capitulo 1

632 86 104
                                    

Cada vez más la noticia se esparcía por todos lado

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Cada vez más la noticia se esparcía por todos lado.

La caída de ángel desterrados al mundo humano, era perturbador.

Su mala fama nos dejaba boquiabiertos.

Dentro de mi, Siempre hubo una parte que querría conocerlos, pero aquel día, aquella hora que me tocó presenciar aquel ser, fue todo lo contrario.

DIAS ANTES.

Laura, tendrás que quedarte sola en casa por unos días, tu padre y yo iremos a casa de tu tía guillerma en NY, está muy grave y necesita de nuestra ayuda.

──Maldición ─ másculle entre dientes, no me agradaba la idea de quedarme sola en casa, detestaba saber que solo mi presencia permanecería allí.

Mamá, podría acompañarte a ti y a papá, sería de buena ayuda mi presencia ─ dije haciendole mimos, pero no sirvió de nada, no me dejó ir, debía ir a la universidad y la casa no se podría quedar desolada.

Mucho menos podía hacer berrinches, después de todo, ya estaba bastante grande.

AQUELLA NOCHE.

Alli comenzó todo, cuando aquel tremendo ruido, me espantó por completo, hasta el punto de provocar que la luz se fuera en casa.

Al salir el humo provenían desde la parte trasera, cómo también unos que otros gemidos débiles.

──mierda ─ dije tapando mi boca al tiro.

Era un hoyo profundo, mientras las piedras se esparcía por todos lados.

Tosia una y otra vez, a causa del todo el polvo que inhalaba.

En medio de una mirada confusa y perdida, pude ver aquella manos sujetarse de la parte superior, para poder salir a su superficie.

Al verlo mis ojos se ditalaron, y en mis venas corrían más que miedo.

¿Podrías ayudarme? ─ estoy muy débil necesito ayuda ─ dijo mordiendo sus labios.

Quede anonadada ─ no sabía cómo responderle, el se encontraba semi desnudo, toda su ropa se encontraba quemada.

Sus alas se encontraban en ese mismo estado, mientras sus heridas abierta, derramaban sangre sobre el césped.

Su presencia me provocaba escaló fríos, sus ojos parecían agotados, sin contar que respiraba incontrolable mente sobre el césped.

No tenía más opciones que llevarlo a casa y ayudarlo.

──Ehh  ─ chille fuerte al no saber que decir.

Me acerqué hacia el para ayudarlo y llevarlo a casa, no tarde mucho en llevarlo a la ducha caliente, mientras pasaba un pañuelo por todo su rostro, retirando todo el lodo de sus mejillas, en tanto la tensión entre los dos era inigualable.

── mi mirada inconsciente mente hacia contacto visual contra los suyos, dejándome perturbada y a la vez triste al ver aquella mirada de dolor y odio.¿Como lo hiciste? ─ pregunte, inquiriendo una ceja en alto.

──¿Aque te refieres? ─ preguntó con su voz gruesa.

──¿Como hiciste para que desaparecieran tus alas?

──Solo es algo mental ─ dijo mientras salía un leve quejido de dolor.

──¿Y, que tienes para decirme?

──¿Que quieres que te diga? ─ Recalcó frunciendo su ceño.

──Te apareces en el patio trasero de mi casa a las 2 am, destrozado todo el césped ─ ¿que se supone que le diré a mis padres cuando regreses en unos días?

«Que encontré un ángel en el patio trasero» pero fue allí, cuando no me dejó terminar la palabra y me interrumpió.

──Nunca me confundas con un ángel ─ negó mientras salía sangre de su nariz, por la fuerza que ejercío al chocar su manos en la bañera, dejando una parte rota.

──No sé dónde diablos saliste, pero necesito respuestas.

Destrozaste el patio trasero, y ahora también la bañera respondí de forma encabronada.

tenerte cerca es tan perturbador ─ pronuncié en voz baja, pero no sé cómo diablos me escucho.

──mas perturbador son ustedes las mujeres ─ recalco mirándome fijamente a los ojos, se puse de pie hasta llegar a la habitación dejando rastros de agua por todo el camino que recorrió, mientras por otro lado yo no podía pretender  que me sentía conforme con su respuesta.

Segundos después de haber limpiado sus heridas, todo parecía normal, hasta que alguien llegó en la puerta, tocando sin parar.

Al abrir pude ver a una chica joven al igual que yo, la cual me miraba de pies a cabeza, solo fue en cuestion de segundos cuando la chica que estaba enfrente de mi, entro a casa como una ráfaga de luz.

Pero al entrar a la habitación, ella estaba allí enfrente de Gabrielle, tocando su rostro lentamente, cómo si se hubieran conocido antes.

──Retirate de la habitación ─ me dijo Aquél chico con un tono de superioridad, dejándome aún más confundida, pero fue tarde, cuando aquella chica se encontraba detrás de mi apretado mi cuello con sus garras.

──Que diablos sucede aquí ─ vocifere con mi voz agitada.

Aún no podía creer lo que estaba sucediendo, primero encontre a un ángel, pero a la vez dice que no lo confunda con ese ser.

y ahora veo una chica entrar a mi casa para matarme.

Esto ya se estaba saliendo de control y no tenía ni la más mínima idea de lo que sucedía.

Nota de la autora:
Gracias por tomar de tu tiempo y leer mi historia, espero que te haya encantado, y espero cumplir sus espectivas, si ven algunas faltas ortográficas trataré de arreglarlo, y daré siempre lo mejor de mi para tratar de traerles algo bueno y sobre todo que lo puedan disfrutar ❤️

Instagram: Daisaidi 🖤

GABRIELLE ©Where stories live. Discover now