𝑨𝑵𝑮𝑬𝑳 𝑶𝑵 𝑭𝑳𝑨𝑴𝑬𝑺 .𝑰 // 𝑨𝑳𝑬𝑪 𝑳𝑰𝑮𝑯𝑻𝑾𝑶𝑶𝑫

.XIV

-Me quedo con el- les dije sacando mi cuchillo serafín de su estuche y Alec me miro pero no lo deje hablar. -Necesitas a alguien que te cuide la espada Y Jace junto con Izzi estan mas capacitados para llevar la copa mortal a salvo al instituto. No es una opción, vayan.- les dije para que los otros tres salieran de ahí.

-Te estas tamaño mas en serio este papel ¿No es así?- me pregunto Alec cargando su arco y me encogí de hombros mirando a los lados. 

-Soy una Shadow hunter despues de todo ¿no?- le dije y escuchamos pasos acercándose. -Ya vienen.- le susurre y el asintió, la puerta se abrió y pude ver a Luke o por lo menos se parecía. 

Alec levanto su arco y apunto a el mientras yo sostuve la espada con fuerza. -Soy yo Mack- me dijo y yo lo mire con duda. -En segundo año mordiste a un niño que te molestaba, llegaste llorando por que temías que le hubieras pegado rabia.- suspire y baje mi arma. 

-Es el, esta bien.- le dije a Alec tocando su hombro- Tenemos que buscar a Clary.- eso hicimos y al encontrarla pude ver que había rastros de un demonio en el suelo.

-Tal parece que no necesita ayuda.- dijo Alec con una media sonrisa. 

-Tenemos que irnos ya- nos dijo Clary- Los demonios...

-No te preocupes, tengo a la manada en alerta.- le dijo Luke y yo lo mire con una sonrisa. Al llegar al instituto nos encontramos con Jace movilizando todo para encontrar a Clary.

(...)

-¿Y que pasa conmigo? de cualquier manera.- les dije mientras hablaban de demonios pasando las salvaguardas. -Soy mitad subterránea mitad shadowhunter y no he explotado aun. 

-Podemos resolver eso despues- me hablo el mayor de los cuatro -Por ahora lo que importa es que la copa no esta a salvo aquí y tenemos que regresarla a la clave.

-¿a la clave? no se las podemos devolver despues de todo lo que pasamos para conseguirla.- le reprocho Clary.

-Alec tiene razón, la copa es muy importante como para tenerla solo en una bolsa- le dije señalando su bolso y Alec me miro. 

-¿Estas de acuerdo conmigo?- me pregunto y yo abrí mi boca haciéndome la ofendida. 

-Estoy de acuerdo contigo la mayor parte de el tiempo y que no lo tomes en cuenta en realidad hiere mis sentimientos- le dije provocando una lijera sonrisa en sus labios, discutimos de nuevo sobre que ocurriría con la copa hasta que  la llevo a lo que parecía una caja fuerte. 

Estábamos en el centro de operaciones cuando la alarma se activo, comenzamos a caminar hacia la salida por alguien tratando de entrar sin invitación, sujete mi cuchillo serafín cuando vimos la silueta de alguien. 

Pero todos bajamos nuestras armas cuando vimos a Rafael con el cuerpo de Simon inconsciente.  Lo llevaron hacia el instituto y lo dejaron en una de las habitaciones que parecía un sótano. -Los vampiros rompieron los acuerdos- les dije mirando el cuerpo de Simon -Según eso matar a Simon es motivo de guerra. 

-Los vampiros no tienen nada que ver con esto, solo Camille.- nos respondió y honestamente no estaba sorprendida. - Ella ataco sola a Simon.

-¿Como sabemos que nos dices la verdad?- le pregunto Jace con saña.

-Pude haberme deshecho de el, pero lo traje aquí. No quiero problemas con los Shadow hunters. -Nos miro a todos. -Le advertí al mundano que se se alejara, pero Camille le dio a probar su sangre y como un adicto...

-Volvió por mas.- termine de decir y Rafael sugirió el convertirlo por completo. -Clary, no lo hagas.- le dije cuando lo considero. 

-¿Vivo y respirando?

-Ese es el problema- le dijo Izzi.- No regresara vivo y respirando, será un vampiro. 

-Tienen hasta antes de el amanecer, debe ser convertido en vampiro o recibir una estaca en el corazón, es cuenta regresiva.- nos dijo mientras Clary lloraba. Decidí que en cualquiera de las dos decisiones yo no estaría presente por lo que subí a buscar algo para distraerme. 

Un par de horas despues estaba caminando por el instituto hasta que me encontré con Alec y su hermano pequeño Max. -Alec ¿Crees que podrías devolverme mi estela?- escuche que le pregunto.

-No quiero ser metiche pero ¿Por que le quitaron su estela?- le pregunte llegando a su lado y Alec soltó un bufido. 

-Se la quitaron por que casi quema el instituto de Mumbai- me explico mientras caminábamos y yo solté una pequeña risa. 

-¿Cuantas veces tengo que decirte que fue un accidente?- le pregunto el menor y nos detuvimos frente a el pasillo de la entrada para que Alec se colocara a su altura y hablara con el. 

-Mira, Max. Va a venir alguien importante a visitarnos y necesito que te quedes fuera de problemas por un par de días, si puedes hacer eso te prometo que te devolveré tu estela. -Dirigió su mirada hacia mi -Y tal vez a ti te den una- me dijo con una media sonrisa, pronto las puertas se abrieron dejando ver a Valentine, Alec rápidamente coloco a Max detrás de el y yo saque mi cuchillo serafín para que ambos arrojáramos una flecha y el cuchillo.

Pronto paso por su brazo su estela y dejo de ser Valentine para ser una mujer de la edad de Alec -Ese tiempo de reacción fue pésimo- nos dijo caminando y nos miro -Excepto ustedes dos. Soy Lydia Branwell, enviada de la clave.

Honestamente, tengo pocos minutos de escucharla hablar y es algo irritante, si parece que trabaja en la clave. -Esta en el campo, entrenando.- le respondió Alec.

-Entonces esta sola en las calles de Nueva York- concluyo la rubia con una sonrisa sínica. -Bueno por lo menos una de dos se encuentra aquí. - dijo mirándome mientras me analizaba de pies a cabeza -No pareces una mujer lobo en realidad. 

-¿Por que no? ¿No tengo piel por todos lados o algo asi?- La madre de Alec me miro como si estuviera loca pero esto solo provoco una risa en Lydia.

-Eres tan irreverente como me advirtieron- me dijo y se fue, estaba en mi habitación cuando Alec llego y me llamo la atención.

-Atacaron el Jade Wolf.- de inmediato me levante y camine hacia el centro de operaciones. 

-¿La central de los hombres lobo? ¿Donde...- Maryse iba a hablar pero Lydia termino la frase. 

 -Fotos de el líder de la manada.- respondí.

-¿Eres amiga de Lucian Graymark?- la rubia seguía cuestionándome.

-Es mi padre.- respondí de manera seca para caminar hacia la salida de el instituto.