La Hermana de Buzz || El Teléfono Negro

Capítulo 28

Ashley

Mi vista estaba nublada y mis ojos ardían, trataba de ver algo pero solo veía blanco, sentía como alguien me llevaba en su hombro o lo que sea que fuera pero sentía que me cargaban. Mi garganta estaba seca y picaba, no podía hablar, que había pasado, el hombre, el hermano de Max era el raptor

-Aquí estarás a salvó -la voz del raptor llegó a mis oídos, trate de hablar pero no pude -Mi dulce niña traviesa -dijo aventandome contra lo que parecía ser una cama -Supongo que no vez nada -se escuchaba frente a mi

Escuché como cerro una puerta y me quedé acostada en la cama o colchón, no se que fuera, me sentía débil y sin pensar me quedé dormida

-Te atrapo -dijo la niña desde la esquina del cuarto

-Que -pregunte tratando de acercarme a ella pero se alejo -Quien eres -

-Eso ya no importa -dijo cabizbaja -Debes irte -me vio -Te hará dañó -

-Como -la ví pero se veía oscuro todo

-No hay escapatoria -comenzó a decir una y otra y otra vez

-Basta -trate de calmarla pero solo repetía lo mismo

Mi cabeza comenzó a dolerme y caí al piso cuando todo se puso negro

Abrí los ojos rápidamente y observé el lugar donde estaba, estaba en el sótano de mis sueños, al rededor de cuatro paredes sucias y con un ambiente pesado, estaba sentada en un colchón viejo el cual estaba muy sucio
La puerta se abrió dejando ver al raptor el cual tenía una máscara blanca que apenas y dejaba ver sus ojos, está máscara tenía cuernos y una sonrisa grande que abarcaba casi toda la cara

-Veo que despertaste -entro con una charola que tenía un plato de galletas y un refresco, me hice hacia atrás chocando contra la pared -Te traje esto -movió la charola para después dejarla en el piso, como si de un perro se tratase

-No tengo hambre -conteste sería -Que es lo que quieres -trataba de sonar tranquila pero mi voz temblaba

-Nada -parecia estar sonriendo -Por ahora -se dió la vuelta y avanza a la puerta -Te contaré una historia para que puedas dormir bien -señalo la única ventana que había donde apenas y se podía ver las luces de la calle, el subió las escalares dejando la puerta abierta, pude gritar, pude correr pero sabía que el me atraparía pues no tardó ni dos minutos en volver a bajar, está vez traía lo que parecían ser fotos

-Dejame ir -vi cómo se sentaba frente al colchón -No le diré a nadie -suplique con la voz quebrada

-No lo haré -dijo viendome -Pase mucho planeado esto para dejarte ir -su voz era otra, se escuchaba como si estuviera obsesionado

-Que -una lágrima rodó por mi cara y el soltó una carcajada

-Se que te gusta investigar Ashley -su vista fue hacia las fotos -Quiero contarte sobre mi vida en Carolina -me vio y me dió una foto

Era la foto de una niña pequeña, no tendría ni doce años, estaba muy delgada, su cabello le llegaba a la cintura y tenía un mechón blanco al igual que una parte de la pestaña y ceja

-Samanta White -dijo viéndome -Tiene un parecido a ti -toco si ojo refiriéndose al mío

-La mataste -recogí mis piernas abrazándolas

-Fue muy traviesa -solto una risita y se acercó a mi

-Vas a matarme -lo ví y el nego -Pronto van a encontrarme, mi padre te matara por secuestrarme -dije lo primero que se me vino a la mente

-Tu padre -se burlo -El padre abusivo que tienes -pregunto -Así es Ash, yo sé todo de ti, estos meses yo fui quien estuvo detrás de ti -

-Eres un maldito enfermo -otra lágrima rodó por mi cara

-Tu madre pensaba lo mismo de tu padre -al ver mi expresión se acercó más a mi -No lo sabes -pregunto con burla

-Saber que -

-Tu madre no te abandono -no sabía cómo reaccionar a lo que me decía solo se que estaba realmente intimidada por el -Tu querido padre se encargó de enviarla al otro mundo -sonrío y quito la parte de abajo de la máscara dejando ver su sonrisa real

-Eso no es cierto -lo ví

-Claro que si -me dió una foto de una mujer muy linda, delgada, con una linda sonrisa, pelirroja y sus ojos se parecían a los de Buzz -Jannet -pronuncio lentamente -Ella es tu madre -al ver la foto no pude evitar llorar

Sabía que si lo era pues en los pocos recuerdos que tenía recordaba esos ojos esa sonrisa y su voz

-Mamá -toque la foto

-Conservala -dijo amable, me daban miedo sus cambios de humor -Para que sepas que también me gusta investigar -para este punto ya estaba sentado al lado mío

-Si vas a matarme hazlo ahora -dije sin dejar de verlo pero el paso su brazo detrás de mi y puso su dedo en mis labios

-Shshshs hablas mucho -susurro en mi oreja -No puedo matarte por qué me ayudarás con todo esto -movió su mano -Ya eres mía -acaricio mi cabello

Estaba temblando y mis lágrimas no dejaban de salir, tomaba la foto de mi mamá con mucha fuerza

-Es hora de que descanses -le dió un beso a mi frente y se fue dejándome sola con todo lo mal que se sentía el lugar, a qué se refería con que lo ayudaría

Me quedé pensando cuando el teléfono colgado en la pared sonó, sin pensarlo me pare rápidamente y lo tome

-Hola -dije esperando una respuesta -Hola -no se escuchaba nada y en ese momento me di cuenta que los cables es estaban rotos