre y que él estaba muerto?

¿Cómo podía decirles que el hombre con el que habían crecido había muerto?

Pero no lo haría, al menos no aún.

Tenía que comprobarlo, una parte de ella se negaba a creer que Harwin estaba muerto.

Y eso es lo que hizo, se despidió de sus hijos, tomo un caballo y cabalgo sin parar hasta Harrenhall.

Cuando llego al palacio, sintió que sus esperanzas comenzaban a flaquear.

Si bien el palacio aún se mantenía en pie, claramente había sido muy dañado por el fuego.

Ella había estado en ese lugar antes, Harwin se había encargado de mostrarle el lugar en donde había crecido; así que, ella sabía dónde estaba el lugar al que tenía que ir para darle fin a su dolor o su incertidumbre.

Se dirigió al cementerio Strong a pasos lentos.

Posiblemente la caminata más lenta de su vida y también fue la más dolorosa.

Paso al lado de cada tumba, leyendo los nombres mientras rezaba a los dioses no encontrar el que había ido a buscar.

Pero los dioses ignoraron sus suplicas y después de minutos de caminata lo encontró.

Sir Harwin Strong

(92dc-120dc)

Un sollozo salió de sus labios y el dolor que sintió el día anterior nuevamente la invadió.

Sus rodillas cedieron y ella callo al piso.

Era cierto, Harwin, su amado Harwin estaba muerto.

Él no debió morir quemado en un incendio como si fuera una persona común.

Harwin merecía una muerte con honor, una muerte en batalla o una muerte longeva rodeado por su familia.

Si ella no hubiera aceptado tomarlo como amante, él pudo haber tenido una mejor vida una esposa amorosa e hijos encantadores que pudieron llamarlo padre públicamente.

Ella lo arruinó, se dejó guiar por sus sentimientos y lo arruinó.

-Lo siento... lo siento... lo siento... lo siento por todo-susurro ella con voz ronca y rota, mientras las lágrimas caían por sus mejillas- Te amo..., te fuiste y nunca te dije, te amo Harwin, perdón, por tartar tanto en decírtelo.

Lo siento, estoy triste por el último capítulo y sé que no nos van a dar la despedida de Harwin y Rhaenyra; así que la escribo yo :(